–Perfecto, nos quedamos sin capitán de equipo –Soltó el entrenador Lee. Todos estaban atentos y aburridos de sus palabras –Abriremos una convocatoria para encontrar un nuevo miembro. –Agregó –Yo elegiré al capitán próximamente.Yuta trago duro. De alguna manera u otra tenía que esforzarse si quería ser el nuevo capitán y además necesitaba el apoyo de sus compañeros.
–Ahora vayan a ducharse –Ordeno para retirarse. Los chicos suspiraron con cansancio liberando toda la tensión que habían tenido durante el fuerte entrenamiento.
Los diez chicos se dirigieron a las duchas, Ten iba conversando tranquilamente con Jeno sobre el partido del fin de semana próximo; que al parecer su cancelará si no encuentran un integrante más y nombran al capitán.
–Realmente pienso que Yuta-hyung merece el puesto de capitán –Menciono Winwin, los demás apoyaron la idea e iniciaron un tema de conversación.
–Tendrás que ser el 100% responsable –Agrego Hansol –No como Hyukjoon –Dijo con molestia en su voz a medida que se encogía de hombros.
Yuta asintió repetidas veces.
Estaba decidido a ir por ello.
Y había alguien quien no prestaba atención a la conversación que sus compañeros estaban teniendo; nada más y nada menos que Lee Taeyong. Estaba absorto en sus pensamientos y esa persona que lo ocasionaba era quién por siempre babeaba la almohada.
Yoon Raehyun, otra vez.
Quería acercarse a ella y preguntarle cómo estaba desde aquel día, quería sentir su cercanía y oler su perfume a vainilla. El simple imaginárselo hizo que su piel se pusiera de gallina, no le había enviado mensaje ni mucho menos llamado desde aquel día.
–¿Saldrás con alguien para olvidar al estúpido? –Bromeó Hyomi, después de su encuentro en el baño se habían convertido en buenas amigas, iban en distintas clases pero eso no impedía su amistad.
–No soy así... –Desvió la mirada con un sonrojo.
–Si ese alguien fuese June de seguro no dirías eso. –Hyomi devoró su patata frita a la par que observaba entrecerrando los ojos a Raehyun. Esta rio, pues su amiga tenía razón.
Estaba en su descanso luego de haber terminado sus actividades con el equipo del reciclaje, Yuta les comento a algunos chicos que se abrió una convocatoria para encontrar un nuevo integrante para el equipo de futbol del instituto.
¡Pero a nadie le interesaba! Alrededor de doscientos alumnos tiraban el volante a la basura enfrente de Yuta quién se quedaba boquiabierto mirando las rebeldes acciones de los alumnos.
–Nunca me sentí tan decepcionado de mi propia escuela –Fue lo que él dijo.
Sólo una persona había aceptado el volante con amabilidad y hasta prometió que lo veríamos en las audiciones, era Mark Lee de un grado menor al suyo y era una ternura total. Si con Haechan y Jisung tenía un cariño maternal estaba segura que Mark se ganaría el corazón de Raehyun como lo hizo el pequeño Winwin.
El solo imaginárselo le ponía a suspirar como una niña viendo un bonito cachorrito.
–¿Saldrías con alguien del equipo? –Pregunto Hyomi metiéndose otra patata a la boca.
Frunció el ceño –: Claro que no... son mis amigos.
Hyomi le lanzo una mirada interrogatoria ¿qué demonios le pasaba? El timbre sonó y se levantó de la mesa sin antes despedirse de su amiga con un ''nos vemos a la salida'' se encaminó a los pasillos. Últimamente estaba bastante distraída y no podía pensar con claridad; no supo en qué momento se desvió tanto que llegué al campus donde no se asomaba ni un alma.
Una figura masculina se enfocó en su campo visual –: ¿Taeyong?
El nombrado salto en su lugar y lanzó lo que parecía ser un cigarrillo al suelo.
–¡Mierda, me asustaste! –Toco su pecho y exhalo. –¿Qué haces aquí? –Su profunda mirada que le hizo achicarse en su lugar. La chica alzó los hombros en respuesta y pudo notar que él alzó la mirada al cielo.
–S-Sabes... supongo que ya que estamos aquí debería agradecerte... –Bajó la mirada. Tal vez ya no podía verle a los ojos desde aquel día.
–Ya me habías agradeci-...
–Siempre estaré en deuda contigo –Se animó a mirarle. La confusión en sus ojos era muy notable.
–Pues supongo q-qué...
–Perdón por no haberte llamado. No tenía suficiente valor para hacerlo. –Taeyong abrió levemente sus labios pero no emitió ninguna palabra.
Quién sabe cuántos minutos estuvieron callados, el único sonido que se escuchaba era el de los pies de Raehyun haciendo círculos en el suelo, Taeyong metió sus manos dentro de los bolsillos y camino hasta el lado de la chica.
–Nos vemos luego.
Y desapareció.