El caso BB

Capítulo 29

La comandante Renoir aprovecha que Jenn se ha ido a ver a Daniel para apartar a su objetivo de la búsqueda de Camus y el abogado para anunciarle su oferta. Mientras tanto, los demás policías están esperando alguna llamada, algún indicio del paradero de Camus y Gide. Han avisado a todas las estaciones de trenes y aeropuertos de la ciudad, así como los buses y los taxis, pero intuyen que se han debido de ir con el coche personal de alguno de ellos. Avisan a los controles fronterizos, a las estaciones de servicio y controlan las cámaras de tráfico. Esperan que en algún momento, alguno de ellos dé un paso en falso y los puedan coger. 

Jenn se ha quedado dormida en la habitación de Dani. Está agotada, lleva demasiada ansiedad encima y está frustrada por el estado del chico. Sin embargo, algo le dice que no va a tardar en despertarse, aunque no sabe cuándo. Su intuición está en lo cierto, y es que el chico abre los ojos mientras ella está dormida. 

-¡Hemos dado con ellos! ¡Están en una estación de servicio cerca de la frontera! Hay una patrulla que ha ido en busca de ellos y van a llevárnoslos en unas horas. 

-Eres un as, Luke. Ya está, los hemos cogido. Ahora, preparemos el interrogatorio. Hay que hacer que ella confiese. -le ordena André. 

-¿Quién hace el interrogatorio?

-Creo que es justo que sea Luke quien esté presente en el interrogatorio, después de las brillantes deducciones que ha hecho. Necesitamos un teniente, así que... 

-Ve tú, André. Te lo mereces.

-¿De verdad, Vi? ¿Estás segura?

-Sí, no te preocupes. -le sonríe la chica, mirando de reojo a la comandante Renoir, quien le sonríe de vuelta.

-De acuerdo, vamos a ir Luke y yo. -decide André. -De todas formas, hay unas cuantas horas desde la frontera hasta París, así que propongo que vayamos todos a descansar hasta mañana. Aun así, como muy tarde a las 8 tenemos que estar todos aquí. Sé que es domingo, pero es el caso más importante en el que hemos trabajado hasta ahora, así que es mejor que estemos todos reunidos. 

-El teniente tiene razón. Es hora de ir a descansar. Avisaré el comisario Guibert para que esté al corriente de las novedades y esté presente mañana por la mañana. Sois un buen equipo, Jenn tiene mucha suerte. -les sonríe la comandante Renoir, abandonando la sala.

Los policías no pierden más tiempo y se van rápidamente a sus casas a dormir unas horas antes del gran momento. Noelle se queda en casa de su hermano y Vi se va a dormir en su apartamento. Emily y Luke no se dirigen la palabra y ambos vuelven a sus respectivas casas, ambos pensando en la declaración de hace un rato del chico. 

Cerca de comisaría, Jenn está más feliz que nunca. Dani está por fin despierto, ha sobrevivido. Violette la ha llamado para contarle los avances del caso, y está ansiosa para ver cómo resuelven el caso. Sabe que es demasiado pronto para que le den el alta a Dani, pero les suplica a los médicos que le den unas horas para que pueda ir a presenciar ese momento. 

Diana Camus y Victor Gide llegan a comisaría cerca de las seis de la mañana, esposados y cansados. Los han pillado, ya no hay vuelta atrás. A ver cómo se las apañaban para librarse de la cárcel, aunque lo veían complicado, los dos. 

Violette llega a comisaría un poco antes de las ocho, arreglada y preparada para el gran momento. Aunque no era ella quien se vería las caras con Camus y Gide, quiere estar presentable para el gran anuncio. Ve que hay una ambulancia aparcada delante de la puerta, y a su jefa arrastrando a alguien que va en silla de ruedas. ¿Sería Dani? 

Cuando llega a la sala de interrogatorios, ve a André y Luke hablando detenidamente del procedimiento. Ella se va a la sala de visionado y allí ve a Emily, nerviosa y medio dormida, así como la comandante Renoir y el comisario Guibert.