Por cada momento que paso sin ti a mi lado mi mente me regala tu imagen, por cada minuto, hora y día sin ti a mi lado no puedo hacer más que pensar en tocar tu piel. Pero de eso va echarte de menos. De eso va querer verte a todas horas y de eso va que te quiera. De eso va querer tus abrazos incondicionalmente, de eso va querer tus besos sin motivo alguno. Querer pasar todos los instantes a tu lado, de eso va hacer todo lo que contigo hago.
Tus movimientos, tu forma de caminar, de hacer gestos, de sonreír, de tararear, cantar y reír. Tu forma de estar a mi lado es lo que a mi me hace feliz. Y bien tengo recuerdos, fotos y tu letra pero no tengo ahora conmigo tu sonrisa ni tu respiración acariciando mi piel. No tengo tu ser a mi lado.
Pero al no tenerte a mi lado también me recuerda lo mucho que aprecio tu presencia, lo mucho que te quiero aquí y lo poco que me gusta que no estés. Es tiempo blanco, es una situación donde mi mente no hace más que pensar en cómo te trataría de estar aquí, en cómo te acariciaría la mejilla y luego el pelo, en cómo te besaría esos labios con ese tacto tan fino y en cómo te daría luego besos por todo el cuerpo. Sin duda alguna, prefiero tu ser a mi lado.