"Hermosa, en una hora te paso a buscar, te tengo una sorpresa."
No sé que me altera más en esa oración, o el hecho de que me tenga una sorpresa y yo soy re ansiosa, o que pasa en UNA HORA y yo acá tirada en el sillón, vestida como vagabunda mirando Supernatural por quinta hora consecutiva. O sea, es domingo, ¿Qué iba a saber yo que él me diría para salir? Hasta con mis amigas sabemos que el domingo es para descansar.
En fin, tengo que hacer tiempo récord así que me baño lo más rápido que puedo tomando el tiempo con la música, tardé cuatro canciones, o sea quince minutos aproximadamente, me seco y envuelvo en una toalla para seguir preparándome. Lo bueno de esto y que agradezco a la vida por eso, es que no hace falta secarme el pelo ya que se me forman los rulos en las puntas por si solos, así que sólo me queda la parte más difícil: la bendita ropa.Ok, no pensé que sería tan difícil, pero no sé donde vamos a ir así que no sé que ropa usar, ¿Y si llamo a las chicas? No, tengo que hacer esto sola... en realidad están ocupadas, el domingo es familiar y siempre pasan el día con sus respectivas familias, y me alegra tanto que no podría interrumpirlas. Es algo que yo no puedo tener, así que para mi también es sagrado que lo disfruten.
Bien, después de tomar la dura decisión de una forma totalmente madura...
// Hicíste el ta te tí //
¡Callate, Minerva! Fue difícil. Ok, cómo decía, el azar decidió que use un vestido blanco, un poco escotado con mucho movimiento y una cinta azul que cuelga por el costado de mi cintura, que me lo regalaron las chicas para mi décimo octavo cumpleaños pero es tan lindo que nunca tuve la oportunidad de usarlo, con unos zapatos negros un poco altos y mi queridísima campera de cuero. Me pongo un poco de maquillaje y ya estoy. Y con diez minutos de sobra, tiempo perfecto para ver si llevo todo y acomodar un poco.
Veo la hora e instantáneamente empiezo a transpirar, ¿Por qué estoy tan nerviosa? ya hemos salido muchas veces, no sé porqué esta vez tendría que ser distinto. Voy bajando en el ascensor y mi pulso al contrario de este, va subiendo. Podría escupir el corazón en cualquier momento. Bueno, no está, pero debe llegar en cualquier momento así que mejor voy saliendo. Una vez que cierro la puerta me doy cuenta de que hace bastante frío, va, no sé si frío, pero hay un poco de viento.
Mientras pienso en el clima, reconozco el motor de mi carruaje por el resto de la noche, frena en frente mío y ahí es cuando noto que tiene un pantalón de vestir gris, zapatos y una camisa blanca con los dos primeros botones desabrochados y arremangada. Se saca el casco y me sonríe de esa forma tan especial que tiene hacia mi. ¿Frío dije? Me estoy muriendo de calor ahora.
- Hola... Wow, estás... no tengo palabras.-Se baja y me mira- Cualquier definición de belleza te queda chica. -Me besa tomándose su tiempo. Y yo siento que mis piernas se hacen de gelatina.- ¿Y, cómo me veo yo? -Me suelta y dá una vuelta con su sonrisa de que ya sabe que se parte solo.
- Hermoso como siempre, aunque definitivamente un poco más. Núnca te había visto con pantalones de vestir y por favor esa camisa, me estoy volviendo loca. -Suelto sin pensar a lo que me pongo colorada al micro segundo, se ríe con ganas para después besarme.
- Me encanta tu sinceridad, ¿Vamos? -Se sube a la moto y me extiende la mano que con gusto acepto.
- Hablando de eso, ¿Dónde vamos? -Le digo mientras me subo atrás suyo y me pongo el casco.
- Si te lo dijera, arruinaría la sorpresa, vas a tener que esperar un par de minutos... ¿Estás lista?
- Soy demasiado ansiosa, pero voy a hacer una excepción sólo porque no me puedo concentrar mucho con tu perfume entrando por mis fosas nasales. Pero si, estoy lista.-Escucho su risa mientras niega con la cabeza, aprieto mis piernas al rededor de las suyas y me abrazo a su espalda, que después de su pecho, es la mejor almohada. Cierro los ojos para disfrutar uno de mis momentos favoritos, y emprendemos el viaje.
Una vez que siento que nos frenamos, abro los ojos y me despego un poco de Jeffrey , bajo de la moto y cuando me saco el casco veo que estábamos en... ¿Su departamento?
- Hey, no luzcas tan decepcionada, todavía no viste nada.-Se ríe bajando de la moto ya sin su casco.
- No, no quise parecer decepcionada sólo que pensé que íbamos a salir y tener una cita romántica o algo así, perdón, es que veo muchas películas y series...
- Y yo dije que todavía no viste nada, vení.-Me agarra de la mano, entramos al edificio y cuando se abren las puertas del ascensor hay globos de colores en todo el techo, le sonrío.- Es sólo el principio.-Me sonríe de vuelta y apreta el último piso.
- No sabía que podíamos ir a la terraza...
- Técnicamente no podemos -Se encoge de hombros, y cuando se abre la puerta ya en el último piso, mis nervios están por los cielos, núnca nadie hizo algo así de lindo por mi como una sorpresa, sólo tuve un novio que era bueno conmigo, pero núnca se esmeró en ser romántico, no se lo exigí obviamente, tampoco hacía falta, núnca lo vi necesario porque no sabía nada sobre el amor (No es que ahora lo sepa), pero con sólo pensar que Jeffrey estuvo planeando algo para mi, me derrito de amor.
Una vez que caminamos los pocos pasos en el pasillo decorado con luces que dá hacia la puerta de la terraza, él abre dejándome pasar e inmediatamente me tapo la boca con las manos de lo hermoso que estaba todo, había armado como una cama llena de almohadones con un proyector hecho de una sábana, y absolutamente toda la terraza decorada con luces...
- Esto es...-Me quedo sin habla.
- No es todo-Lo miro y camina hacia un costado- También preparé la cena...-Señala una mesa para dos que no había visto antes y al verlo ahí, con todo la imagen completa y con su hermosa sonrisa se me aguaron los ojos.- Hey, no, mi amor.-Viene hacia mi con preocupación- ¿Qué pasa? ¿No te gusta?
- Es que... esto es tan hermoso, vos sos tan hermoso, gracias. Por todo esto, es un sueño.-Acaricio su linda cara. Y me levanta en el aire para poder besarme.
- Vos sos un sueño, te merecés esto y mucho más.-Limpia mis lágrimas con ternura y besa mi frente.- ahora vamos, que la comida se enfría.-Me sonríe y vamos caminando abrazados hacia la mesa.
Creo que va a ser una noche hermosa.
ESTÁS LEYENDO
El profe de arte (Completa)
Random《Cuando agarrar el pincel toma otro significado》 Básicamente empecé esta novela como una joda con amigas porque mi profesor de arte en ese entonces era muy lindo y jodíamos con que parecía la típica novela, (de ahí también el nombre) pero después se...