in love with someone else ; harry styles ✔✔

a solas.

Puede parecer loco —más para mí que para ellos— pero me la he pasado de maravilla, todos ellos son realmente simpáticos y Harry no es la excepción.

Me retracto completamente de creer que Harry era un estúpido, arrogante y superficial porque definitivamente no lo es.

—Me la he pasado de maravilla, pero ya estoy algo cansada y me gustaría llamar a mi familia –digo mientras abandonamos la cafetería y todos voltean a verme.

—No puedes irte ahora –Eleanor me mira algo apenada—. No quiero volver a ser la única chica en este grupo.

—Lo siento, Eleanor –me río frente a su cara de perrito—. Cualquier otro día podríamos salir juntas.

—No tienes que excluirnos a Louis y mí porque te incomode gustarle a Zayn –habla Harry y me sonrojo mientras Zayn le da un empujón.

—Silencio –Zayn comienza a darle de puñetazos en los brazos a  Harry mientras este ríe.

—No es por eso, solo que ya estoy cansada –me vuelvo a excusar.

—Está bien, déjala ir –Zayn le habla a Eleanor y esta asiente—. Te compraré un helado por ser buena chica.

—Con mi novia no, Malik –Louis le da un empujón para devolverlo junto a Harry y vuelven a reírse mientras hablan de cosas que no escucho.

—Espero poder verte otra vez –Eleanor me abraza.

—Por supuesto –le devuelvo el abrazo y luego nos alejamos para que me despida del resto, partiendo por Louis, luego Harry quien me mira divertido y finalmente Zayn desatando las burlas y ruidos de Louis y Harry insinuando cosas sobre Zayn y yo.

—No les hagas caso, ellos son siempre así de tontos –comenta Zayn luego de besarme en la mejilla.

—No pasa nada –le doy una pequeña sonrisa—. Muy bien, que tenga buena tarde –me alejo de ellos y me voy del lado contrario al que ellos para volver al apartamento de Gemma.

Me siento genial, no dejo de sonreír al recordar las ocurrencias de Louis, las caras de Zayn, los malos chistes de Harry y la cara de decepción de Eleanor frente a todo lo que sus amigos y novio decían, sin duda fue un día increíble.

De haber sido más inteligente, me hubiese quedado con ellos, pero simplemente quiero tener mi espacio personal.

Al llegar al apartamento de Gemma, decido ordenar un poco, no es que esté desastrosamente sucio o desorganizado, solo se trata de algunos vasos y platos sucios.

En cuanto termino de lavar, secar y guardar los trastes voy directo hasta la habitación y me dejo caer en la cama para marcar al teléfono de mi mamá.

—¿Alice? –contesta rápidamente.

—Hola, mamá –respondo alegremente.

—Cariño, ya estaba empezando a preocuparme –puedo deducir por el tono de su voz que está al borde del llanto—. ¿Por qué no llamaste antes?

—Porque estuve ocupada, pero tranquila. Estoy bien.

—¿Ya viste a Miranda?

—Sí –suelto un suspiro—. Ella sigue siendo la misma chica de la que me despedí –hago una mueca y miro el techo.

—¿Que hay de su prometido? –suena preocupada esta vez.

—Él es un buen chico, ya estoy lamentando que vaya a casarse con una chica como ella –admito y en mi cabeza comienzo a pensar en lo diferentes que son Miranda y Harry, en lo mucho que él sonríe cuando ella está cerca y en lo fría que llega a ser Miranda con él a veces—. Él y sus amigos me agradan.

—¿Alguién lindo? –mi madre se emociona, como cada vez que menciono que he conocido a algún chico nuevo.

Recuerdo que cuando conocí a Noah, saltaba por todos lados, planeando mi boda prácticamente. Se decepcionó bastante al saber que él es sólo un amigo.

—¿Eso importa? –me río un momento.

—Tienes que tener buena vista, Alice –bromea ella y me sonrojo al pensar en que efectivamente tuve una buena vista hoy.

Pestañas largas, ojos color miel, linda sonrisa y muy simpático.

—Todos son lindos en Londres –me río.

—No es cierto, yo he conocido gente no muy linda que vive en Londres –ella y sus comentarios siempre me han hecho reír al igual que ahora.

—Te echo de menos, mamá.

—Nosotros también te echamos de menos, Luke se la pasa preguntando por ti –sonrío instantáneamente al pensar en mi sobrinito pendiente de mí—. Tu hermano también.

—¿Cómo está Connor?

—No me lo vas a creer –responde fastidiada y me entra la curiosidad.

—¿Qué pasó? –me siento sobre la cama y me preparo para el golpe, pues cada vez que mi madre dice “no me lo vas a creer” algo malo le sigue.

—Connor volvió con Caroline.

—¡¿Qué?! –me sorprendo y luego me molesto en sobremanera—. ¡¿Por qué?!

—No tengo idea –suspira—. Tu hermano está perdido y no sé como ayudarle.

—Creo que tal vez deberíamos de darle la oportunidad de que él solo se de cuenta de que Caroline no es la chica para él –sugiero sin mucho entusiasmo.

¿Qué se puede hacer cuando alguien ya no quiere oír tus consejos? Simplemente dejarlos tomar sus propias decisiones.

—No lo sé, Alice –la voz de mi madre se apaga—. No quiero verlo sufrir otra vez.

—La vez anterior no sabíamos que sucedería, esta vez él es consciente y si sale mal, será únicamente su responsabilidad –digo sin detenerme a recordar aquellas oscuras noches—. Solo déjalo.

—Okay, lo haré –suspira una vez más y suelto un sonoro bostezo—. Deberías descansar un poco.

—Tienes razón –cierro mis ojos cansados—. ¿Te llamo mañana?

—Llámame cuando quieras y tengas tiempo.

—Siempre tengo tiempo para ti, mamá –me río.

—Si conoces a alguien en Londres, no lo tendrás –se emociona una vez más.

—No pierdes la esperanza ¿eh?

—Jamás –se ríe—. Muy bien, bebé. Descansa.

—Tú también, te quiero.

—También te quiero –cuelgo el teléfono.

Afuera sigue lloviendo y los relámpagos han cesado para mi suerte.

Me quito la ropa y me pongo el pijama para luego dedicarme a escuchar como la lluvia golpea la ventana y recuerdo una vez más a Zayn y a Harry.

Es bastante loco que Harry piense que luego de un primer encuentro yo pueda gustarle a alguien como Zayn, de seguro él tiene muchas chicas a sus pies. ¿Por qué iba a gustar de mí?

Que locura.