ONLY ONE YEAR

Capítulo 31 "Nuestra culpa"

Siempre consideré a mi hermana como mi mejor amiga, mi compañera incondicional, hasta mi heroína y ejemplo a seguir. La amaba con todo mi corazón, ya que desde muy pequeñas siempre me ha protegido y defendido, además de hacerme reír sin importar la situación en la que nos encontráramos. Contaba con ella para absolutamente todo, sin importar si se tratará de un robo a un Banco, sabía que ella me iba apoyar. Estoy mas que Segura que sin ella, no hubiera podido soportar a mis padres, o si quiera mi vida.

Es mi hermana, y la amo.

O la amaba.

Ahora lo único que siento es un dolor profundo y demasiada ira y sentimientos encontrados. No se a quién culpar, porque creo que no es uno el culpable, sino ambos... mi hermana y mi novio.

Wow...

Creí poder confiar totalmente en mi hermana e incluso llegué a creer que ella me ayudaba con Axel, cuando en realidad me apuñaló por la espalda... como una maldita perra.

No sabía que hacer, quería llorar, golpear cosas, gritarle...  Gritarles y decirles cuanto los odio ahora mismo. Porque Si, puede ser mi hermana pero me traicionó y de la peor manera, nisiquiera intento decírmelo sino que por el contrario se quedó callada y actuó con descaro frente a mi, finginedo que nada pasó y creyendo que nunca me daría cuenta de lo que ella y Axel hicieron.

Estaba en shock, quería hacer tantas cosas y en vez de Eso, estaba estática y apunto de explotar.

Trataba de controlar mi respiración para que Axel aun no notara mi presencia, aunque me importó una mierda cuando simplemente lo empuje, haciendo que su celular cayera al suelo y él tambaleara un poco.

En cuanto se reincorporó me miró horrorizado y trato de poner una de sus manos sobre mi mejilla, pero rápidamente lo aparte de un golpe.

--Jess... Yo...-- Trato de hablar, pero se detuvo.

Se detuvo porque no soporte el simple hecho de verlo, y sin más mi mano estalló sobre su mejilla. Dandole una buena cachetada, tanto asi que sono y en segundo la palma de mi mano quedó marcada en su mejilla.

Él suspiró adolorido y me miró con culpa y tristeza.

Sin poder evitarlo simplemente empecé a llorar, ni siquiera intente contenerme. Las lágrimas salían de mis ojos a mares y aún asi mantuve la vista fija con él, hasta que la apartó.

--¿La culpa no te deja verme a los ojos?--Pregunte con Voz ahogada y llenandome de valor para enfrentarlo.

Avance tres pasos hacia él, ahora si quedando frente a frente, tan cerca que podía escuchar como su corazón latía con fuerza y rapidez, igual que él mío.

Él suspiró y abrió la boca para hablar pero no dijo ni una sola palabra.

-- Eres... eres...--Intente insultarlo pero un gran nudo se formó en mi gartanta  impidiendome a hablar. Más lágrimas salían sin parar y decidí no darle ese gusto.

Rapidamente seque mis lágrimas con la Palma de mi mano y tome aire.

--Jess, yo en verdad lo siento, lo siento mucho.--Su voz se escuchaba temblorosa y por el leve temblor en sus manos y al ver sus ojos algo cristalizados puede que Si, lo sienta. O sea una simple actuación y una disculpa vacía.

-- ¿Cuál era tu plan?--Pregunto con sarcasmo y frunzo el ceño.-- ¿Juego con la hermana menor, mientras follo con la mayor? O pensaste ¿Qué mejor manera de cagarla que acostandome con su hermana? --Lo mire con desprecio y le aplaudí.--Te felicito Axel, en serio...--Sonreí y tome su mano, entrelazandola con la mía.-- Sabes... me encantaba estar asi contigo, o incluso abrazados. La verdad pensaba que estar contigo era lo mejor. --Mire un rato nuestras manos entrelazadas, para luego verlo a él con una sonrisa tierna.-- Pero, nunca más estaremos así...--Solté su mano y retrocedí un paso.-- Porque ganaste, y cerraste el juego con broche de oro. Ya que jamás, en toda mi vida... me habían lastimado de esa forma en la que tu lo hiciste...--Vi su rostro totalente desfigurado y confundido, además de ¿dolido? --Se acabó Axel, y no sólo nuestra relación, sino que también acabaste con todo lo que sentía por ti, tu y mi hermana acabaron con todo, ¡Con todo! Porque eso eres, ¡Un maldito idiota que  solo piensa en si mismo, sin importar si lástima a otras personas! ¡Y mi hermana es una perra, una maldita perra! Asi que desde este momento, tu y yo terminamos, y Verónica para mi, deja de ser mi amiga y ya no la llamaré hermana.-- Y sin esperar excusas o algo por su parte, sali casi corriendo de ahí, y me dirigí a mi casa.