Idally [#1]©

Capítulo veintidós

Narra Iker:

Idiota, ¿Qué demonios hiciste?—gritó furioso mientras se acercaba a ella

Idiota, idiota—pensé

Le mostré él lugar que le corresponde, debería hacer más caso—hable sin siquiera mirarlo

Alfa—gruñó con enfado—Te pasaste, ¡Que no vez lo que hiciste!

Señaló la sangre que se hacía notoria en su ropa, era de sus heridas abiertas.

No eres quién para regañarme—Le dije en tono frío—Vamos, tenemos cosas más importantes por hacer—ordene

No, no la dejaré sola en este estado—respondió mientras la cargaba en sus brazos

Ese idiota está tocando lo nuestro—gruñó Killer

—No importa—le respondí

Es nuestra, no debe tocarla, puedo sentir la felicidad de su lobo tocarla—gruño con enfado—No lo tolero

Ignore sus enojos y gruñidos, realmente a mí no me interesaba escucharlo, tampoco él que Karim la tocara o eso quería yo creer.

Mire como Karim la recostaba y tapaba, odiaba verlo cerca tenía que admitirlo pero tampoco la quería conmigo.

Vámonos—gruñí con enfado mirándolo mal, Karim me miró y respondió—Iré a verte luego, ella importa mas

Enfadado, salí azotando la puerta de la habitación.

Quién demonios se creía para contradecirme, no era nadie, tenía que obedecerme.

Narradora:

La joven despertó en la habitación, sobre su cama cubierta muy bien, intentó moverse pero no pudo, sintió dolor en su cuerpo y entonces se dio cuenta que de nuevo estaba vendada, Entonces recordó lo que había sucedido.

Él muy estúpido de su mate la había empujado ocasionando que sus heridas se abrieran.

¡Seguro estaría en cama por unos días!

Daniel entró a su cuarto con una bandeja de comida, la ayudo a tomar asiento e intento darle de comer.

Pero ella se quejó—No soy una niña pequeña Daniel, puedo comer por mí misma—expresó riendo

Estas mal Romy—Respondió Daniel—Déjame consentirte ¿Si?

Ella nomas río y negó con la cabeza.

Durante todo el día se quedó con ella cuidándola, haciéndola reír, viendo la manera de hacerla sonreír.

Karim por otra parte estaba más que furioso con Iker, no lograba entender como él podía estar tan tranquilo después de lo que le había hecho a Romina.

Pero de algo estaba más que seguro, si él no la quería, él si la quería a su lado y haría todo lo posible por tenerla junto a él.

Narra Idally:

Escapar, comenzar una nueva vida—pensé

¿Por qué nada de lo que quería podía hacerse realidad? ¿acaso estaba maldita su existencia?

Debemos irnos—dijo su loba—Él solo nos hora más daño

¿Cómo podemos irnos? ¿A dónde ir? sí en cualquier lugar nos encontrará Néme—exprese con voz quebrada

Podemos desaparecer sin siquiera dejar huella, o talvez sin ser notadas, pero primero deben cicatrizar tus heridas—explico Néme—nos iremos apenas cicatricen

Ya está dicho Néme—aclare a mi loba

¿Podría comenzar una nueva vida entonces?

Lo más seguro es que fuera lo correcto, no está mal soñar con ser libre, no está mal soñar con que todo puede cambiar.

Alejarme del demonio es lo mejor, no puedo cambiar a alguien por más que yo quiera, al menos no a él.

Su mirada fría no tendrá calidez jamás, sus sentimientos están acabados, él no quiere, él no ama, él jamás sentirá algo por alguien, él esta consumido por él poder, por la oscuridad, no hay nada que se pueda hacer por él.

Él es un caso perdido

Y yo no soy su salvación.

Narra Karim:

Lo odio, simplemente odio a ese bastardo, es un Hijo de puta que ni siquiera se merece él puesto de líder en esta manada—pensé

¿Por qué le hace daño?

Si yo fuera él, la protegería de medio mundo, jamás dejaría que alguien la tocase.

Él no la quiere, no puedo entender porque le toco alguien tan linda como ella—dijo Iries mi lobo

Ni siquiera yo lo comprendo—dije

Es que ella es tan linda, tranquila, todo un amor en cambio él es tan...

Estúpido—concluyo Iries

Sinceramente le daba la razón a Iries.

Estuve feliz de sentirla junto a nosotros cuando la cargaste—confeso Iries

Yo también estuve feliz de tenerla en mis brazos—lo admití

¡Ella era tan inocente que siempre quería cuidarla! Es tan perfecta que no pude evitar enamorarme... La amo, amo a la pareja eterna de mi Alfa, es un error quererla pero no puedo dejar de hacerlo, menos ahora que tengo la oportunidad de intentar acercarme a ella.

Él no la quiere, yo sí.

Él no la ama, yo la amo.

La cuidare...

Narradora:

Desde ese día, en ese mismo instante, él había decido que ella sería su mujer, su pareja eterna, la persona con la quería pasar la eternidad...

Ella sería "La mujer del Beta" Porque él lo había decidido así, pero para que fuera suya debía enamorarla.

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Capitulo dedicado a: ByNatyAlejandro