El profe de arte (Completa)

New taller

Ok, el día no puede estar peor, no sólo que me colgué mirando videos en youtube de todas las cosas que hace la Coca Cola, y llegué tarde a clases ganándome una buena cagada a pedo, sino de que gracias a eso no pude almorzar y tengo muchísima hambre, poniéndome de un humor no tan bueno. A eso también hay que agregar de que el clima era una mierda que te hacía chivar una banda, pero ojo, había un viento que te volaba, ¿Quién te entiende primavera?, invierno volvé. No te fajo más.
Lo único bueno es que estábamos en la última hora, no estábamos haciendo nada, y pusieron música mientras jugábamos a las cartas.

-Che, ¿No queres que te vaya a comprar? -Me pregunta Noe.

-No boluda, salí tan apurada que me olvidé la plata, me quiero matar. Pero bueno, ahora cuando llego a casa me hago algo.

- ¿Te acordás de que tenemos arte hoy, no?-Dice Sofi, la miro abriendo los ojos, mierda, me había olvidado- vas a estar un par de horas más sin comer...

- Ay no, ¿Hoy era? -Dejo las cartas y me acomodo el pelo como puedo, ¿Justo hoy me tenía que venir como linyera?

- Si, hoy empieza... -Me mira- ¿Te estás preparando para el profesor raro compra forros largos? -Me mira burlándose la atrevida.

- N-no boluda, me estoy desenredando el pelo nomás...

- Me estas jodiendo, ¿Estas nerviosa? -Se burla Noe entre risas- Aunque bueno, te entiendo, no vas a querer que ese papucho te vea así.

- Pau, él debería estar así, vos sos la que lo conociste comprando forros...-La interrumpe Noe.

- Forros extra large, cabe destacar.

- Lo que sea -Pone los ojos en blanco sonriendo- Y por más bueno que esté, es el profesor, no creo que le interese como se vea una alumna. -Auch.

- Ha no ser que sea como Oreozobala, ahí si que le interesa como se vea la alumna, y mucho. -Dice Noe encojiendose de hombros.

-Me río, dejo de peinarme y las miro- Chicas, no me interesa él, sino de que no me gusta que me vean así -Señalo mi pelo- Osea, aparte de él, va a haber mucha gente nueva a quien conocer y no quiero que esta sea su primera impresión. Aunque ahora que lo pienso, ¿Desde cuándo me importa, no? -Nos reímos y volvemos a jugar. Aunque disimuladamente me peino un poco, ¿Qué me pasa?

Sonó el timbre, mierda, es hora. Vamos a actuar tranquilamente, a disimular de que no me pone para nada nerviosa ni ansiosa verlo, porque es un profesor y no puede pasar nada, aunque no estaría mal, mierda, mente callate, ¿Si?. Jebús, me gruñe la panza, tengo que empezar a levantarme más temprano así como algo, o mínimo traerme plata así me compro algo acá. Sofi me empuja un poco, la miro.

- ¿Dónde vas, boluda? Es en el sum, te estabas yendo, te vi, ya no hay escapatoria. -Se ríe.

- No me dí cuenta -Me río- vamos, dale. -Dejo que entre al sum primero, me peino como puedo y al entrar... No hay nadie. Keh.- ¿No hay nadie? -Miro para todos lados.

- Al parecer, no sé que onda, ¿Era a las cinco y cuarto, no? -Asiento mirándola, se pone a mirar su celular mientras se sienta- Que raro...

- Ya son y veinte, puedo entender de que no haya ningún alumno -Me arrodillo a atarme los cordones- porque la mayoría sale a las seis y cuarto, pero, ¿Y el famoso profesor? Debería llegar antes, como para conocer el lugar, que se yo, mínimo para ser puntual su primer día. -Me termino de atar, y me levanto sacudiendo el pantalón un poco.

- El famoso profesor estaba en el baño, perdón los cinco minutos de retraso. -Dice él a mis espaldas. Genial, ya la cagué. Sofi intercala miradas entre nosotros dos sin saber que hacer, la miro y me doy vuelta despacio mirándolo a los ojos nerviosa.

- Perdón, yo... -Suspiro- perdón, no quería ser maleducada.

- No pasa nada, creo que no tuvimos un buen comienzo después de todo, bueno... dos buenos comienzos. -Me sonríe. Le sonrió un poco y cuando le estaba por contestar entran dos chicas y dos chicos.

- Perdón profe, no sabíamos donde era el taller y fuimos a preguntar a dirección -Dice una chica.

- No hay problema, no se perdieron de nada. -Les sonríe- sientensé así hablamos de lo que vamos a hacer durante el año -Va a cerrar la puerta. Me siento al lado de Sofi quien me pega un codazo con la boca abierta todavía impactada por mi gran metida de pata. El profesor se sienta enfrente de todos- Bien, yo tengo una lista de las cosas que podríamos hacer, pero quiero saber que cosas les interesaría a ustedes hacer, si ya tienen alguna idea, algo que siempre quisieron hacer, cualquier cosa es válida.-Sofi levanta la mano, él asiente en forma de que prosiga.

- Eh, a mi siempre me pareció como aburrida la parte del pasillo de arriba, literal que me deprime un poco. Podríamos ponerle algo de color... No sé, pintar cosas, o ví una vez una imagen de que colgaban cd's y quedaba re lindo.

- Siento que si ponemos cd's los van a sacar...- Dice un pibe a lo que asiento, tiene razón, acá son unos brutos.

- ¿Y si colgamos otras cosas? ¿Avioncitos de papel? -Dijo una chica. Tengo que aprenderme los nombres urgente.

- Si, o sino, yo tengo muchas llaves en mi casa, tipo, cantidad. Me copó la idea, podríamos empezar con eso sí a todos les parece. Compramos hilos de colores y las colgamos, igual, tiene que tener un significativo, algún mensaje, para así no sólo es una intervención vacía... -Dijo Jeffrey, ¿Jeffrey o Jeff? Creo que después de verlo comprando preservativos tengo merecida la confianza de llamarlo Jeff, aunque sea en mi mente.

- Estaría mejor que cada uno piense lo que quiera...-Digo sin pensar.

- ¿Cómo?- Me pregunta el otro chico.

- Osea, que cada uno use su imaginación y lo interprete como quiera, sino al ponerle el significado ya estamos limitando su libre pensamiento...

- Tiene razón, no le pongamos nada. -Jeff me mira sonriendo.

Después de tres horas de hablar sin parar, presentarnos ponernos de acuerdo en los materiales, y demás, ya era libre de ir a comer de una vez por todas. Me estaba poniendo la campera, mientras el profesor se despedía de todos y Sofi se iba al baño, cuando me doy vuelta y lo tengo a menos de un metro mirándome.

- ¿Qué...?-No termino de hablar porque se me empieza a acercar. ¿Estoy soñando o sigo despierta? Capaz que me desmayé, y estoy en lo más profundo de mis fantasías, no, definitivamente su perfume era real, está pasando su mano por atrás de mi pelo, Santa cachucha, aiuda Mabel. Cuando estaba por agarrarme un paro, veo que se aleja dos pasos y me muestra una hoja de árbol.

-Tenías esto desde hoy -Sonríe mientras me la dá en la mano, se dá vuelta para ponerse su campera, y me mira- Hasta la próxima vez, Paula. -Y así se fue, dejandomé como gelatina, ¿Este chabon sabe que puede ir preso y se divierte igual? Necesito un tanque de oxígeno. Y lo peor de todo, ¿Tuve esa maldita hoja todo el día y nadie me dijo?