Más allá

362 15 1
                                    

Peridot encontró que yo y Lapis estábamos abrazados, mas apenas nos descubrió, nosotros nos separamos y así conseguimos no levantar sospecha alguna de Peridot, sin embargo más que calmada Lapis parecía frustrada por alguna razón, sentí que lo mejor era seguir actuando como si nada hubiera pasado y nos fuimos a dormir con Peridot en la parte alta del granero, ella por su parte se durmió como antes, pero Lapis se durmió al lado mío con el frente hacia mí.

A la mañana siguiente me regresé a mi casa, ya que tenía que hacerme mi desayuno porque la noche anterior las gemas y yo nos acabamos las rosquillas que había llevado aparte tenía que bañarme y lavarme los dientes, y para eso necesito un baño, que no tiene el granero porque ellas no lo necesitan.

Antes de partir me despedí de las chicas y continué el camino hacia la casa, en el camino me puse a pensar en lo que sucedió la noche anterior y todo lo que tenía en mente era que necesitaba volver a ver a Lapis. De repente suena mi celular, era Connie que estaba de camino a mi casa, por lo que corrí lo más rápido que pude y me enceré en el baño, luego de un rato llegó Connie y se sentó en la sala, yo estaba duchándome y no me dí cuenta de que ya se encontraba en el sofá. Al salir del baño muy sereno me coloqué una toalla en la cintura y fui tranquilamente al ropero que está bajo las escaleras, pero fui visto por Connie en esa situación.

Connie: ¿S-Steven? Em- dijo muy sonrojada.

Steven: ¡Connie!, ¡perdón!, no sabía que ya habías llegado, esto es vergonzoso, no te preocupes ya me visto solo salte y entra cuando te diga.

Connie: No, Steven, no te preocupes, estoy bien, vístete tranquilamente- dijo con una voz muy tímida y con en rostro más sonrojado que nunca.

Steven: ¿N-No te incomoda que esté así frente a ti?

Connie: ¿Sabes qué? De hecho m-me gusta... olvídalo, no me escuches.

Steven: Está bien, solo no me mires hasta que te lo diga.

Connie: Seguro suena raro pero, tengo ganas de ver, ¿me puedo quedar acá adentro?

Steven: De acuerdo- dije muy sonrojado y me vestí lo más rápido posible para evitar que sea más incomodo el  momento.

Luego de un silencio bastante incomodo, Connie se veía bastante feliz. En eso le pregunto el por qué vino, a lo que ella contesta: Quería visitarte, nada más- Acto seguido le propuse ver la televisión a lo que ella accedió.

Y así estuvimos, viendo televisión y conversando de vez en cuando. En ese momento llega Lapis a buscarme y nos encuentra en la habitación, ella entra y al hacerlo, sentí como todo se llenó de luz. Lapis entra y saluda a Connie y después a mí, Connie le dijo a Lapis que si ella quisiera podía venir a ver televisión conmigo y ella, pero en ese momento llama la madre de Connie diciéndole que regrese a su casa ya que tenía que asistir a los cursos de tenis porque tiene una competición dentro de unas horas, así que tenía que estar allí lo antes posible, muy apenada pero a la vez entusiasmada Connie se fue a su evento de tenis.

Lapis: ¿Estamos solos? preguntó

Steven: Las chicas están en el terreno de la guerra de las Cristal Gems contra el Homeworld recolectando algunas armas por si las llegasen a necesitar y les tomará todo el día, y mi papá está organizando el auto lavado, así que sí, estamos solos.

Narra Lapis:

Esto es perfecto, por fin Steven y yo estamos completamente solos, llegó el momento de que sepa lo que en verdad siento por él, amor puro y romántico que descubrí mientras pensaba en él todo el tiempo y lo único que quería es estar cerca de él. Después de que me asegurara de que en efecto estábamos completamente solos lo tumbé contra su cama y puse mis brazos al nivel de sus hombros, estábamos uno frente al otro, viéndonos cara a cara, y nuestros labios acercándose peligrosamente hasta que... él me besó y sentí que mi corazón se iba a salir porque latía tan fuerte que el sonido se podía escuchar fácilmente, y se sumó al de Steven mientras yo cerraba mis ojos lentamente y me dejé caer en su pecho.

Ese calor, esa  sensación, sus labios y los míos en la batalla más placentera que puede existir su lengua y la mía sincronizadas en un baile que solo nos provocaba continuar. Pero algo sucedió, algo me asustó mucho, así que le pregunté a Steven: ¿Steven? ¿Qué es eso?- mientras le miraba un curioso bulto que tenía por debajo de su cintura apuntando hacia mí.

Steven: Bueno, en realidad es... ya sabes...

Lapis: ¿Es un arma que invocas?

Steven: Em no, es algo que tenemos los humanos hombres, sirve para...

Lapis: ¿Para qué?

Steven: Para combinarlo con el de las mujeres

Lapis: Como una fusión, me quiero fusionar contigo, hay que combinarlo con el mío Steven

Steven: No creo que sea correcto, Lapis, necesito saber algo antes de hacer nada.

Lapis: ¿Qué cosa Steven?

Steven: ¿Qué es lo que sientes por mí?

Lapis: Steven... yo... te amo.

Steven: ¡¡¡¿¿¿De verdad???!!!

Lapis: Por supuesto Steven- le dije mientras sonreía.

Presentando... al narrador:

Esa sonrisa cuando dijo que ama a Steven, lo hizo caer derrotado hacia ella lleno de felicidad, y ella pudo notar la emoción que tenía Steven, pero algo que no se esperaba era que tan pronto él estaba empezando a besarla de nuevo, ella dirigió sus manos hacia aquel bulto que la tenía tan intrigada y ansiosa y lo que encontró fue muy diferente a lo que se imaginaba.

Lapis: ¿Eso es lo que tienen los hombres humanos?

Steven: Así es- dijo algo nervioso 

Lapis: ¿Qué hago con él Steven? 

Steven: Lo que tu quieras,- Dijo mientras notaba que ella estaba ansiosa por usarlo y su cara se volvía cada vez más alegre.

Lapis: ¡Esto me está volviendo loca! - dijo Lapis con una gran sonrisa en su cara.




(+18) El Corazón De Lapis LazuliDonde viven las historias. Descúbrelo ahora