Maybe I'm Amazed • Paul McCartney y Tú (EN REVISIÓN)

Capítulo 16: You're Going to Lose That Girl

Narra Paul

Estaba componiendo la letra de nuestra nueva canción, aún no tenía el título pero aquellas letras estaban cargadas de amor incontrolable.

¿Cómo alguien como yo podía escribir este tipo de canciones?

Escuché que alguien llamó a mi puerta pero no le tomé importancia hasta que la persona que entró por aquella puerta era mi dulce hermanastra.

Cuando le miré se veía triste, realmente mal.

—¿Qué te ocurre? --pregunté inmediatamente incorporándome para saber que pasaba-.

Ella sólo me miró y fue directo hasta mi plantandome uno de aquellos besos intensos que me hacían estremecer, pero estaba confundido.

¿Qué estaba pasando?

Segundos después no me resistí y le seguí el apasionado beso que nuestros labios entrelazaban.

Se separó de mi cuando el aire le faltó para respirar.

—¿Estás bien? --volví a insistir-.

Ella únicamente recargo su cabeza sobre mi hombro desnudó y automáticamente mis brazos la enrollaron.

Quedamos largos segundos en aquella posición, sólo pensaba en protegerla.

—No es que no me guste tenerte entre mis brazos nena pero si no me dices que es lo que ocurre sacaré conclusiones y terminaré dándome de golpes con la persona equivocada.

Ella sólo rió ante mi comentario, amaba aquella delicada risa...

Ella se separó de mi pero como impulsó la jale hasta posicionarme en mi silla de escritorio y postrarla sobre mi regazo.

De nuevo aquello era extraño y a la vez placentero.

—No haz destruido mi guitarra rítmica ¿verdad? Por que si es así te juro que ni por todos los besos del mundo te salvarás de esta.

Sólo quería hacerla reír, hacerla sentir bien. Me tenía preocupado el hecho de que no me estuviera insultando o sonrojándose tan comúnmente.

—No... ¡Ah!... Stuart está aquí --soltó mirándome-.

Me sentí impotente, me tenso el hecho de que abordará aquel tema.

—¿Él idiota que te engaño? ¿Dónde? ¿Aquí en Liverpool?

—Aquí... En casa.

Ese idiota estaba bajo mi propio techo, ¿qué diablos estaba ocurriendo?

Me enfureció aquel comentario. Aquella situación me incómodo.

—¿Y qué quieres que haga yo? --pregunte indiferente-.

—Sabrá inmediatamente quien eres por las fotos..

—Ah... ¿Quieres que finja ser tú novio? --pregunte furioso-- ¿Qué no tienes a George para algo así? Es tú novio, ¿verdad?

—Tú sabes que George estará fuera estos días y... Y contigo me hice la foto del beso.

—¿Porqué no mejor le parto la cara y terminamos con esto antes?

Me levanté de mi asiento y me dirigí a buscar un abrigo para salir.

—Mamá no debe enterarse --susurró-.

—Me debes una muy grande --dije serio saliendo por el marco de mi habitación-.

No quería saber más sobre aquel tema que me consumía más de lo que cualquiera pudiese pensar. El hecho era que me volvía loco sólo pensar en que era mía por una simple foto cuando estaba claro que jamás lo sería.