(17) La Exposición.

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La Exposición.

*



El día estaba airoso ese viernes. Estaba nublado y parecía que en cualquier momento llegaría una enorme tormenta. El día estaba igual a como me sentía yo en ese momento. Con una enorme tormenta en mi interior.

Había salido temprano en la mañana para no tener que dirigirle la mirada a Evan después de lo que casi pudo pasar anoche. Aun me sentía estúpida por no saber lo que sentía por él y eso me molestaba más que tener que enfrentarme a los revoltosos chicos de noveno y onceavo. Todo esto estaba pasando muy rápido y lo sabía. El día que lo vi sentado en la oficina de la directora no me imagine que todo lo que sea que este pasando entre nosotros llegara a pasar.

Issie entro a el aula y se sentó en su respectiva silla que estaba a mi par. Su sonrisa me dejaba una muy clara vista de cada uno de sus dientes y eso solo me indicaba que realmente le emocionaba todo esto de la exposición.

- ¿Estas lista? - me preguntó sin darse cuenta de lo cansada que me tenían esas dos palabras.

- Más que eso. - dije con sarcasmo.

Ella me dio esa mirada de "por favor Effie vas a estar bien" mientras que yo como respuesta a eso solo voltee los ojos. En el aula solo habían como siete chicos en total así que no había tanto escándalo como esos días en los cuales yo llegaba más tarde, pero sé que en cualquier momento la misma se va a llenar con los 35 chicos que somos como por arte de magia.

- Todo va a salir bien. - dijo Issie mientras sacaba un libro de su mochila verdosa.

No quise responder, en cambio, solo seguí repasando lo que me respondía decir. Todo estaba anotado en una página la cual estaba medio arrugada desde ayer que estuve en el cuarto de Evan. Le había dicho que tuviera cuidado cuando se acostara a mi par porque ahí estaban mis papeles, pero él no me escuchó y se acostó arrugándolos todos.

Evan.

Tengo que dejar de pensar en él, Dios mío. Cuando voy a aceptar que él no es para mi y yo mucho menos para él. Agradezco que hoy es la última noche que paso en su casa y que al menos ya todo va a volver a la normalidad.

Después de varios minutos la clase se lleno con todos los chicos y ahora solo se oía el sonido de sus voces combinadas que no dejaban entender nada de nada.

En cualquier momento la campana tocaría para indicarnos que vamos a clases, o mejor dicho, para indicarnos que vamos a exponer. Somos el segundo grupo en exponer y eso solo me provoca escalofríos y nervios.

Mi mirada bajo por completo al papel arrugado y dejé que pequeños mechones de mi pelo me cubrieran la cara. Evan había entrado a el aula y lo último que quería en este momento era dirigirle la palabra, por eso mismo había salido temprano de la casa.

Apreté con fuerza la palma de mi mano que estaba cubierta por la manga de mi sudadera y dije a lo bajo la partes que me tocaban decir para darle a entender que estaba ocupada, y que no quería que me hablara. Él paso a mi lado y suspiré cuando me di cuenta que se había ido a sentar a su silla.

- Estás muy rara. - me dijo Issie mirándome con el ceño fruncido.

Levanté la vista a ella y voltee los ojos. Un día de estos mis ojos van a quedar atrás de tanto que los volteo.

La campana tocó y mis nervios subieron al oírla. El profesor Bryant llego minutos después indicándonos que teníamos que bajar a sala de conferencias, que era el lugar donde las exposiciones se llevarían a cabo. Me levanté de mi asiento con el papel en mis manos y escuché que Issie me susurró algo que no pude entender.

La Chica Detrás del Blog. - [Libro I] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora