9 meses

Capitulo 27

"Sentimientos"

Después de esta mañana, Lapis no quitaba a la rubia de su mente y cuerpo. Sólo podía pensar en el rostro relamiendo sus labios mientras gemía. Se sentía como adolescente hormonal, sólo pensar en la noche alborotada con ella la calentaba deseando más, seguro era por el embarazo, la etapa donde el libido es alto.

Peridot le daba sonrisas y algunas miradas perversas, pero no las respondía. Primera vez en la que se le hacía difícil concentrarse en su libro y la clase estaba completamente callada, pero sólo pensaba en ella, la volvía loca no solo por el sexo si no porque estaba trayendo sentimientos mezclados a su corazón; al contrario, la rubia no recordaba del todo la noche anterior aunque por lo que Lapis le daba a entender por su lenguaje corporal, fue grandiosa.
Lapis se sentía extraña, y no era el bebé, era un estado confuso: amor y enojo. Puede ser por lo repentino e infantil que fue el acto y que a la vez se sintió grandioso. Pero ¿y si Peridot solo la utilizaba con un fin sexual? las veces la trato de tener en cama eran demasiadas, tal vez solo la utilizaba, su mente divagaba con estas preguntas las cuales se azotaban en su mente. El timbre del recreo sonó y como era habitualmente los estudiantes salieron corriendo.

Las manos de la rubia la detuvieron antes de dirigirse al baño.

—Oye, ¿te encuentras bien? —preguntó mientras tomaba su mano.

—Si, si, lo estoy... —respondió con una sonrisa notoriamente falsa.

—No te creó, has estado distraída en clases y es algo raro. ¿Te sientes bien? ¿segura que no dañe al bebé? —preguntó angustiada.

—No, no lo hiciste, el pene no llega más allá del cuello de la vagina, así que no alcanzo al bebé.

—Bueno..., que sigas siendo una nerd me alivia. —bufó, trato de tomar la mano de Lapis pero la alejo evitando que incidiendo esto. —¿Porque actúas tan extraño?

—No es nada... —contestó con melancolía— Solo estoy cansada...

La peli-azul se dirigió a su alcoba, Peridot estaba confundida ¿ya no la quería? solo la evitaba, tal vez estaba molesta por lo de anoche, pero las risas en la mañana decían lo contrario. Eran tal vez cambios de humor en el embarazo, no entendía porque la morena era se volvió tan cortante con ella.

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