Amor Prohibido | SIMBAR

XXV

Simón POV

Los días han transcurrido algo agitados, no ha sido fácil pero había sabido llevarlo, el que más exigía era Kevin, el papá de Ámbar, siempre quería comer algo diferente y como él le decía, único.
D.- Simón, ¿Ya está lista la merienda?

S.- ya casi, sólo faltan las galletas.

D.- está bien, más tarde te ayudo con el almuerzo. -me guiño el ojo y le respondí con una sonrisa nervioso-

Ella salió y yo empecé a limpiar para dejar todo listo para preparar el almuerzo. Sentí unos brazos rodearme y apretarme un poco.
S.- también te extrañe.

A.- pues yo vi que estabas muy entretenido con Diana.

S.- pero si apenas hable con ella.

A.- pero ella quería otra cosa, se veía a kilómetros.

S.- pero ya sabes que sólo te quiero a ti. Pero no quiero que hablemos de ella, dime que quieres comer.

A.- tantas cosas, pulpo.

S.- a la gallega?

A.- a la parrilla.

S.- no Ámbar, eso es muy difícil, y quiero tiempo.

A.- ya ves, no puedes darme lo que te pido.

S.- cierto, pero te doy esto -me acerque y rápidamente le robe un beso-

A.- Simón… ¿Quieres jugar? Pues que así sea.

S.- no creo que… que haces...

Ámbar tomó una de las galletas y estaba por ponerla en el guisado que sería el almuerzo.
A.- ¿Que crees que haré?

S.- por favor no, eso me costó mucho.

A.- tú empezaste, ahora sufre.

S.- ya mi amor, te doy lo que quieres, pero por lo que más quieras no hagas eso.

A.- ¿Ya no volverás a hacer eso?

S.- te aseguro que..

Me callé al sentir los labios de Ámbar, ella se iba a apartar, pero al poner mis manos en su cintura ella se quedó, paso sus manos por mi cuello y pude sentirlo me mordia el labio ligeramente. Nos separamos y juntamos nuestras narices para después darnos otro corto beso.

Escuchamos unos pasos y rápido nos apartamos, vi entrar al papá de Ámbar, y la miraba molesto.
K.- Ámbar, después del almuerzo te espero en mi despacho.

A.- si ahí estaré.

K.- y tú, esfuerzate más -me vio y su mirada siempre me intimidaba-

Se volvió a ir y Ámbar sólo soltaba una risa, y yo sentía que sudaba de nervios.
S.- Ámbar, tú papá no me quiere.

A.- pero la que te tiene que querer soy yo, o te gusta mi papá?

S.- no eso no, es que, digamos que soy la última persona que quisiera ver, y más junto a ti.

A.- si.. cierto, pero ya verás que le vas a agradar, algún día.

S.- pues ya pero tengo que terminar esto.

A.- seguro queda delicioso.

D.- eso seguro -dijo Diana entrando a la cocina-

S.- he gracias, voy por algo a la despensa.

D.- te acompaño -Diana se acercó y me iba a tomar la mano pero me aparte-

S.- no gracias sólo será un momento.