A escasas horas de verte otra vez no paro de pensar en tu piel y su calidez, a escasos pasos de tu ser no puedo resistirme y mi tentación dejo crecer. Tras tantos días sin tu tacto en mi piel, tras tantos minutos sin tus besos en mi ser mi mente podría enloquecer, pero aquí me hallo otra vez, para ti caminando entre bosques que no paran de crecer. Bosques en donde cada árbol tiene su deseo, deseo de un recuerdo a tu lado. Cada ser vivo es un recuerdo por ti creado, cada hoja es un beso, cada rama es un sentimiento. Irina tu me haces esto, me provocas primavera en mi universo. Tu haces que mi mente se aleje dejándola así ver toda la perspectiva de un mundo sin fronteras, un mundo cuyas vistas se centran en sentimientos cuyos destinos son tan puros como el agua de una fuente natural que yace en el pié de una montaña. Te quiero.
