trente

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Desperté al sentir unos rizos haciéndome cosquillas en mi barbilla, mire hacia abajo encontrándome a un tierno Harry dormido en mi pecho, tenía una de sus piernas encima mío y un brazo rodeándome con fuerza, había dormido de maravilla con éste pequeño a mi lado. Me fijé en mi reloj dándome cuenta de que eran las 11 am, las risas y voces de mis hermanos seguramente abriendo sus regalos llegaron a mis oídos. Aparté con cuidado a Harry y éste solo se volteó al otro lado abrazándose a una almohada, sin despertarse. Sus rizos cubrían parte de su cara, su piel viéndose más blanca que nunca y sus labios tan apetecibles, dejé un beso en ellos para irme a cepillar y hacer mis necesidades. 

''¿¡Qué trajo Santa para mi?!'' bajé gritando mientras todos me veían riéndome, William jugando con la pista de carreras que pidió, Daisy y Phoebe con sus nuevas laptops, al parecer Doris disfrutaba de su nuevo piano, Felicite tenía en sus manos un nuevo Iphone, seguramente el último, mientras que Lottie le tomaba una foto su regalo que era maquillaje. Dan y mamá tenían una sonrisa enorme y sin hablar de la mía. Corrí hasta ellos abrazándolos. 

''Lou, Lou, mira mis carritos nuevos, son muy rápidos'' dijo William llamando mi atención, lo vi ponerlos en su lugar en la pista y con un control remoto manejarlos rápidamente, su enorme sonrisa me llenaba de vida cada vez más. 

En el árbol de navidad aún habían tres regalos, el mío para Harry y otros dos. ''¿No abrirás tu regalo, hijo?'' me preguntó mi madre, yo solo fruncí el ceño para ver los regalos debajo del árbol, tomé el que tenía mi nombre y le quité el papel de regalo, la caja era grande y tenía huecos a los lados. Al abrir la caja saltó un pequeño gatito de ésta, maullando. Era un pequeño y peludo Angora, sus ojos eran muy azules y su pelaje muy suave, Harry se moriría al verlo, le encantaban los gatos tanto como a mi.

''Dios, es bellísimo, muchas gracias'' les dije a mis padres para acariciar con cuidado al gatito que estaba ya agarrado a mi pecho, subí mi vista a las escaleras y vi a Harry con un pantalón de pijama puesto y la camisa de anoche, mi bello durmiente se rascaba un ojo mientras nos veía con sus rizos alborotados, le hice una seña para que bajara y éste lo hizo, viéndose como un completo príncipe. 

''Oh, Harry ya despiertas, te tenemos un regalo'' mi madre habló mientras veía como el pequeño se sonrojaba y se acercaba al árbol. 

''No tenía por qué'' dijo tomando el regalo que seguramente era de mis padres, lo abrió lentamente viendo varias cosas sobre salir de la caja, eran accesorios. ''Dios, esto se ve muy caro''.

''Es todo tuyo, con todo lo que Louis nos contó supusimos que te gustaría''

Sacó unos lentes grandes y blancos, parecían de mosca pero en su rostro pude notar una enorme sonrisa, al parecer le habían gustado mucho. Los dejó a un lado encontrándose con unos anillos de plata, uno de ellos era sencillo, con unos pequeños ositos en círculos, otro tenía unas esmeraldas incrustadas, del mismo color de sus bellos ojos, otro era una rosa de plata y el último uno con un rubí en él. Entusiasmado se los puso todos de una vez, al final había una chaqueta de mezclilla con mariposas y flores en ella, un tigre en la espalda. Pude verlo soltar varias lágrimas, yo me apresuré en abrazarlo y él tímidamente se echó a llorar en mi pecho. El pequeño gatito se metió entre nosotros, lamiendo la mano de Harry, él se asustó y se separó, viendo al animal con una cara de asombro y amor.

''Y-Yo, de verdad no sé como agradecerles por todo esto, es...''

''Ya cariño, te lo mereces'' dijo mi madre con amor mientras recostaba su cabeza en el hombro de su esposo, yo suspiré felizmente mientras veía como Harry tomaba al gatito para acariciarlo.

No podía haber pedido algo mejor para navidad, tener a la persona que me robó el corazón desde el primer día que lo vi, a mi lado e irradiando felicidad. Podía mirarlo a los ojos y decir fácilmente que era el amor de mi vida, y ese brillo me hacía saber que lo había salvado, sacado de aquel hoyo oscuro y solo. Ahora estaba conmigo y no tenía de que preocuparse. Él quería vivir, así que lo llevaré de paseo y le recordaré todos los días lo encantador que es.

FIN

❝Won't you stay alive? I'll take you on a ride, I will make you believe you are lovely

lovely [larry]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora