El profe de arte (Completa)

Aguanten los Charros

En resumen, mi semana fue aburrida, seguimos en la etapa de repaso del año pasado, hay nuevos profesores que se presentan, y hay que volver a presentarnos uno por uno, etc. Así que tengo que admitir que estuve esperando para que sea viernes, no sólo por el finde, sino para tener algo lindo que ver en la escuela. Y si, no paro de maquinarme con lo que pasó la última vez que lo ví, sigo teniendo su perfume impregnado en la nariz más o menos. Que chabon más lindo.
En fin, tenemos hora libre ya que el nuevo profesor no pudo venir, y acá estoy, con mis amigas comiendo y charlando para hacer tiempo hasta que toque el timbre.

-Noe me tira una tutuca- ¿Pensando en tu chongo?

- ¿Eh? Callate boluda, y no desperdicies la comida.

- Aparte, no es su chongo, es el profesor, está bien que esté re bueno, pero no puede pasar nada -Dice Sofi mientras buscaba música en su celular. Noe pone los ojos en blanco.

- ¿Y? Mirarlo es gratis, ¿Se imaginan que pase algo? Después de este año ya no sos más su alumna, pensala. -Me codea mientras levanta las cejas. Me río.

- Ya la estás flasheando.

- Sólo digo, nunca se sabe. -Se encoge de hombros y sigue comiendo. Sofi pone un tema y nos mira.

- Y yo solo digo, de que sería ilegal.

- Ya entendí, tampoco pienso hacer na... ¿Ese es él?-Ellas también miran a la entrada, al tipo que se está bajando de la moto, pone la alarma, se saca el casco y seh, papu, es él.

- ¿Tiene una moto? Chau -Dice Noe comiendo las tutucas como si fueran pochoclos.

- Pero, ¿Qué hace tan temprano? -Sofi me mira y lo mira.

- Capaz que se quedó un poquito traumado con lo del viernes pasado, que tardó cinco minutos y vos ya lo estabas crucificando, igual ya tendría que tocar el timbre...-Mira la hora. Nos vamos levantando.

- No lo crucifiqué, exagerada. -Me río- Y no creo que sea por eso, capaz que se le hizo temprano, que se yo. ¿Vamos yendo? -Me pongo la mochila.

- Ah claro, aparece Mr. Músculo y ya me quieren dejar, está bien. Que buenas amigas. -Noe se hace la ofendida mientras agarra sus cosas.

- Re que ya va a toc...-La interrumpe el timbre- ya tocó, así que dejá de hacerte la pobrecita que no te sale, tarada. -La saluda riendosé, también la saludo, Noe se va y nosotras empezamos a caminar hacia el sum.

- Boluda, ¿Qué es eso, los Charros? -Agarro su celular para escuchar mejor y si, la inconfundible música de los Charritos invade mis oídos.

- Y si, me gustan los Charros, ¿Qué te pasa, wacha? -Se ríe mientras entramos al sum.

- Nada, los amo, aguanten los Charrrossss -Hago el típico gritito de los Charros y me callo en la mitad al darme cuenta de que no estábamos solas y el profesor nos estaba mirando como si se estuviera aguantando las ganas de reír. La vergüenza.

- Veo que vinieron con mucha energía -Nos sonríe burlándose.

- Es viernes y nuestros cuerpos lo saben -Dice Sofi bailando, muy raro. Me alejo un poco.

- Voy a hacer de cuenta que no te conozco, ¿Si? -Me río mientras dejo mi mochila y me siento.

- Oeee, aprendí de vos, ¿Sabes? Así que no te hagas la tranquila que no te sale. -Me pega despacio en el hombro y se sienta al lado mío riendo. Vemos como entran los demás chicos al sum. Nos saludamos y se sientan.

- Bien, no sé si recuerdan que la clase pasada habíamos quedado en hacer el pasillo de arriba más vivo, con más colores, así que traje las cosas para trabajar hoy, Facu y Matías por favor vayan a buscar las escaleras así ya vamos subiendo y empezamos. Chicas, agarren los hilos, sus mochilas y las mochilas de los chicos, por favor, las llaves las llevo yo.-Todos hacen lo que dijo, agarro mi mochila y estaba por salir de no ser porque sentí una mano en el hombro, me doy vuelta- Paula, ¿Me ayudas con la otra bolsa? -Me mira a los ojos, y al ser incapaz de articular alguna palabra, sólo asiento agarrando la bolsa que me estaba pasando, rozando "sin querer" nuestras manos. Y el desgraciado encima me sonríe.- Gracias, vamos.

Ya estando todos en el pasillo de arriba, a cada uno se nos asignó algo para hacer, para que sea más práctico y fácil todo. Las chicas estas que no me sé los nombres están atando las llaves a la tanza, los chicos en una escalera, el profesor está en la otra, y están pasando los hilos de colores formando como una especie de telaraña/techo. Y con Sofi estamos poniendo música, y alcanzando los hilos que iban poniendo.

Una vez que terminaron de poner los hilos, se bajan de las escaleras. Los chicos se tenían que ir, se despidieron y se fueron. El profesor nos mira.

- Bien, ya está, ¿Quién quiere empezar a colgar las llaves? -Sonríe. Las chicas se miran entre si.

- Yo le tengo miedo a las alturas -Dice una.
- Y nosotras estamos terminando de atar estas llaves, faltan bastantes todavía... -Dice otra. Posta, les tengo que preguntar sus nombres, odio no saber los nombres de la gente.

- Pau las cuelga, yo le tengo la escalera -Dijo Sofi mientras caminaba hacia la escalera. ¿Qué dijo esta wacha?

- ¿Eh?

- Listo, genial, yo les voy alcanzando las llaves.- Dijo el sensual profesor, mientras agarraba un montón de llaves.

- Ok, ya que insisten. -Digo sarcasticamente subiéndome a la escalera que Sofi estaba sosteniendo para que no me caiga y me rompa la cabeza. Jeff me pasa la primer llave todo sonriente, le sonrío un poco y me pongo a atar la llave al hilo.
Después de estar más de media hora colgando llaves, cagandonos de risa y demás, Jeff me pasa una, y justo cuando me estiro para atarla, mi buena amiga Sofía no tuvo la mejor idea de agacharse a atarse los cordones, haciendo que la escalera se mueva un poco y mi equilibrio se vaya a la mierda, sintiendo como me caía de espaldas haciendo que las chicas griten desesperadas pensando que estaba por morir. Y realmente me hubiera hecho bosta de no ser porque el profesor tuvo unos reflejos de la puta madre, al soltar las llaves y agarrarme antes de que mi cabeza impacte el piso. Y de paso se hizo el boludo y me está agarrando del culo.

- Dios, Paula, ¿Estás bien? ¿Te golpeaste algo? -Me dice todo preocupado, papu.

- No... Si, yo... es-estoy bien. Me asusté, nada más... gracias.-Trato de respirar bien de nuevo.

- ¡Ay boluda, perdoname!, como la escalera estaba firme ni pensé en que te ibas a caer, ay, mirá si te pasaba algo, perdón Pau, perdoname, fue sin querer-Me habla Sofi, más rápido que de costumbre.

- Tranquila, estoy bien... estoy bien. Profe, ¿Me puede... bajar ya? -Le digo un poco nerviosa, creo que no se dió cuenta de que todavía me tenía en brazos, porque se puso un poco colorado. Cosita, lo parto todo.

- Ah, si, perdón...-Me baja y se aclara la garganta- ¿Segura que estás bien? -Asiento- Bien, bueno, por hoy lo dejamos así, quedan diez llaves para colgar nomás, que ahora las cuelgo yo... vayan agarrando sus cosas y nos vemos la clase que viene, ¿Si? -Nos sonríe a todos.

Todos nos despedimos y así me fui a mi casa, cada vez más confundida.