45. ¿Te vas?

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Capítulo 45

Estoy a pocos días de irme de California y les soy sincera...no me quiero despedir de mis amigos, me voy a poner muy sentimental al momento de hacerlo.

Justamente hoy comienzo despidiéndome de mis amigos y voy a comenzar yendo a la casa de los Lew, obviamente cuando vaya a la casa de ellos Sean no querrá estar ahí presente, pero más que sea me despediré de toda la familia menos de él.

Ya falta poco para estar en la puerta de los Lew y se los juro que mi corazón está a mil por hora, que siento que se me va a salir el corazón por el pecho. Voy inhalando y exhalando tranquilamente, nah, mi respiración es un caos.

Tengo mis pies al pie de la puerta, no sé si tocar o salir corriendo como lo cobarde que soy, mis manos están temblando y estoy al pelito de tocar el timbre, luego de segundos me decido en tocar y...

Por favor que no abra Sean, que no abra Sean, que no abra Sean

¡Diablos! se está abriendo la puerta, que sean todos menos Sean, que sea hasta Oreo menos él, por favor. Miro fijamente la puerta abierta y no veo a nadie, solo veo a...¿Oreo? Vaya por lo menos Dios me escuchó.

—¿quién es? —es Sarah bajando las escaleras, aun no me ve, está mirando a alguien detrás de la puerta, supongo que es él, Sarah dice algo mudo y luego me mira a mi— oh _____ ¿cómo has estado? —se acerca a mí apoyando sus manos en la puerta—

—eh...hola —le sonrío— solo venía a decirles algo —muevo mis manos desesperadamente— 

Ella mira detrás de la puerta y luego se fija en mi.— pues pasa, no hay ningún problema —retrocede para darme paso a la casa—

—gracias —digo una vez dentro y de pronto estornudo, no fue cualquier estornudo, estornudé fuerte que me maree un poco—

—¿te encuentras bien? —Sarah toca mi hombro y al instante abro los ojos lentamente—

—sí, solo que no suelo estornudar fuerte —sacudo mi cabeza cerrando los ojos de nuevo, pero cuando los abro lo veo correr escaleras arriba...por lo menos lo vi—

—oh, bueno —me sonríe— ¿quieres que llame a todos? —señala con su dedo pulgar a su espalda—

—em...si, solo es algo rápido y me voy —muevo mis manos explicando, ella me da una última sonrisa y se va— ay, mamá, en que me he metido —suspiro hablando sola— wow, está casa es gigantesca —susurro mirando por todos lados—

Alguien se lanza a mí recibiendo un fuerte abrazo por las espalda.— ¡______! cuánto tiempo —era Serris, que hubiera dado por un abrazo así de fuerte por parte de Sean—

Le sonrío.— Serris —nos movemos de un lado a otro— los extraño a todos

—nosotros también —continúa la señora Miya— ya suéltala —aleja a Serris de mí y me da un abrazo igualmente—

—bueno...dejémonos de abrazos, ella nos tiene que decir algo importante —habla Sarah—

—pero primero sentémonos —la señora Miya nos guía a otra parte de la casa—

Una vez todas sentadas llega el señor Cheuk apurado.— lo siento mucho —dice agitado mientras se agarra la espalda— he llegado tarde, espero y no hayan dicho nada —se ríe y nosotras negamos— llegué a tiempo —se sienta al lado de su esposa, yo estoy en frente de toda la familia Lew—

—bueno, ahora sí, dinos —la señora Miya hace un ademan—

—bueno.... —me rasco la nuca— solo venía a despedirme de ustedes —frunzo los labios esperando una respuesta por parte de ellos—

Siempre te amaré [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora