Kill For Live.

Hard As A Rock.

Patricia tenía un par de días quedandosé en casa de Oswald, y aún le quedaban otros tres, así que habían  decidido que saldrían a cenar, todos juntos, a un restaurante bastante lujoso de Echoes. Mientras Patricia se daba una ducha, Gabrielle buscaba ropa, y Charlotte se encontraba lista, leyendo en la biblioteca mientras los esperaba, Oswald estaba en su habitación, arreglandosé. Mientras se ponía su camisa azul oscuro, pensaba en lo que le había dicho Patricia días antes. Le preocupaba lo que pudiera hacer Amenoff. Ahora que tenía a una niña a la cúal proteger, no le agradaba la idea de ser atacado, y su preocupación seguía creciendo por lo que le pudiera pasar a Charlotte. Ya vestido, salió a el balcón, y encendió un cigarrillo, el último de la cajetilla. El sabor era amargo, pero disfrutaba la sensación del humo bajando por su garganta y traquea, hasta llegar e inundar sus pulmones.
- Necesito tranquilizarme.- Dijo para si mismo, mientras le daba una fuerte calada al cigarrillo. Entonces Charles se le acercó, se puso a un lado suyo, y preguntó.
- ¿Que te preocupa Oswald? Estás mas serio de lo normal.-
- Estoy nervioso Charles. Tengo un mal presentimiento por lo que me dijo Patricia.- Respondió Oswald, mientras soltaba el humo.
- ¿Crees a Amenoff capaz de atacarte, aún cuando traes a Charlotte?-
- Sí. Los Rusos son vengativos, y muchas veces no les preocupan las consecuencias, y Vladimir Amenoff es más vengativo que el promedio.-
- Cálmate Oswald. Patricia dijo que lo más probable es que Amenoff envíe matones, y no creo que el vaya a hacer acto de presencia. Además, nosotros vamos contigo Oswald, si algo llega a pasar, cuentas con nosotros para ayudarte. Dudo que haya alguien tan estúpido como para atacar a un grupo de seis mercenarios y la Canciller de un país. Relajate.-
- Tienes razón Charles, no hay nadie tan estúpido ¿Verdad? Además, sea quién sea, podemos asesinarlo.-
- Exacto. Así que calmaté cabrón, hay que irnos.-
- Vamonós.-

Bajaron las escaleras y los demás ya los estaban esperando abajo.
- ¿Porqué tardaron tanto? ¿Estaban teniendo sexo o qué?- Preguntó Patricia sarcásticamente.
- Sí cabrones, no jodan, ya se nos está haciendo tarde, vamonós ya, o perderemos la reservación.- Dijo Jeez dirigiendosé a Charles y Oswald.
- Ya, ya nos vamos. Ya suban a sus autos.- Respondió Oswald mientras se abrochaba su blazer.

Salieron de la casa y subieron a sus respectivos autos; El Chevelle de Charles, a quién le gustaba viajar sólo, él Jetta de Miyazawa y Aniaki, y Patricia, Charlotte, y Gabrielle iban con Oswald en ún Mazda 6. Las alarmas se quedaron activadas, y salieron de la propiedad rumbo al restaurante Langley's, que estaba en el centro de Echoes, por lo que no les tomaría mucho llegar.

Oswald no se había podido tranquilizar por completo, así que llevaba consigo un arma sumamente potente, una revólver Smith & Wesson 500, en caso de que su mecanismo generador de armamento fallara. Sentía algo extraño dentro de sí mismo, algo parecido al miedo y tenía razón para hacerlo.

A unas cuadras del restaurante estaba Cobblestone, adentro de una camioneta Suburban, esperando a qué el auto de Patton pasara rumbo al restaurante, y así el acercarse, para cuando éste saliera, emboscarlo. Cobblestone era un hombre afroamericano increíblemente alto y fornido. Medía 1.98 mts, y pesaba 125 kg, y podía formar una coraza de piedra tan dura como el acero sobre su piel, lo cuál lo hacía un contrincante formidable, además de peligroso. Después de un rato el automóvil de Patton pasó, y Cobblestone, con cuidado de no llamar su atención, encendió su camioneta y fue tras él, cuando saliera lo atacaría.
- Esto será pan comido.- Dijo para sí mismo, muy confiado en sus poderes, mientras tronaba sus nudillos. Iba escuchando su canción favorita, Hard As A Rock de AC/DC, lo cual lo hacía entrar en calor, y sentirse más seguro. Oswald Patton no sabría ni que lo golpeó.
Desde su vehículo vio a Patton y a sus amigos introducirse al restaurant, junto con Charlotte, la cuál no podía pasar desapercibida, puesto que llevaba un hermoso vestido estilo Lolita color menta.