...
Mi cabeza daba mil vueltas, repetía una y otra vez ese momento, el sonido del disparo, la sangre, pensé que matar a alguien se sentiría genial, pero no es así, me siento culpable, el peor ser del mundo, sé que ha habido personas que han hecho cosas peores, pero yo sólo tengo 17 años, estos no son los problemas que tienen las adolescentes a esta edad.
Oliver prometió no decir nada, pero aún así siento miedo, miedo a que todos lo sepan y pase el esto de mi vida detrás de las rejas, estaba sentada en mi cama, Oliver estaba en la suya, seguramente mirándome, pasaba mis manos por mi cara y cabello cada cinco segundos, sentía el frió del invierno aunque no estuviera la ventana abierta o tal vez eran los escalofríos que recorrían mi cuerpo cada vez que la imagen de Emilia aparecía en mi mente.
-Annalia.- me llama Oliver.- Ya es hora de dormir.- lo miré desorientada, ¿hora de dormir? miré la ventana, efectivamente, ya era de noche, pasé todo el día recordando los sucesos de la mañana.
-Está bien.- me levanté para ir al almario y buscar ropa para dormir y mi toalla, sentía la mirada de Oliver sobre mi, eso me incomodaba.- Deja de mirarme...- susurré.
-Yo... lo siento, no quería incomodarte.- manejó el mismo tono que yo. Asentí y entré al baño para cambiarme.
Me miré en el espejo, mi rostro se veía extraño y no era el extraño que yo considero normal, mis ojos a pesar de estar muy abiertos se notaban cansados y temerosos, mojé mi cara con agua del grifo, cepillé mis dientes,me duché y volví a vestir con la ropa que traje y salí de ese pequeño espacio.
Oliver estaba frente al armario bajando sus pantalones y quedando en boxers, tomó su toalla y volteó hacia la puerta del baño desde donde yo lo miraba.
-Oh, no te escuché salir.- sonrió.- espero que no hayas acabado con el agua caliente o estaré tiritando de frió por un rato.- reí.
-Claro que no, aún hay.- sonrió satisfecho por mi respuesta, se acercó a mi para besar mi mejilla y luego rodearme y entrar al baño.
-No le pondré seguro a la puerta por si me necesitas.- subió y bajó las cejas.
-Eres un idiota.- dicho esto me acerqué a la puerta y la cerré antes de que dijera otro de sus comentarios.
Fuí a mi cama y retiré el edredón para meterme debajo de él, en serio hacía frío. Estuve unos minutos mirando el techo tratando de pensar en otras cosas.
-¡Ay, Dios!- gritó mi novio desde dentro del cuarto de baño.
-¿Oliver? ¿está bien?- le pregunto más como un grito.Me senté en la cama cubriéndome con el edredón.
Escuché el sonido de la regadera cerrándose y segundos después abrió la puerta.
-¡Ahg! ¡La odio!- gritó desesperado pasándose la mano por el cabello mojado, después pasó las manos por sus brazos y los frotó.
-¿a quién? ¿de quién hablas?
-De mi mamá, ella sabe que me ducho a esta hora y cierra la llave del agua caliente.- rueda los ojos.- casi se me congelan mis partes.- río.- No te rías, no es gracioso.- caminó hasta el armario y tomó un pantalón de pijama de cuadros y una camiseta negra, él suele dormir en boxers, pero creo que hoy no podrá.- ¿Vas a seguir mirándome? porque necesito vestirme, me va a dar hipotermia.
-Exagerado.- dije cubriéndome la cabeza con el edredón aún estando sentada.
-Claro, como no fuiste tú la que se bañó con agua fría en pleno invierno.- su voz se escuchaba distante a causa del edredón.
-¿terminaste, señor hipotermia?
-Si, ya y no me llames así.- me descubrí, él ponía la toalla a un lado y corría hasta su cama y se arropaba.
-¿Por qué estoy siento que salgo con un niño pequeño?- cometo.
-Porque a veces me comporto como uno, acostúmbrate.- dijo sacando la cabeza.
-Como digas, apaga las luces, idiota.- la lampara está mas cerca de él.
-Ay, no, ni creas, hazlo tú.- ruedo los ojos.
-¿dónde está tu caballerosidad?
-Se fue por el desagüe junto con el agua fría.- lo fulminé.- Está bien, lo haré, pero deja de mirarme así.- sonreí cuando se levantó corriendo y apagó las luces y lo escuché volver a la cama -Al fin, calor.- reí.- hasta mañana, Annie, te quiero, te daría un beso, pero ya conoces la situación.
-Hasta mañana, Oliver.
Cerré los ojos para intentar dormir. Pero esa imagen apareció otra vez "Te van a descubrir" "iras a la cárcel" "asesina, asesina, asesina..." decía una voz dentro de mi cabeza y así pasaron varios minutos, me era imposible conciliar el sueño.
-Oliver...- lo llamé. No respondió.- Oliver.
-Mmm...
-Oh,lo siento, creí que aún estabas despierto.
-Oh, claro que no, sólo estaba imaginando que comía un helado de chocolate... con los ojos cerrados. Está bien, si estaba dormido.- bosteza.- ¿qué pasa?
-No puedo dormir, ¿puedo...
-Claro, ven.- vaya, este chico lee mentes. salgo de mi cama y voy a la suya, abre un espacio para mí.
Me meto bajo el edredón junto a él, me abraza y besa mi frente.
-Que duermas bien.
-Tú igual, Oliver.- cierro los ojos y al fin puedo descansar.
...
Todos hablaban de la muerte misteriosa de Emilia, escuché a varias personas decir, "ella era una chica muy dulce ¿quién le haría algo así?"no eran tan dulce como piensan ¡le cortó el pene al chico que le gustaba! "ella no se merecía eso" Pff, claro que si, mató a Ethan, aunque ahora que lo pienso tal vez yo también merezca eso en estos momentos, después de todo fui yo quien la mató.
-Es raro lo de Emilia ¿no crees?.- me pregunta Tristan caminando junto a mi por el pasillo. Oliver seguía durmiendo, se negó a levantarse cuando yo lo hice.
-Si, claro muy raro.- dije sin ganas.
-Digo, ya van dos asesinatos súper misteriosos.- ni tan misteriosos.- Aún no se sabe quién mató a Ethan y ya hay otra persona muerta.
-Yo sé quien mató a Ethan.- solté sin pensar, él me miró con los ojos abiertos como platos.
-¿quién fue? Dime.- se detuvo y se puso frente a mi, mirándome a los ojos.
-Fue Emilia.- susurré muy bajo, pero sabía que él había escuchado.
-¡¿qué?!- tapé su boca con mi mano.
-Shh, haz silencio.
-¿Emilia?- preguntó cuando le quité la mano.
-Si, ella estaba enamorada de Ethan, pero a él le gustaba Dan, Emilia no lo soportó.
-Annalia, esto es una bomba, tenemos que decirle a la directora Perkins.- me jaló de la mamo.
-No Tristan, no podemos hacer eso.- me detengo.
-¿por qué? resolveríamos el caso.- dijo con un poco inquietud.
-Porque yo maté a Emilia.
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ANNALIA
Teen FictionLo que hice no está bien, nunca algo en mi vida ha estado bien. aún recuerdo sus caricias, sus palabras, la forma en cómo me hacía sentir.. amada. Todo fue lindo mientras duró, un momento más en mi sombría existencia llena de dolor y angustia, un si...