Narra Paul
Se giro hacia mi con una sonrisa tan radiante, sus ojos brillaban y yo me sentía feliz por haber causado aquella alegría, bueno la había causado Edith Piaf pero yo se la había presentado.
La alegría se apoderó de mi en unos instantes hasta que llegó aquella carta.
—No, no puede ser --dijo en un susurro.
—¿Qué ocurre? --pregunté observando lo que tenía en las manos.
Me estampo la carta en el pecho y entonces entendí todo:
El sobre de la carta contenía una serie de fotos de dos chicos, uno de ellos capturó mi atención acaso era... ¿Stuart Sutcliffe?
Supuse que aquel castaño había sido el novio de ___ por aquel desagradable comentario que venía en un papel azul:
Tal vez ahora te preguntes: ¿Ella es Astrid? ¿Él es Stu? Pues sí, tus dos amores en uno solo, ¿Creíste que te esperarían para siempre?
Cuídate y no regreses, aquí no te queda nada.
-Evelyn.
Maldije aquella carta, estaba claro que le habían puesto los cuernos dos seres tan repugnantes, pero ¿cómo alguien se atrevería a serle infiel a ___?
Maldije a Stuart, le había conocido por haber sido mejor amigo de John.
Salí del salón con la intensión de buscarla y una parte de mi quería abrazarla y decirle que aquel niño castaño era un verdadero idiota, quería besar su delicada piel y.... y no la encontré.
¿Dónde se había metido?
Tomé las llaves de mi auto y fuí directo a casa, tenía la esperanza de que estuviera en su habitación llorando como una niña de trece años.
Pero no fue así.
Entre a su cuarto sin preguntar y ahí estaba.
Se había quitado el reluciente vestido negro y ahora tenía una simple coleta en el cabello. El maquillaje se le había caído pero seguía viéndose tan hermosa como hace tan sólo unas horas.
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Maybe I'm Amazed • Paul McCartney y Tú (EN REVISIÓN)
Fiksi PenggemarMe enamoré de la persona prohibida, mi hermanastro. Fue difícil aceptar que gustaba de la última persona de la que debía. Pero para cuando nos dimos cuenta, ya estábamos metidos hasta el cuello.