― ¿Creéis que está muerto?
Preguntó una voz. Apenas un murmullo entre el dolor de cabeza.
―No, aunque non so come puede seguir vivo. Deberíamos llamar un'ambulanza ―contestó alguien.
¿Ambulancia?
No, no, y ni de coña. Despierta idiota, me dije.
―Estoy bien ―logré balbucear, todavía atontado―. Que nadie llame a una ambulancia.
Escuché a Luca reírse.
―Sabía che questo le haría reaccionar.
Escuché un golpe.
― ¿Te parece momento para hacer bromas? ―Le regañó, Miriam.
Por primera vez desde que los conozco, no hubo réplica.
Solo podía significar que estábamos en problemas.
Abrí los ojos, tan rápido como pude. Me encontraba sobre la misma mesa que había roto. Y me incorporé como pude, ayudado por Luca y Noko.
Para cuando reuní valor suficiente para mirar alrededor, el instituto estaba destrozado.
Había escombros por todas partes, la mitad del patio había caído, y ahora era un lugar desierto. Tan solo quedaban algunos rastreadores inspeccionando la zona en busca de cadáveres. Seguramente lo reconstruirían con magia en las próximas horas.
A mi alrededor Luca, Miriam y Noko me observaban, todavía consternados por que a esas alturas yo no fuera un cadáver.
― ¿Seguro que estás bien? ―preguntó Noko, mirándome con los ojos como platos mientras yo me sacudía los escombros de encima. Me había dado un golpe en el hombro y me dolía un montón todo, pero ya estaban pasando bastantes cosas como para quejarme.
―Sí ―asentí cabreado en general, no con ellos, sino por la situación. Pero algo no cuadraba, y acababa de darme cuenta de qué era― Espera un momento ―Le dije a Luca, mirándole asustado―, ¿Dónde está Amy? ―pregunté con rapidez.
Los tres intercambiaron una mirada de gravedad, y Miriam ocultó su rostro tras sus manos. Temblaba de pies a cabeza.
Y no. No fue gracioso.
― Reitero mi pregunta ―tercié, tratando, en vano, de calmarme― ¿Dónde está Amy?
Se hizo el silencio.
―No te vas a creer nada de esto ―empezó Noko, despacio, buscando nervioso las palabras.
―Oh, sí se lo creerá. Considera che hai visto cose che nessuno imaginaba hasta esta noche ―añadió, Luca. Hasta aquel instante no me había percatado, pero tenía una fea brecha en la frente y sangre por toda la camiseta. De seguro se habría dado algún golpe con todo aquel barullo.
―Pues explícaselo tú, listo. Como es tan fácil y lógico todo ―Le regañó Noko desesperado.
Luca tomó aliento y me miró buscando calmarme, o más bien tratando de no alarmarme más de lo que ya estaba. Y sin mucho éxito, a decir verdad.
―Il fatto é che ―balbuceó, procurando elegir unas palabras adecuadas que nunca lograrían expresar de forma exacta lo que habían visto―. Un fumo... nero... se la ha llevado ―culminó con una impotencia imposible de disimular, mirándome en busca de respuestas que yo no tenía porque mi corazón acababa de detenerse―. Merda, sé que suena stupido, ma io intenté apartarla, e me lanzó hacia atrás, e me di con la ventanilla de un coche, e poi...
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SLADERS (I). UN CAMINO BAJO LAS ESTRELLAS [COMPLETA]
Paranormal"Eliha tiene dieciséis años, aunque ni siquiera sabe si cumplirá los diecisiete. Le gusta matar, o al menos eso se dice, para poder seguir matando. No quiere creer en las viejas historias que subyugan a la realidad en la que vive. Pero sabe que la...