Capítulo Veinticuatro - Benjamín Bennett (✔)

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Ella me miró, con sus ojos hechos un mar de lágrimas y solamente afirmó con su cabeza tratando de calmarse.

—No me ames. —Pidió.

—No me pidas eso.

—Hazlo por mí.

—Hazlo TÚ por mí. —Dije haciendo énfasis.

La miré detenidamente y mi corazón se rompió al ver sus lágrimas caer, sus ojeras eran demasiado notables.

—Oh mi hermosa, ven acá... —Dije abrazándola. —No debes de llorar, cariño.

Con mis manos tomé su rostro hasta que quedaron nuestras frentes juntas.

—Yo te prometo que no te volveré... —Me interrumpió.

—Axel... —No la dejé seguir.

—No digas nada. —La interrumpí. —Es algo que en verdad voy a cumplir.

—No me vas a volver a tocar porque yo ya tengo novio y es Benjamín. —Me alejé y le lancé una mirada llena de dolor.

— ¡No sabes lo idiota que es! No lo recuerdas porque tu mente sufrió un colapso ¡Pero es un idiota, Débora, es un idiota entiende! —Dije casi gritando, tratando que recordara lo que pasó.

—No me importa, lo voy a conocer. —La miré directo a los ojos y ella hizo lo mismo, pero algo había cambiado, esta vez solo demostraba coraje y tristeza.

—De acuerdo. —Concluí después de unos cuantos minutos. —Entonces me voy.

Ella se cruzó de brazos, se encogió de hombros, limpió sus lágrimas y solo me sonrió.

—Suerte. —Dijo ella sin más. Me subí al auto y partí de ese lugar, no quería saber nada de la vida. Lo más probable, era que cuando llegara a casa, Missy estuviera esperándome para tener sexo. Ya que ella siempre estaba dispuesta.

Relajé mi mente con la idea de que al menos esa era la única forma en la que podría relajarme. Me acomodé en el asiento y me tranquilicé para que mis músculos no estuvieran tensionados, puse algo de música en el estéreo y en el camino, canté a todo pulmón hasta olvidar todo.

Se dieron las cinco y media de la mañana, llegué a casa y desperté a Missy, quien dormía plácidamente en mi cama —La que un día compartía con Deb—.

—Missy... —Dije moviéndola. —Missy despierta. —Mi voz no sonaba dulce, ni mucho menos tratando de parecer cariñosa. Solo quería que ella despertara para que complaciera mis desdichas, mi necesidad de tener sexo, mi necesidad de descargar mi frustración.

— ¿Qué sucede? —Preguntó medio dormida, frotó sus ojos y me miró. — ¡Axel! ¿Qué haces desnudo? —Preguntó sorprendida.


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El resto de la noche no lo utilice para dormir, en cambio lo utilice para llorar. Lloré hasta el cansancio, supuse que esa era mi única salida. Miraba el álbum las cartas que había encontrado de Axel y, conseguí torturarme un poco más.

¿Qué más daba? Igual ya era el último adiós, el último beso y abrazo que le iba a dar a ese chico que tanto me lastimaba. A la mañana siguiente, me encargué de corregir las terribles ojeras que cada vez eran más notorias en mi rostro. Trate de usar la ropa más decente que tenía, al fin y al cabo, sólo era una cita. Benjamín me llevó a uno de los parques de la ciudad, y rápidamente recordé que ese lugar yo lo había visitado anteriormente ¿Con quién? No lo lograba recordar.

Fantasma De Amor© (Terminado)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora