nueve.

2.8K 359 67
                                        

Busqué el número de la taquilla que me habían asignado este año. Ya había pasado una semana y aún no recordaba cuál era. Intenté abrirla poniendo el código, pero no era capaz de hacerlo.

"¿Necesitas ayuda?" preguntó un chico a mi lado. Parecía ser que su taquilla estaba junto a la mía. Me quedé mirándolo por unos momentos sin saber qué decir.

Estos seis meses me habían afectado mucho, no negativamente. Mi forma de ser y actuar había cambiado mucho; me sentía mucho mejor conmigo misma, más segura, pero a la vez era más vergonzosa y nerviosa, por alguna razón. Afortunadamente, era capaz de esconderlo y actuar como si nada pasara.

Pero en aquel momento no pude.

"He dicho que si necesitas ayuda." repitió el chico, por si no lo había escuchado.

"Uhm, sí, sí. Si puedes abrirlo..." dije, y me aparté. Le entregué un papel con la combinación de la taquilla. Era larga, así que no creí que la recordara después.

Comenzó a introducir la contraseña, concentrado. Quedé mirándolo durante un rato. Era realmente guapo. Pero decidí dejar de mirarlo antes de que se diera cuenta -si no lo había hecho ya- y pensara que soy una creep.

"Supongo que ya no tendrás excusas para darme tu número de teléfono." terminó de abrir la taquilla, se giró y me miró. "Aunque no me importa, ya lo tengo."

¿Qué se suponía que quería decir...?

Lo miré por unos segundos más hasta que me di cuenta y mi corazón comenzó a latir bastante rápido.

"¿No vas a decir nada?" mierda, seguía mirándolo.

¿Pero qué se creía? ¿Pensaba que podía comportarse de aquella manera sin siquiera conocerme?

Había estado seis meses preocupada por cómo podría sentirse aquel chico vergonzoso después de que lo ignorara por una semana entera. Realmente me era triste el hecho de que un chico tan inseguro hubiera sido rechazado de aquella manera por alguien de quien solo quería ser amigo... Había malgastado mi tiempo. De ninguna manera parecía dolido, en absoluto.

¿Había estado seis meses preocupada por un chico que fingía ser vergonzoso, para luego encontrármelo de aquella manera?

De hecho, ¡¿qué demonios hacía en Corea?!

"Bueno, supongo que no me recordarás." dijo, y dirigió la mirada a su taquilla para introducir la contraseña y abrirla.

"¿Renjun...?" bueno, o como se dijera. Ni siquiera recordaba su nombre... no.

"Entonces te acuerdas." me miró. "Supongo que no me habrás recordado porque ya no tengo el pelo rojo. ¿Te gusta? Lo teñí hace una semana, antes de llegar." tocó su pelo un par de veces. Parecía contento por aquel cambio. No... parecía orgulloso. Qué horror.

Yina, has malgastado tu tiempo y emociones en preocuparte.

once again || huang renjunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora