Capítulo 18

45 9 3
                                    

Llega a tiempo. Ve a Arantxa esperándola en el Sacré-Coeur. Corre hacia ella y las dos chicas se dan un gran abrazo. Hacía tiempo que no se veían. Poco después llega Caitlyn, agotada. Ha subido las escaleras corriendo porque llegaba tarde. Típico de la rubia, siempre ir con prisas. Las tres chicas celebran su reencuentro, se echaban de menos.

Las jóvenes se ponen al día animadamente mientras disfrutan de las vistas de todo París.

-Pues tras mi ascenso en la oficina, todos aquellos que me hicieron la vida imposible ahora están todos bajo mi mando. No os podéis ni imaginar cómo disfruto haciéndoles sufrir. Les estoy devolviendo todo el daño que me causaron a mí.

-Eres toda una vengadora, Cai.

-Lo sé. ¿No es genial? Además, tengo una noticia muy importante que daros.

La rubia es de carácter fuerte, y le cree en que el karma siempre acaba llegando a los malhechores. Es subjefa de una empresa muy importante en la ciudad, y está felizmente enamorada de su compañero de trabajo, Alex.

-Dilo, no nos dejes en ascuas.

-¡Alex me pidió matrimonio! ¡Nos casamos este verano! Sois las primeras en saberlo.

-¡Felicidades!

Arantxa y Vi abrazan y vitorean a su amiga, quien no puede contener su enorme felicidad. Arantxa toma palabra y les cuenta a sus amigas cómo le van las cosas.

Es una chica morena a quien le encanta pasarlo bien y estar con sus amigas, por eso se puso muy feliz de volver a ver a sus amigas de la universidad. Arantxa es una chica alegre, dedicada, amiga de sus amigos, la mejor amiga de Vi y la persona con el corazón más puro que jamás ha conocido. Trabaja junto a su familia de médico en un hospital.

-Pues el otro día me topé con ese enfermero tan guapo pero tan idiota, ese italiano que se llama Quinto. No lo soporto, me pone frenética, y empezó a ligar conmigo como si nada, en medio de una operación. Lo eché de la sala, porque no me dejaba trabajar.

-En el fondo te gusta, y lo sabes. Del amor al odio hay un solo paso, y viceversa.

-Cállate, Vi, que ya lo sé. No lo soporto, pero no soporto que esté con otras. Menudo infierno.

-Tranquila, tú ignóralo, eso le frustrará y te buscará aún más. –dice Caitlyn.

-A saber. ¿Y tú, Vi? Dijiste que querías contarnos algo.

Violette les cuenta con todo lujo de detalles lo que le ha estado pasando a lo largo de la semana. Sus amigas ya se esperaban lo que decía de André, pero lo de Robert les sorprendió. Como se conocieron en la universidad, nunca pudieron verlo en persona, pero sí que sabían de él.

-Increíble. Justo cuando André se decide a sincerarse, aparece el otro para complicarlo todo. Es normal que estés confundida. –ríe Arantxa.

-¿Sincerarse?

-Claro. No te hagas la inocente ahora, sabes que él siempre ha estado enamorado de ti. No ha salido con ninguna de sus muchas pretendientas; de hecho, siempre estaba contigo, y se ponía como un tomate cuando le preguntábamos si le gustabas. Recuerda que fue él quien descubrió que Éric te estaba engañando, y se llevaba muy mal con Jules. Además, hizo todo lo posible para que te admitieran en el mismo sitio que él en el trabajo. Te ha llevado al trabajo todos esos días que no tenías moto, te ha invitado a cenar, se ha preocupado por ti y te ha abrazado, además de confirmarte que nunca salió con aquella Lisa. A parte que te ha soltado un montón de indirectas bien directas y se pone tenso al hablar del caso de Robert. Y todo eso que te contó Robert cuando se lo preguntaste. ¿Cuántas más pruebas quieres?

-Arantxa, los amigos hacen esas cosas, y más si los conoces des de los 16 años.

-Por favor, es André, es el tío más cerrado y serio que conozco. –replica Caitlyn.

-Pues bueno, supongamos que tenéis razón. ¿Qué hago?

-Yo me quedaría con André, es el mejor –opina la rubia. –Piénsalo. Es tu tipo. No fuma, no bebe, es policía, lo conoces de siempre y es muy inteligente. Robert me da mala espina, la verdad. No digo que sea malo, y más ahora que está rehabilitado, pero al ser un ex delincuente y tú una policía... Además, nunca te han gustado los tipos como él. Es todo lo contario a André.

-Pues yo pienso que eso es lo menos. Si se quieren, da igual que él sea un delincuente y ella una policía. Además, él ya no tiene problemas con la ley. Me encanta que no se haya quitado la gema que le regalaste. Diez años sin llevársela, es una prueba de que no te ha dejado de querer nunca. Aun así, me encanta André para ti. Además, a ti siempre te ha gustado.

-No creo que sea eso, pero en fin. Y sí, supongo que tenéis razón con lo de André.

-Yo de ti seguiría como siempre, a ver qué hacen ellos. Piénsalo bien, no vaya a ser que juegues con los dos.

-Jamás jugaría con los dos. Sé que de los dos prefiero a André, pero ahora mismo estoy un poco descolocada tras el reencuentro con Robert.

Las chicas siguen charlando un buen rato y van a cenar en un restaurante de comida rápida. Hablan de la boda de Caitlyn y cotillean acerca de antiguos compañeros de universidad. El tiempo se les pasa volando. Una llamada de Alex, el prometido de Caitlyn, las hace despedirse y volver en casa.

Emily y Luke están consternados. No se pueden creer lo que André les ha contado. De ser cierto, Vi está en problemas. Chateaubriand puede estar engañándola sin que ella se dé cuenta, y no quieren ni imaginarse qué sería si ella le hubiera revelado algún detalle del caso.

-Dudo que lo haga, ella no es así. –opina Jenn mientras se toma un café.

-Lo sabemos, pero quizá él... -comienza a decir Luke pero ella lo interrumpe.

-Esperemos a que André nos diga algo. Ahora que Cohen ha hablado, los tenemos a todos en orden de búsqueda y captura. Además, si lo que nos ha dicho es verdad, mañana vamos a acabar con todo esto.

-Qué emocionante, jefa. Tengo ganas de que sea mañana. –confiesa Emily, emocionada.

-No te emociones, Emily. Eso es más peligroso de lo que parece.

-A ver si lo entiendo. Cuando Cohen ha aceptado el trato de revelar los nombres y todo eso, André ha venido y nos ha contado que sospecha que ese Barrendero está engañando a la inspectora.

-Sí, Daniel –dice Emily, agotada. Ese chico le hace perder la paciencia.

-Entonces él ha ido a buscarla y contárselo todo para protegerla y saber si le ha revelado algún detalle del caso mientras Jenn recogía los nombres que Cohen le ha ido mencionando, y ahora estamos esperando a que él nos diga el qué.

-Exactamente.

En ese preciso momento, André llama a la jefa. Hablan un par de minutos y Jenn cuelga, mucho más aliviada.

-He hablado con los dos. Vi no le ha dicho nada del caso. Podemos irnos a dormir tranquilos.

Violette está conduciendo cuando su móvil empieza a sonar, y así en todo el trayecto de vuelta en casa. Cuando aparca la moto lo abre, abrumada. Un montón de llamadas de André, y varias de Emi y Luke. Llama a su compañero para saber a qué se debe esa lluvia de llamadas perdidas:

-¡Vi! Al fin das señales de vida, pensé que te había pasado algo.

-¿Qué me tendría que pasar?

-Tenemos que hablar. Es muy urgente.

-Me niego a volver a comisaría.

-No, tranquila. Estoy esperando delante del portal de tu casa.

El caso BBDonde viven las historias. Descúbrelo ahora