Te tengo ganas, ganas de hacer contigo todo. Ganas de ti, ganas de tocar todo tu cuerpo. Te tengo ganas, ganas de besarte con cariño y ganas de acariciarte con suavidad, pero sobretodo tengo ganas de cogerte en mis brazos, de morderte suavemente el labio inferior y de reír contigo. Y las ganas de mirarte tampoco me faltan, tengo ganas de verte entera, tu rostro, tu piel desnuda, tu pelo tapando lo que puede y tus manos cogiéndome en tus brazos. Tu mirada, esos ojos tan claros, tan sinceros y llenos de lo que siempre quise ver. Y ¡por Dios! las ganas que tengo de besarte por el cuello y bajar de forma lenta, a tus pechos, entretenido un rato pero sin hacerte esperar demasiado, y luego quizás a tu abdomen, dando saltos con mis labios de lado a lado dejándome tentar por algún que otro mordisco. Y cuando ya no aguante más vacilando, tendría unas ganas tremendas de bajar a jugar con tus piernas, dando mordiscos cada vez mas seguidos y besando cada vez mas cerca de tu zona favorita. Y cuando mis ganas ya no se aguanten pondría mi boca sobre ti, mi lengua sobre tu alma y me dejaría llevar por mis ganas de ti.
