№18

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Arianne

Esta noche saldría con mi compañero, al final habíamos quedado en que él me vendría a buscar a mi piso. A decir verdad, estaba algo nerviosa. Ni siquiera sabía muy bien por qué acepté.

A ver, yo a Jaebum lo veo como mi compañero y mi amigo cercano, lo que últimamente había estado bromeando y coqueteándome un poco y si acepté, creo que es porque hace mucho que no salíamos juntos en plan amigos, aunque creo que esta vez será distinto. Mientras trabajamos él me echaba miraditas y se veía ansioso de que llegara la noche para nuestra ''cita'', él mismo ya lo había llamado así.

Intenté no sentirme incómoda, de verdad que lo intenté.

Salí antes del trabajo incluso él se disculpó por no poder llevarme a casa ya que debía quedarse a terminar un par de tareas. No sé por qué se disculpaba si la gran mayoría de veces vuelvo a casa andando o en bus, pero agradezco su caballerosidad. Antes de marcharme no se olvidó de recordarme la hora en la que me vendría a buscar, le aseguré que estaría lista.

- ¡Me alegro que por fin salgas con alguien! - me gritó Nicole emocionada mientras hablaba con ella por teléfono. Volvía a casa andando, no tenía ganas de meterme en un bus.

- Bueno, no pienses que va a pasar algo más.

- Aisssh - soltó un largo suspiro - ¿aún sigues con eso?

- De verdad, que no estoy interesada en nadie y mucho menos en tener una relación.

- Pero yo no me refiero a una relación ¿También te niegas a algún rollo?

- Nicole, no tengo tiempo para eso...

- Excusas, excusas... ¿Cómo has podido estar todo este tiempo sin tener sexo?

- ¡Nicole! - grité escandalizada.

- En serio, aprovecha, Arianne. Todos necesitamos amor, aunque sea solamente algo de roce casual, ya sabes a lo que me refiero... - decía pícara.

- Pero - me interrumpió.

- Además, Jaebum es un buen partido si tanto te niegas a Jimin...

- ¿Por qué metes a Jimin ahora? ¿Qué tiene que ver?

- Arianne, no sabes la suerte que tienes de tener a Jimin como vecino.

- Si tanto te gusta, tíratelo tú.

- Ehhh ehhh, relájate amiiiga~ - me dijo ella y rodé los ojos.

- En fin, siempre que hablo contigo de este tema se me ponen los pelos de punta.

- A este paso terminaras monja, le rezaré a los dioses para que te iluminen el camino.

- Eres una tonta... - le mascullé intentando esquivar a las personas que caminaban a contradirección.

Se río.

- Venga, disfruta de esta noche, virgencita.

- Que te den.

- Ojalá, Arianne, ojalá.

- Pero ¿Se puede saber desde cuándo te has vuelto tan pervertida y sin tapujos?

- ¿De verdad piensas que el tema de sexo debería ser tabú? Yo pienso que no.

- Venga, ya vamos hablando - me despedí rápido y volví a escuchar su risa. Colgué.

Unos minutos más tarde me encontraba subiendo a mi piso con el ascensor, salí de él y me paré delante de la puerta de mi departamento al que abrí en segundos. A pesar de la pequeña discusión que ayer tuvimos, Jimin estaba ahí cuidando de Haeri.

Perfect Man 2 » Park JiminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora