• Capítulo 05 •

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— ¿Por mí? — empezó a reír, esto realmente le daba mucha risa, él era una de las personas que había arruinado su vida.

— Adiós, Ámbar. — volvió a arreglar la habitación.

— Juro que de esta no te salvas, porque, por tu culpa me hiciste quedar mal frente a Simón. — lo fulminó con la mirada.

— ¿Te refieres al patín, Bonita? — sonrió divertido.

— Primero, sí. Segundo, no me digas así. — rodó sus ojos.

— Tú solita elegiste ayudarme, no es mi problema. — sonrió de costado.

— No me refiero a eso, no te habías dado cuenta que nos grababan, eso me costó muy caro. Fui echada del grupo del Roller, no voy a ir a París y todo por ti, y mi estúpido error del pasado. Todo es culpa de Simón, jamás debí enamorarme. Sabes que, mejor me voy. — Y así fue, se largó de ahí sin más.

[N/A: Ahora es cuando ponen la canción Catch me If you can, que esta en multimedia después de la foto Michaentina ♥. ¿Listos para ponerse sad? Ahre]

  Realmente toda esta situación le dolía, porque ella lo amaba con todas sus ganas, haría lo que fuera para ver a Simón sonreír. Pero no se dio cuenta que una de las razones por cuales ya no lo hace es ella, y sus mentiras. Sigue lamentándose por haberse creado una falsa ilusión, un falso amor, una falsa sensación de cariño. Extrañaba tanto cuando Luna aún no pisaba Argentina, cuando todo estaba a sus pies, la vida le daba todo lo bueno, y esos tiempos en los que Matteo y ella, eran ¿Inseparables?. Ahora que se lo pone a pensar, no era amor, era conveniencia, pura popularidad, fama. Pero con Simón todo era diferente, si se amaban, si se querían, si sentían algo el uno por el otro.
Más recuerdos se hicieron presentes en su mente, pasaban rápidos, como los buenos momentos.

«— Pero no me mientas Ámbar, no me mientas a mí. — lágrimas caían de sus ojos — Porque yo te entregué mi corazón a ti, yo confíe en ti y tu no, y es horrible. Por una vez en tu vida di la verdad. »

«¿Cómo puedes hablar de amor si estas llena de odio?.»

«Me descepcionaste.»

«No me interesa lo que me quieras decir.»

« Dejame sólo. »

« ¿Eres consciente de que pusiste en peligro a todos tus amigos? »

« Yo pensé que tu y yo, podíamos hacer algo padrisimo. »

« No me digas que me quieres, porque no es verdad. »

«¿Por qué me mentiste?. »

« No puedo volver a confiar en ti. »

Se tiró a la cama y enterró entre sus manos su cara, no podía más del dolor.

— Te necesito... — empezó a llorar.

« — Y es que no quiero que este momento termine nunca...nunca — se acercó mas a ella.

— Espera, espera, espera.

— ¿Te arrepentiste? — su sonrisa se esfumó.

 Bonita© | SimbarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora