Contigo ¡Porque te quiero!

Lo perdiste.

Caminé hasta la playa, necesito despejar mi mente de todo, y la playa me tranquiliza, y más en la noche, cuando no hay nadie.

Comienzo a sentir la arena entrando entre mis dedos, esa sensación no tiene igual.

Siento que me observan, así que decido dar media vuelta, y sí, me observaban, una figura humana viene caminando hacia mi, no alcanzo a verlo bien, es de noche, solo veo la figura.

Se acerca más y más, hasta que lo tengo a escasos metros de mi.
Y es entonces cuando lo reconozco, con su cabello alborotado por el suave viento, su sonrisa sin igual. Doy un paso hacia Fede, pero a él se le borra la sonrisa y retrocede.
Me quedo helada, no entiendo que pasa.

-Fede.
No responde.
Intento caminar de nuevo hacia él pero nuevamente retrocede.
-¿Qué te pasa Fede?

Me mira con odio, su sonrisa se convirtió en una sola linea, sus ojos se pusieron llorosos, me ve con odio, lo reconozco en su mirada, lo lastimé, la forma en que lo traté realmente le ha dolido.
Se da media vuelta y se va.
Observo como se aleja, sin voltear atrás hasta que se pierde totalmente en la oscuridad.

-Sabía que ibas a perderlo.

Doy un respingo al escuchar esa voz, giro a mi derecha y Facu está parado a mi lado.

-No le importas más, lo perdiste para siempre.

El sonido de la alarma me despierta de golpe, estoy sudando, en mi cama, no hay playa, ni Fede, ni Facu. Estoy en mi cama, todo era un sueño.

Tomo mi celular y le escribo un texto a Fede, es horrible la sensación de perderlo y no dejaré que suceda.

'Buenos días dormilón'.

No hay respuesta, me ducho para la escuela, desayuno, arreglo mi mochila, y no hay respuesta todavía. Una punzada en el pecho me atormenta, no quiero pensar que lo he perdido, quizá no ha visto el mensaje.

Tomo mi mochila y salgo al colegio.
Revisando cada minuto mi celular, pero sigue sin haber respuesta.

(...)

-Hola Alina.

Bajo el libro de la segunda guerra mundial para permitirme ver a Rob sentado frente a mi, con un libro de una historia de amor... él odia esas historias.

-Hola Rob.
-Que casualidad encontrarnos en la biblioteca ¿no?
-Si claro, no es como que me hayas seguido hasta aquí.

Rob se sonroja y baja la mirada con una sonrisa tímida en sus labios.

-Te queda muy bien esa blusa.
-Gracias Rob, tengo que seguir estudiando para el examen.
-Claro, yo voy a leer esta historia en lo mientras.

Abre el libro y comienza a leer, o eso aparentaba.

-¿Rob?
-¿Si?
-Traes el libro al revés.

Se da cuenta del ridículo que acaba de pasar, su cara se pinta de un rojo intenso, y voltea el libro al derecho sin responder.

Suelto una pequeña risa. Rob es lindo, indudablemente lo es. Sus ojos color miel, sus labios rosas, su cabello castaño peinado hacia en lado, y el hecho que le gusten las patinetas, lo vuelven casi perfecto.

Quizás si fuera Fede sería perfecto...
O no, quizás no. Si Fede fuera un poco menos complicado sería perfecto.
No cabe duda que la persona perfecta no existe.

(...)

-Ali -mi mamá entra a mi habitación, bajo el libro que estoy leyendo y la miro con enfado por el hecho de no haber llamado a la puerta primero -Lo siento, te habla Micaela.
-Dile que entre.

Mi mamá sale de mi habitación y entra Mica, mi mejor amiga.

-¿Qué haces floja?
-Estudiando, mañana tenemos examen de Biología, deberías estar haciendo lo mismo.
-Tú no necesitas estudiar, siempre tienes diez aunque no hayas estudiado nada.
-Igual prefiero hacerlo.
-¿Me acompañas?
-¿A dónde?
-Tengo que ir a comprar algo que mi mamá necesita.
-¿Qué es?
-Algo Alina, dale levantate y vamos.
-Estoy estudiando, no puedo.

Mica se acerca a mi y comienza a tirar de mi brazo.

-Por favor, acompañame, te lo pido, no me dejes morir sola.
-No Micaela.

Me resisto, pero Mica ya está a punto de tirarme de la cama.
Y me observa con mirada de perrito de la calle.

-Está bien ya, iré contigo pero ya deja de tirar de mi brazo.

Ella sonríe y yo dejo el libro mientras la observo con enfado.
Reviso nuevamente mi celular y nada.
A estas alturas ya no puedo inventar excusas, es obvio que no me quiere responder.
Mi sueño se hace realidad, el nudo intenta invadir mi garganta, pero antes de que lo haga, dejo mi celular y salgo de la habitación con Mica.

-¿Qué es lo que necesita tu mamá?
-Algunas cosas, solo avanza y cállate.
-Deberías estar agradecida de que te acompaño.
-Tú deberías estar agradecida que te saco de tu cueva.

Rodeo los ojos y continuamos caminando, llegamos al parque, y antes de pasar por él, Mica se detiene, volteo a verla confundida, ella me observa con una media sonrisa.

-¿Qué?
-¿Te dije que me vas a amar más de lo que me amas?

La veo con el ceño fruncido, no entiendo de que habla, no entiendo nada.

Ella voltea la vista al frente de ella, detrás de mi, yo volteo y me quedo helada, no sé como reaccionar, me tiemblan los pies, el corazón me martillea en el pecho, regresa el nudo en la garganta pero esta vez de una forma positiva, comienzo a ver a Fede borrosos por las lágrimas que se acercan a mis ojos.

Está allí, tan lindo como siempre, con esa sonrisa inigualable.

Doy algunos pasos en su dirección y él no retrocede, y no deja de sonreír, comienzo a correr hasta llegar a él, abre los brazos amortiguando mi cuerpo con el suyo, y nos fundimos en un abrazo...

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No, 'Micaela' no es Mica Suarez.
Simplemente me gusta el nombre :)
Xd.