ANNALIA

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Creo que mi boca cayó al suelo.

¿Cómo es que pasó...? Bueno, sé cómo pasó, todas saben el "proceso de creación" de los bebés. Lo que no entiendo es por qué, en el internado ni siquiera trataban aunque... los dos salieron casi al mismo tiempo, pudieron haberse encontrado, conocerse, enamorarse y hacer... eso. ¿Y si están casados? no todas las parejas se casan luego de tener hijos ¿qué tal que vayan a casarse y quieren que sea la madrina? Eso sería incomodo si pensamos en el hecho de que Dan era.. es mi amiga y Oliver fue mi novio. Si en definitivo muy incomodo. Sería como en la película de Yo Antes De Ti cuando Alicia y Rupert se casan, vamos, son la ex y el mejor amigo de Will, aunque él estaba muy entretenido con Lou y eso quitaba cierta incomodidad, yo no tengo un "Lou". Podría decirle a Kyler que vaya conmigo...

-Hey ¿estás ahí?- la voz de Dan me saca de mis absurdos pensamientos.

-Si, si, sólo...-imagino una escena muy rara.- pienso.- digo finalmente.

Seguía perdida. Mi mente no dejaba de reproducir las palabras de Dan.

Sentía la intensa mirada de Oliver sobre mí.

-Yo... iré a preparar bocadillos.- dijo Dan.

Nos pidió que nos pusiéramos cómodos.

No, no te vayas, no me dejes a solas con él.

Caminó deprisa a la cocina evitando mi mirada suplicante.

Estaba sentada en un sillón mirando hacia todos los lados y evitando la mirada penetrante de Oliver.Este se fue por un momento y cuando volvió me ofreció un vaso de zumo de naranja.

- Gracias.- musité.- tomando el vaso con cautela.

- De nada.- sonrió de lado.

Unos murmullos se escucharon en la planta superior y después unos pasos apresurados bajando las escaleras. Puse el vaso en la pequeña mesa a mi lado.

- ¡Papá! - la voz de los niños se escucharon por toda la casa. Corrieron velozmente hasta Oliver y lo abrazaron por las piernas.

- Hola mis niños ¿Como están? - se puso en cuclillas y besó sus mejillas.

- Bien papi- respondió Asher de inmediato.

- Saben, no es correcto que bajen las escaleras corriendo, ya se los hemos dicho,se pueden caer y lastimar y estoy más que seguro que no querrán ir al hospital.- movieron sus pequeñas cabezas con terror.

Estos niños son adorable.

Y te gustaría que fueran tuyos y de Oliver.

Estúpida conciencia.

- Lo sentimos, papi, no lo volvemos a hacer.- dijo Vivian con un pequeño puchero.

- Eso espero.- sonrió.- ¿por qué aun no están dormidos?

- Porque estábamos esperando a que vinieras a vernos, ya casi no te vemos, papi.- el tono de Asher era triste.

- Lo siento mi angelitos, tengo mucho trabajo. Pero mañana tengo el día libre ¿les gustaría que fuéramos por un helado?

- ¡Si! - chillaron con euforia y no pude evitar soltar una pequeña risíta. Oliver como padre era algo lindo de ver.

- Lo siento.- dije sin poder evitar sonreír.

- Creíamos que ya te habías ido Abby.- la voz de Vivian era tan dulce.

- Decidí hablar un rato con su madre.

- ¿Se conocen?- Oliver miraba a sus hijos y luego a mí.

- Oh si papi. Es la señorita bonita de la que te hablamos. La de la cafetería.