De todas las cosas que me dictan belleza, tu sonrisa hoy me hizo pensar que no eras humana, que eras una deidad perdiendo tu tiempo entre mortales. No quise apartar mi mirada de tus labios, de tus ojos, de tu cara que cuanto mas cerca la tenía más enamorado me sentía.
Cuando ya carecía de esperanzas por encontrar a alguien merecedor de todo mi amor, cuando mi mundo ya estaba neutral al respeto y sin quererlo ni buscarlo me caíste en los brazos no pude creerme que estos sentimientos que hoy en día albergo con tanta fuerza fuesen reales.
Fui en mi día inocente y nunca pensé en que yo lucharía por alguien como lo hago por ti. Nunca pensé en querer así, ni ser tan convencido sobre algo que siento como si lo hubiese tenido en mi interior todo este tiempo sin saberlo. No sé decirte ahora si es tu belleza, la de tus ojos esos verdes que me hacen esto. No sé si es tu forma de ver las cosas, ni sé si es tu forma de hablar, sonreír, mirarme o bailar lo que me tiene tan a gusto en tu compañía. Solo sé que al tenerte cerca mi ser entero baila de alegría y no tengo más que pensar en que tu me quieres de la misma forma para alegrar cualquier día de mi vida.Un cordial Te quiero.