· Que me quiera como soy. Y que no me lo diga, sino que me lo demuestre.
· Que cuando algo me salga mal no se burle, si no que me corrija con tacto y prudencia.
· Que me dé por lo menos el 50% de los obsequios que le hago constantemente. Más cuando es sentimental. Sea un afecto, una palabra positivas, un gesto de agradecimiento.
· Que siempre podamos hablar de algo constructivo o educativo en vez de ocuparnos en comentar sobre aspectos negativos de la vida de los demás.
· Que siempre me sorprenda por su espontaneidad, sinceridad y honestidad.
· Que sepa cuando hablar y cuando callar.
· Y que sobre todo... No me deje comer sola todo el pastel el día de mi cumpleaños.
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¡Más Que un Sueño!
SpiritualSi buscas razones para vivir y ser feliz, te aseguro que este libro será como tu postre favorito, no podrás dejar de leerlo. Más que un sueño no es solo soñar; es trabajar duro para ver tu sueño hecho realidad, y busca sobre todo hacerte saber que l...