Bachota

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El momento de la verdad llegó; anunciaron que el salón de Carla iba a ser el próximo en bailar y mientras estábamos llegando a nuestros lugares para tener una buena vista del baile empecé a pensar todos los distintos escenarios que podrían pasar:

- El baile es así nomás y Jeffrey apenas la toca.

- El baile no es así nomás y Jeffrey la re toca.

- Mágicamente aparece el pibe que tendría que bailar con Carla y salva el día.

- De la nada empieza a llover torrencial y se suspende todo.

- Están posicionados para bailar y le cae un piano encima a Carla. Sin lastimar a Jeffrey, por supuesto.

- Voy buscando la pala.

O simplemente me dejo de romper las bolas y me concentro en que no me afecte. Creo que me gusta más la opción cinco. Digo, la uno. Siento la mano de Sofi en mi hombro.

- Si te sentís mal, nos vamos a clavarnos un kilo de helado, ¿Dale?-Me dice sonriendo. Y asiento de la misma manera. No quiero hablar, me estoy muriendo por saber que pasa.
Escuchamos los aplausos y vemos que empiezan a posicionarse los chicos, y ahí entra él, con una remera roja brillosa tremendamente ajustada, porque seguro que era del pibe que no vino y son como dos talles menos, por ende le marca bien esos músculos enormes que tiene y que me vuelven loca, ok, me calmo. Cuestión es que se vé extremadamente hermoso y partible con sus pantalones negros y esa sonrisa, aunque se nota que no está cómodo, ya sé diferenciar sus sonrisas y esa no es una de felicidad. Bien, punto a favor para no desconfiar. ¿Punto en contra? El vestido cortísimo de Carla, ¿Está permitido usar algo así en una escuela?

- Boluda, no. ¿Qué es eso, una remera? -Se queja Noe.

- Parece que no entendió el concepto de vestido...-Dice Jaz.

- No puede venir así, ¿O si? No sé, de todas formas me voy a quejar después.- Dice indignada Sofi, mientras se cruza de brazos.

- Chicas, su papá le dá demasiadas donaciones a la escuela, no van a hacer nada con ella.-Les digo enojandome. Noe pone los ojos en blanco.

- Bueno, son detalles. Admiremos el torso y los brazos del profe. Realmente me dan ganas de que me interese el arte.-Le pego en el brazo- ¡Hey! Obvio es joda, tranquila. -Nos reímos.

Volvemos a prestar atención cuando empieza la música.
El primer movimiento que hace Carla es agacharse sensualmente y empezar a acariciar sus piernas hasta llegar a los pechos operados. Si, son operados, ¿Cómo lo sé? Porque ella se encargó de que toda la escuela sepa que su papi le cumplió el capricho de pagarselas cuando tenía tan sólo quince años. Yo a esa edad seguía comiendo tierra, y ella ya estaba con pechos nuevos.
Como decía, Jeffrey la agarra de la mano y la hace girar tres veces, con una buena distancia, una vez que quedaron cara a cara, ella se acerca y él se aleja un poco, dejando distancia, se mueven en sincronía, con distancia, aclaro.

// Hay distancia, se entendió.//

Minerva, siempre es bueno aclarar que hay distancia entre ellos dos.

- Van bastante bien, ¿No? Tranquilos...-Me dice Sofi evaluando la situación y cada paso que dan.

- Como que se nota en su cara, que él no la quiere cerca, que está haciendo esto por obligación y que no quiere cagarla.-Nos dice Jaz pensativa.

- ¿Todo eso se le nota en la cara? -Se burla Noe.

- Igual si, es bueno que haya distancia...

// Que pesada //

¡Dejame en paz!

- Si, ¿Ves? Te dije de que no había de qué preocuparse...-Me quiere tranquilizar Sofi, la miro sonriendo un poco.

- Si, supongo. Pasa que nunca se sabe que esperar de ella...

- Si lo sé, pero él no creo que... ay mierda.-Dice preocupada y me doy vuelta como el exorcista.

Y ahí estaba pasando lo que menos quería, Carla detrás de Jeffrey manoseando sus pectorales y bajando la mano, él se queda como petrificado sin saber que hacer y ella, ugh, ella lo rodea sin dejar de tocarlo y se agacha frente a él rozando todo su culo por todo lugar que pueda. La mato, ya está.

- ¿Eso es... bachata? -Pregunta confundida Jaz.

- Eso es más bachota que bachata, mirá como se le pega a su... ugh. ¡Lo sabía! Esa perra, era obvio que lo iba a hacer. No te preocupes, Pau. El plan de asesinato sigue en pie.-Me asegura Noe.

- Igual paren, porque él no parece disfrutarlo...-Lo quiere defender Sofi.

- Sofi, dale. ¿Qué no ves? Esa claramente es cara de que está aguantando una erección, no está tratando de evitarlo, mirá como la agarra de la cintura. Esperen, ¿Eso está permitido en la escuela?-Dice horrorizada Noe.

- Yo... necesito irme. No quiero seguir viendo como disfruta estar haciendo eso con otra piba. Me quiero ir antes de que se ponga peor...

Y como al parecer la vida me odia y no quiere que me salga algo bien, para el paso final, Carla le mete la mano en la remera y salta encima de él, tocándolo con admiración y desenfreno. ¿Y él? Obvio que se deja. No sé que estará jugando, pero no me parece para nada gracioso.
No aguanto más y camino hasta nuestro stand, las chicas me siguen.

- Pau... ¿Queres que nos juntemos así no estas sola? Nos podemos ir ya, en teoría sólo falta que anuncien al ganador, pero no es importante, después nos enteramos de todos modos.-Me sonríe un poco Sofi.

- Eso, podemos ir a ver películas, o ir a tomar algo... lo que quieras.-Trata de tranquilizarme Jaz.

- Voto por ir a tomar hasta olvidar.-Levanta la mano Noe y me río un poco.

- No chicas, gracias. Sólo quiero ir a casa, ustedes quédense si quieren, la estaban pasando bien.-Agarro mi mochila y mis cosas.

- Pero no queremos que vayas a llorar a tu casa. O si, si es lo que te hace bien, pero no deberías estar sola, te vas a poner mal al pedo.-Trata de convencerme Jaz.

- En vez de ponerte mal al pedo, ponete mal en pedo, es más divertido.-Me sugiere Noe.

- Tenes un serio problema con el alcohol.-Me río un poco- No, en serio, gracias. Pero quiero ir a casa...

- No entiendo igual porqué, o sea si, sé que es por lo que pasó pero, ¿Realmente vas a dejar que esa atrevida te arruine la noche? Estuviste re emocionada con esto, no dejes que te lo arruine un par de siliconas con patas.-Dice decidida Jaz.

- Wow, Jaz. Nunca dijiste algo tan cierto...-Se burla Noe y Jaz le pega despacio. Nos reímos.

- ¿Sabes qué? Tenes razón.-Dejo mis cosas donde estaban- Esto no se va a volver a repetir, y no voy a dejar que me lo arruinen sólo porque mi novio es un baboso pajero.

- Más vale que sigas teniendo eso en mente porque ahí viene el baboso pajero...-Me dice bajito Sofi.

Ok, round uno acá vamos.

El profe de arte (Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora