Capítulo V

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(Parte 2)

Anmi le miraba detenidamente con la mandíbula tensa y sus manos hechas en puños, estaba cansada de estar peleando y en realidad solo quería parar con todo eso y encarar al chico sonriente de las estúpidas ideas.

—Por tu culpa ellas están escondidas, porque ellos se enteraron que los estaban buscando, por sus ideas locas.

—Es mejor que se vayan —dijo Adrett empujando de nuevo a Dick hacia la puerta.

Dick los miró molesto, pero no podía hacer nada se encontraba rodeado de todos. Así que decidió enfrentarlos no importando lo que creyeran de él y de su grupo, sin importar si tenían la razón o no.

—¡No! No me iré, si dicen que fue por nuestra culpa, entonces ¿por qué los ayudé?

—Porque solo nos usaste, para llegar más rápido a ellas —dijo Arlhene—. Es mejor que te vayas.

Brentt encontró todas las piezas del rompecabezas, y casi todas encajaban muy bien así que estaba seguro de todo lo que pensaba. Tal vez fue muy loco sospechar de las personas que sí conocía.

—Por eso nos vigilaban, porque éramos su plan B. Porque con nuestra ayuda les sería más fácil llegar a su objetivo y eso de la pelea con tus amigos solo fue una farsa —Hizo una breve pausa para ordenar sus ideas—. Eran como el tipo malo y el bueno que intenta ayudar, pero en realidad solo es un medio para un fin, y ese fin no nos incluye. ¿No es así?

—Están equivocados.

—Eso no es cierto —dijo Arlhene ya cansada de la voz de Dick—. Ahora, largo.

—No me voy a ir.

Dick estaba en tono desafiante los había ayudado y no se iría solo porque habían encontrado pruebas contra él.

—Ya los escuchaste, es mejor que te vayas antes de que llame a seguridad —dijo un hombre con aspecto medio raro, que de confiable no tenía nada, que estaba entrando por la puerta trasera.

Dick lo miró sorprendido como si lo conociera de alguna parte, y luego dirigió su mirada a los demás con cara de decepcionado por la falta de confianza, por la gran traición. Comenzó a caminar hacia todas partes desesperadamente sin saber realmente qué hacer.

—Bien, pero... no logro entender por qué le creyeron a él. —Sin dudar señaló al hombre y negó con la cabeza.

—Porque yo soy de los buenos.

Dick sin pensarlo se acercó rápidamente hacia aquel hombre. Vio la expresión burlona que tenía y le hizo enfurecer más de lo que ya estaba.

—Eres un idiota —dijo molesto viéndolo a los ojos y en ese momento le dio un puñetazo en la cara.

Dick le daría otro golpe pero Adrett, Nick y Brentt lo agarraron. El hombre limpiándose la sangre se levantó y abrió otra puerta con rejas y metió a Dick allí.

—¿Cuántos son? —preguntó señalando a Dick.

—No saben lo que hacen, es una equivocación —gritó Dick interrumpiendo la respuesta de Anmi que le miró enfurecida.

—Solo él —Esta vez se escuchó la voz de Brentt

Sus demás compañeros lo vieron sorprendidos por la respuesta, pero no dijeron nada para contradecirlo.

—Está bien, no hay de qué preocuparse, ellas están muy bien y cuando sea el momento indicado les dejare para que pasen a verlas.

Salió el hombre de la habitación y todos se sentaron callados, Arlhene dio una leve sonrisa a todos pero se le borró al instante al ver la cara de Dick.

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