Capítulo dieciocho

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Narra Idally:

Apenas salió, las lágrimas resbalaron por mis mejillas, el corazón dolía, sentía que me faltaba algo pero no sabía lo que era.

Tranquilízate—intento calmarme Néme—estaremos bien, solo cálmate

Por más que lo dijera así de fácil, era demasiado complicado para mí.

¿Por qué la vida se ha empeñado en llevarme por los caminos peores? ¿Qué acaso no podía darme un vida normal?—pensé

Era claro que no podía, tenía que complicarme la existencia, complicarme la vida y ponerme en jaula.

Cálmate, no te alteres, si sigues así perderemos por completo todas las pistas llevamos hasta ahora, los sueños son pistas.—respondió Néme alterada.

Eso intentó pero, no puedo, mi corazón late aceleradamente, algunas cicatrices se abrieron y arden demasiado—respondí

Sentí pesadez en el cuerpo, me sentía cada vez más débil que nunca, sentía que apenas podía mover mi cuerpo.

Descansemos—ordeno Néme asustada—No podemos seguir así

Caminé lentamente hacía la salida del despacho, sentí que me observaban pero no había nadie, ignore mi sexto sentido y subí las escalera con esfuerzo.

Narradora:

Al salir el alfa del despacho ni siquiera noto la presencia de Daniel a un costado suyo, el pequeño había escuchado los gritos y las cosas que se habían aventado.

La mirada de Daniel cambió drásticamente al mirarla salir, ella paso a su lado sin notar su presencia por primera vez, la mirada de Daniel conecto por unos segundos con la de ella y pudo notarlo, el plazo se estaba acabando tanto como el brillo de sus ojos se iban apagando, en ese momento estaba desconcertado.

¿Cuántos meses habían pasado desde su transformación? apenas había sido un mes y medio como mucho.—se cuestionó y respondió así mismo

Mientras ella subía noto el cansancio en sí misma, la tristeza que comenzaba a notarse cada vez más.

Daniel sabía que su trabajo era cuidar de ella, puesto que para eso lo habían mandado, él sabía que por más que se viera como un niño, él era alguien de la misma edad de ella.

puesto que tiempo atrás cada cierto siglo nacía una pequeña en un cuerpo y su alma nacía en otro, así como pasaba con la chica, también elegían a un chico que sería quién la ayudaría a retomar su alma que se encontraba en otro cuerpo cuando el tiempo casi llegara al límite.

En el caso del joven, bueno esté era elegido por las familias de aquellos lugares, para elegirlo debían primero conocer a la chica que se había divido luego conforme llevaran cierto tiempo escogían al más parecido o distinto a ella según dictaban las reglas, se dice que su unión es solo por deber pero en dados casos ha ido más allá de la entendimiento y han terminado creando un vínculo más fuerte de lo esperado, pero el chico escogido solo crecerá en mentalidad mientras que su apariencia siempre será de niño hasta que la chica a la que debe cuidar recuperé su alma.

El poder que obtienen al recuperar su alma es demasiado, ellas terminan siendo mucho más fuerte de lo que todos podrían imaginar, algunas de ellas tienden a tener el poder de que sus palabras se hagan realidad aunque en pocas ocasiones se da esto.

Cuándo ellas recuperan su alma, se puede ver a su loba cambiar de color dependiendo de la fuerza que estas tengan en sí.

Estos hechos han transcurrido desde tiempo atrás. Daniel tenía que cuidarla y para ello su edad se detuvo dejándole verse como un niño hasta que ella recuperará el envase de su alma, sólo de ese modo él podría volver a tomar su apariencia real.

Idally [#1]©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora