Luego de que Zamaliel contara su historia y así diera por culminada la ronda de testimonios fantásticos y crueles en mi cabeza habían muchas dudas.
-Abby, que hay de ti, del mago blanco, de mi vida? esas interrogantes aún no se contestan.-Pregunté algo cansado de ya no saber nada en realidad.
-Bien amigo te lo contaré tenemos tiempo para una última historia.
Los brujos, oráculos, magos blancos y hechiceros somos humanos con una percepción de lo espiritual muy sensible.
Los brujos por naturaleza conocen la magia desde su nacimiento, aprenden sobre sus diferentes ramas y demás pero nunca se involucran en magia de sacrificios.
Quienes lo hacen se vuelven hechiceros, brujos sedientos de poder trastornados por su propia maldad y por demonios con los que pactan mediante magia negra.
Los oráculos somos simples videntes, que manejamos una percepción diferente del tiempo y el espacio, por naturaleza el oráculo sabe leer manos, mentes, esferas, cartas, aún el agua y la tierra, para lo cual se necesita mucha capacitación y ayuda de parte de los brujos, quienes dominan lo natural y lo sobrenatural. Se puede decir que los oráculos somos el nexo entre ambos mundos.
Y por último los magos blancos son escasos de hecho hoy día a excepción de Lucien solo quedan cuatro más. Estos fueron los primeros brujos que recibieron al ángel y aceptaron el desafío de luchar por la paz usando la pureza, la bondad y la misericordia, un mago blanco no puede mentir porque en sus venas corre sangre del ángel, quien a través de este pacto logró la sinceridad de los magos blancos, pero aún sin poder mentir pueden manejar la verdad a su antojo, no pueden manchar sus manos de sangre inocente si lo hicieran aún por accidente automáticamente la sangre de ángel acabaría quemando su cuerpo desde adentro.
-woow! Creo que has sido lo bastante clara!-Dije con palidez en el rostro al imaginar la escena.
Gracias a cada uno por abrirse con el grupo la próxima sesión será en dos semanas.-Dije en tono de broma tratando de ocultar mi verdadero estado.
Todos rieron excepto el lobo quien olfateaba el aire con cara de preocupado.
-Se avecina una tormenta, debemos refugiarnos.-Dijo Jack con tono preocupado.
-Ahora que conoces más de nosotros vamos a tu casa tu madre puede correr peligro, esto no es normal.-Dijo Lucien-Espero que estés preparado.