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Desde que Mark llegó,Taeyong no lo suelta para nada.
Taeyong  practicamente los encerró en la habitación una semana y Mark no estaba en desacuerdo pero le daba cosa que la señora Lee escuche todo.
A la siguiente semana ya salían a caminar,a la plaza,a comprar,al cine o pasaban la tarde hablando con la mamá de Tae.

—¡Quiero un chocolate!—dijo Mark haciendo puchero dentro del carrito de compras.

—Yo quiero tantas cosas Mark...—suspiró Taeyong haciendo reir al menor—¿Sabes que quiero ahora?

—Una cerveza bien fría.—Mark achinó más los ojos.

—No puedes beber,apestas cuando lo haces.

—Shs—tomó del mostrador dos paquetes de fideos y los tiró sobre la cabeza de Mark.

fool~—Taeyong rió cuando Mark le tiró de la pielcita de su mano.

—No me dolió.—le sacó la lengua y el menor se inclinó y rápidamente tomó su lengua y la mordió.

—¿Ahora?

—Mahdk!—mantuvó su lengua afuera—Me estas calentando.

—Lo sé,me dí cuenta desde antes de salir de tu casa...— haciendo referencia a el bulto en los pantalones del mayor.

—Cuando volvamos a casa,me las pagas.

—¿Y si no quiero?

—Siempre me haces la misma pregunta y luego ni te quejas.

Las mejillas de Mark se tiñeron de rosa. En el mercado empezó a sonar 'Sign of the times' y Taeyong no tuvó mejor idea de levantar la parte delantera del carrito como si este estuviera volando. Mark se reía y se paró y extendió sus brazos,cerró los ojos y hacía como si volara con el changuito.

Taeyong dejó de levantar el chango y sus manos pararon en las costillas de Mark para hacerle cosquillas.

Mark parecía un gusanito de como se retorcía,se reía y dejaba salir quejas raras de sus labios.

El chico de seguridad que los observaba desde la punta del pasillo negaba con la cabeza y siguió caminando.

—Basta Taeyong!—como pudo salió del changuito y aprisionó a su novio a el estante de comida—comportate o veras las consecuencias.

Taeyong alzó una ceja y los dió vuelta con una gran facilidad.

—¿Qué decias?

Mark hizo puchero al ver lo fácil que el mayor los dió vuelta. Pero el no se quedaría asi. Los dió vuelta una vez más. Por la fuerza a Taeyong le cayó un paquete de papas fritas en la cabeza. Mark se rió.

Hicieron contacto visual por un tiempo largo hasta que el mayor de ambos atrajo los labios del menor a los suyos dandole un beso tierno.

—Había bastante gente en la fiambreria por eso me tar...de.—la mamá de Taeyong los estaba viendo devorarse y miró más alla de ellos encontrando un caos de cosas tiradas fuera de los estantes,el chango dado vuelta y negó con la cabeza.

𝕒 𝕓𝕒𝕓𝕪Donde viven las historias. Descúbrelo ahora