-Los invité a quedarse aquí por unos días-sonrió mi madre.
-Claro…si no les molesta-sonrió Tom.
-Por supuesto que no-sonrió Louis-son bienvenidos todo el tiempo.
-Hijo, Zayn dormirá contigo, ¿de acuerdo?-preguntó mi madre mientras se cercioraba de que estuviéramos de acuerdo.
Louis asintió con su cabeza, y mi madre siguió hablando de aquello que hablaba con ellos. La verdad no lo sabía, seguro ella tampoco lo sabía, simplemente asentía y reía de vez en cuando.
-Estaré arriba-dije indicando con mi pulgar hacia un lado, indicando las escaleras.
-Hija…tu maquillaje está corrido. ¿Sucedió algo?-preguntó.
-Oh…me cayó agua de la piscina-mentí mientras removía el exceso de maquillaje de mis ojos. Corrí escaleras arriba planeando qué haría con mi vida.
¿Qué haría ahora? ¿Cómo soportaría tener a Zayn tan cerca todos los días? O al menos, hasta que su apartamento les sea entregado.
-¡_______!-Exclamó Louis desde su habitación.
-¿Qué sucede?-dije llegando directo hasta su habitación, en lugar de la mía, como lo había planeado.
-¿Nerviosa?-rió.
-No es gracioso.
-Claro que no es gracioso. No sé como mamá permitió que el chico que te alborota las hormonas se alojara en nuestra casa-se burló.
-¡Louis!
-¡_______!-se burló de nuevo.
-No es gracioso-me crucé de brazos.
-Sí lo es, debiste ver tu cara cuándo “Se quedarán aquí”-imitó el tono de voz de mamá. Removió su camisa, y se dirigió hacia uno de sus cajones en busca de otra.
-No me alborota las hormonas-me ruboricé.
-Te alborota todo. El corazón, los nervios, todo-dijo colocándose la camisa.
-Exacto-asentí mientras me recargaba sobre el marco de su puerta.
-No quiero que tengan relaciones en mi cuarto.
-¡Louis!-le arrojé lo primero que tuve a la vista.
-¡Auch!-se quejó-¡No tenías que arrojarme ese zapato!
-¡No tenías que decir eso!-me crucé de brazos de nuevo.
-De acuerdo-rió-sólo no lo hagan.
-Louis.
-Está bien-rió-no lo permitiría, eres mi hermanita-dijo acercándose para alborotar mi cabello.
-Odio que hagas eso-sacudí mi cabeza para acomodarme el cabello de nuevo.
-Amas que lo haga-guiñó un ojo.
-Debo ir a dormir.
-¿No saludarás a Zayn?-rió.
-No.
-Lo saludaré de tu parte, descansa-besó mi frente.
-Descansa-sonreí mientras daba media vuelta, y caminaba hacia la puerta que me llevaría hacia mi habitación.
Una vez allí, caminé hacia el baño, y me di una bien merecida ducha. Removí toda aquella prueba de que por mis ojos habían recorrido un par de lágrimas, y me cambié ropa.
Me miré al espejo por unos segundos. Miré mi mejilla, la cuál había sido recorrida por la mano de Zayn. Miré mi mano, la cual había arrebatado la mano de Zayn de mi mejilla. Y me miré a mi, la cual se había enamorado perdidamente de alguien que seguro no era para mí.
Miré hacia mi recomfortable cama, y sin dudarlo me tiré sobre ella. Tomé mis cuatro osos de peluche, los cuáles habían sido obsequios de cumpleaños. Cada uno estaba caracterizado con cada uno de mis mejores amigos.
Sí, poseía osos de peluches caracterizados con mis mejores amigos. ¿Qué tan raro es eso?
Los abracé con fuerza, y cerré mis ojos esperando a que todo se convirtiera en un mal recuerdo.
Tardé en conciliar el sueño. Tenía muchas cosas en las cuáles pensar. Pensaba en aquel moreno de ojos marrones y en sus habilidades para decepcionar y a la vez enamorar. Pensaba en cada cosa.
Poco a poco logré que mis párpados comenzaran a sentirse pesados. Estaba a punto de caer en un sueño más grande que el de la bella durmiente.
-Perdón-escuché como alguien susurraba en mi oído, y plasmaba sus labios contra mi mejilla suavemente. Escuché como unos pasos irrumpían aquel momento.
-Te dije que no entraras acá, viejo. Mi madre me matará-susurró Louis.
Segundos después todo se convirtió en silencio, y como toda niña pequeña, quedé dormida en un profundo sueño, pero esta vez, con una gran sonrisa en mi rostro.
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Almost Paradise (Zayn Malik y tu) TERMINADA
RomanceLos días pasarán, y cada vez más te dirán. Lo que fui, y lo que pude ser. Lo que soy ahora, y lo que pude ser. Lo que quizás a futuro sea, y qué no puede ser. Contarán a mis espaldas sólo lo malo. De lo bueno jamás te enterarás. Los días pasarán, y...