Amber:
Los rayos del sol descendieron sobre mi cara haciéndome un cosquilleo en mi nariz, estornudo abriendo completamente mis ojos. Recordé que no había sonado mi alarma.
Mierda.
Con desesperación empiezo a revolver toda la cama en busca de mi móvil, no podía llegar tarde.
Al encontrármelo lo enciendo pero noto que no era mía ya que mi fondo de pantalla es una foto de Erika, de este era de una banda de rock, frunzo el ceño ¿De quién sería? Niego con la cabeza y veo la hora de este móvil.
Las 06:30 Suspiro aliviada pero ¿Dónde estaba mi celular? ¿Y de quien era este celular? Oh, cierto. Niall.
Sonrío al recordar que ayer se quedó dormido en mi regazo mientras le leía mi libro, viejos tiempos aquellos.
Salgo de mi cama para luego escuchar a fuera una risas provenientes de la cocina, la música de 1D sonaba y el olor a comida invadía mis fosas nasales.
Al entrar en la cocina me encuentro con una Erika cantando y a un Niall haciendo el desayuno, Erika me ve.
— ¡Mami! —Exclama sonriente— Ya despertaste.
Niall se gira y me ve, me sonríe.
—Buenos días, Ambs. —dice mientras le sirve a Erika unos huevos revueltos.
—Buenos días—digo con una voz ronca, Erika suelta una risa.
Sin decir nada más me siento en la silla de la mesa mientras Niall me servía comida, le sonrío adormilada mientras el corresponde mi sonrisa.
Agarro el tenedor y le doy una probada a su desayuno. Dios, era delicioso.
— ¿Te gusta? —cuestiona el sentándose con nosotras, en su plato puedo ver tostadas, huevos revueltos y como unos 5 tocinos, el si era de comer mucho.
—Esta delicioso, Niall—le doy otro bocado— ¿Dónde aprendiste a cocinar?
El encoje sus hombros, sonriente.
—Por ahí—Responde con simpleza, le tenía envidia. Cocinaba mucho mejor que yo.
—Papi—llama Erika a Niall— ¿Me sirves el jugo de naranja?
— ¿Las palabras mágicas, preciosa?
—Por favor—responde con una mirada adorable, Niall le sirve el jugo.
—Muy bien, cariño—besa su mejilla.
— ¿A qué horas te has levantado para realizar esto? —cuestiono mientras le doy un sorbo a mi juego de naranja.
Él sonríe.
—A las 6 y punto, me rebusque algunas cosas y empecé a cocinar, en unos minutos apareció Erika y empezamos a cocinar juntos—responde luego de tragar su bocado de comida.
—Papi cocina mucho mejor que tu mami—dice Erika, le enarco una ceja.
— ¿Ah, sí? —ella asiente.
—Ah, si—suelto una risita junto a Niall.
Con mi tenedor busco nuevamente los huevos revueltos pero sin darme cuenta ya me los había comido todo, Niall me mira.
— ¿Quieres que te prepare más?-le asiento mientras él se levanta de la silla.
Mi vista se concentra en él, como quita los huevos y los revuelve, como empieza a cocinar, era impresionante. Su ceño estaba fruncido y concentrado mientras cocinaba, su cabello estaba peinado hacia abajo lo cual le dejaba más tierno de lo que ya era.
Ladeo mi cabeza sonriendo, mi vista se baja hasta su pantalón donde me encuentro con algo. Él tenía mi celular.
—Mami ¿Qué vino primero? ¿La gallina o el huevo? —cuestionaba Erika mirando su plato de huevos revueltos, le miro.
—Creo que la gallina—ella frunce el ceño.
—Pero si fue la gallina ¿De dónde vino la gallina? Obvio que del huevo, yo digo que vino primero el huevo. —sentencia cruzándose los brazos, ruedo los ojos divertida.
Carraspeo para aclarar mi voz.
—Niall —llamo mientras el voltea.
— ¿Qué sucede Ambs? —cuestiona sonriendo.
— ¿Puedes darme el número de Harry? —el frunce en entrecejo con recelo.
— ¿Para qué? —responde seco, ahogo una risa.
—Es que quiero informarle algunas cosas sobre Jade, sobre el embarazo pero yo no tengo su número.
Él se tensa.
—O-ok—responde tartamudeando— Espera que termino esto.
Apago el horno y me sirvió nuevamente sus deliciosos huevos revueltos.
—Ahora ¿Me das el número? —el traga saliva.
—Bueno, espera que me voy a tu habitación que allí deje mi móvil—arqueo una ceja.
— ¿Y el que está en tu pantalón? ¿Acaso no es ese? —él pone los ojos en blanco.
—No, es que…—quito mi celular de su bolsillo.
—No sé qué hiciste con mi celular pero espero que sea la última vez James—el relame sus labios secos.
—Lo siento pero no hice nada malo ¡Te lo juro! —Erika suelta una risita.
Desbloqueo en celular y no había nada nuevo, excepto una foto Selfie de Niall y Erika sonriendo como fondo de pantalla, sonrío con ternura. Era una foto de esta mañana.
—Solo era eso, Ambs. Para nada mas—dice encogiéndose los hombros.
—Lo veremos Horan, lo veremos—bloqueo mi móvil para luego seguir con mi desayuno.
Niall:
Por un pelito y estaba muerto, la verdad no hice nada malo aparte de borrar el número de Daniel ¿Qué? Son celos de que ella tenga su número y en cualquier momento se aburra de mí y lo llame.
Si, tal vez sea un celoso extremo pero ellas dos son mis adoraciones y por nada en el mundo quisiera perderles por alguien o peor, por un EL.
No creo que Ambs. Se dé cuenta de lo que hice, si al menos no necesita hablar con él.
Pero yo solo protejo lo que es mío.
(…)
—Adiós papi—besa mi mejilla y la veo entrar en su colorido kínder.
Amaba a esta niña. En serio.
Al voltearme me encuentro con Alan, su supuesto príncipe, el niño me ve y sonríe automáticamente.
—Señor cantante—dice como sobre nombre, es mucho mejor que un: Hola suegrito.
Que tonto eres Niall, es aun no dirá eso. Espero.
—Hola Alan—le saludo con una sonrisa, el me pasa su mano la cual la estrecho.
— ¿Puedo preguntarle algo?-cuestiona mirándome con sus ojos miles, si no fuera por Perrie diría que es el hijo perdido de Zayn.
—Claro, pequeño—él sonríe mientras de su mochila quita un papel.
—Es un dibujo que le hice a Erika—muestra el contenido, lo cual era un dibujo de un corazón algo deformado en donde en el medio decía: AxE 4ever.
Sonrío con dulzura.
—Claro campeón ¿Por qué lo pregunta?
Él sonríe.
—Erika me gusta. —responde ruborizándose, siento una gran ternura hacia él.
El amor de niños, algo tierno ¿No creen?