76. La Conversación

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Capítulo 76

-es mejor que te apures, ya solo te quedan diez minutos –esa era mamá gritándome desde la cocina-

Han pasado ya tres días después de lo ocurrido con Natalie, y mi mamá aun sigue enojada, odio cuando ella está así, no la soporto. En estos tres días Natalie ni siquiera se me quiere acercar, creo que les caigo mal a todos aquí en ésta casa

-hija –era mi papá asomándose en el umbral de mi habitación- apresúrate, ya sabes cómo es tu madre, y peor aun cuando está con los humos encima –ah no, esperen mi papá no me odia-

-sí, papá ya salgo, solo déjame guardar unas cuantas cosas más –él asiente y desaparece de mi alcance-

No sé ni qué mismo estoy guardando, si solo nos quedan tres días de clases y se supone que estamos en exámenes y no debemos llevar nada a más de una pluma y un lápiz. Salgo de mi habitación y dirigiéndome directamente a la puerta para salir de éste infierno lo más pronto posible

-ya me voy, adiós –sin esperar respuesta de alguien iba a cerrar la puerta pero de la nada aparece Natalie- ¿Qué pasa? –ella extiende algo y no diviso bien qué es eso-

-dale a mi tío Gabo, y a mi papi Sean –enarco una ceja con una sonrisa al notar que son corazones de papel-

-¿Gabo? Es Gabe, cariño –me agacho para mirarla mejor-

-¿sigues aquí? –la voz de mi mamá me hace dar un respingo haciéndome incorporar de inmediato-

-ah, ah, lo siento, mamá, ya me iba –me giro para cerrar la puerta-

-no te olvides darles, por favor –grita una vez estando fuera del departamento-

Reviso mi celular y oh diablos me quedan solo siete minutos, es mejor que comience a correr, o sino ni llego para rendir mi examen

Llego al instituto toda sudada y agitada, agh....corro de nuevo dirigiéndome a mi salón correspondiente, me faltaba poco para llegar al salón, pero alcanzo a ver al profesor cerrar la puerta

-profe no, espéreme por favor –grito acelerando un poco más-

-señorita Army –me mira el profesor un poco enojado- ¿Qué son estas horas de llegar? -no entiendo porque todo el mundo se enoja conmigo ahora- entre de inmediato, siéntese en mi escritorio y coja una hoja del examen

Rayos, todos estaban haciendo el examen ya, todos mantenían sus cabezas gachas, me siento en el escritorio de profesor, mirando a todos, hasta que Andrés me mira negando con la cabeza, que fastidio, a éste muchacho lo veo hasta en la sopa, con un giro de ojos me dispongo a poner mi nombre en la hoja

Leo cautelosamente las preguntas, para decir verdad toda me las sé, así que voy respondiendo de inmediatamente, giro la hoja y por obra y misericordia del señor, miro a Sean, tenía una mirada perdida con su lápiz en la boca, ¿habrá estudiado? Me quedo un rato más mirándolo, hasta que levanta la cabeza y me ve, me hace una seña de que quiere la pregunta siete, lo sabía no estudió.

Me hago la loca, y le hago una seña con mi mano no tan obvia de que era la C, miro al profesor, y menos mal no se dio cuenta. Miro de nuevo a Sean y se ríe negando con la cabeza mientras marcaba la respuesta que le di.

Las horas pasaban y ya se iban terminando los exámenes que teníamos que rendir hoy, pues solo eran tres, y lo mejor de todo es que salimos temprano, eso es lo bueno de los exámenes.

Hoy solo teníamos una hora libre antes de irnos a nuestras casas, así que el profesor mejor decidió en que nos dejara ir donde queramos, ya sea dentro del aula o cualquier parte del instituto. Yo opté por ir al patio, hace un poco de calor y prefiero estar fuera del salón

Siempre te amaré [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora