corazón como el tuyo.

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Al quitar la tapa me encuentro con la cinta de Stevie Wonder del primer día, con un collar rojo que carga un cascabel y una placa dónde está el nombre de Stevie, un CD con el soundtrack de la película If I Stay, otra cinta y un conjunto de hojas atadas con una cinta también acompañada de una casetera.

Desato la cinta de aquella cinta de papel y me encuentro con listado de indicaciones.

1. Pon la cinta sin rotular en la casetera.

Su caligrafía hace que mariposas llenen mi barriga y me tiemblan las manos antes de ponerla a reproducir.

Nada pasa y devuelvo la vista al papel para leer la segunda indicación.

2. Presta atención a lo que estás a segundos de escuchar y si quieres algún tipo de respaldo, tienes todo detrás de este listado.

Aparto el listado y me encuentro con una carta escrita por su puño y letra quitándome el aliento.

—No sé que día es hoy y no me interesa en lo absoluto, porque me siento perdido sin ti –la grabación comienza a sonar en cuanto comienzo a leer—. Amada Alice, en este momento estás en Manchester mientras yo me muero por abrazarte aunque sea una última vez, desde que te vi la primera vez supe que eras distinta y no miento cuanto lo digo –suelto un suspiro e intento contener las lágrimas—. Puede que tú no sepas cuando fue que te empezaste a fijar en mí, pero yo tengo claro el momento en el que perdí la cabeza por ti. ¿Recuerdas aquel día en el que te dejé en el apartamento de mi hermana? Ese fue el día en el que comencé a sentirme extraño, estabas ahí sentada junto a Miranda tratando de sentirte cómoda, pero como tú y yo bien sabemos ustedes son muy diferentes y en cuanto vi aquel azul de tus ojos simplemente supe que podría perderme en ellos por el resto de mi vida, pero al igual que tú estaba asustado, no quería y no quiero dañar a Miranda, pero lo que siento por ti supera todo límite antes conocido por mí –sin previo aviso las lágrimas caen por mis mejillas—. Recuerdo también la molestia en tus ojos cuando entré sin golpear y te vi semidesnuda –escuchar su risa me parte el corazón—. Pero luego de eso, simplemente no pude dejar de sonreír. No me malinterpretes, no soy un pervertido –esta vez soy yo quien ríe—. Pero simplemente la expresión en tu rostro era adorable. Luego de eso todo se salió de control, recuerdo aquel día en el que nos encontramos en la librería, nunca en la vida me sentí más nervioso, te vi entrar y perdí el aliento, estaba tan linda que incluso mis mejillas se tornaron de color rojo, nunca antes me sentí así. Te vi recorrer la librería y no sabía que pretexto inventar para acercarme a ti, por lo que fui detrás de ti hasta dónde estaban todos aquellos vinilos. En cuanto tu mano y la mía hicieron contacto, solo quise volver a tomarla y nunca más soltarme de ella, pero tú las ocultaste en los bolsillos de aquel abrigo que ni a la misma afrodita se le hubiese visto tan bien como lucía en ti.

Luego de eso, cada uno de mis momentos fue mágico a tu lado y simplemente me aterró el hecho de estar tan loco por ti, por eso decidí meter ideas en la cabeza de Louis pues en cuanto Zayn te vio, algo en sus ojos cambio y para mí la lealtad hace mis amigos es algo irrompible, por lo que creí que acercándote a Zayn lograría sacarte de mi mente, pero eso no sucedió, solo hizo que me sintiera el peor imbécil en el mundo, luego de eso vine la cena y tengo que admitir que fue la mejor noche de mi vida, nunca logré hacer nada parecido con Miranda porque simplemente no estábamos en la misma sintonía y contigo siempre fue diferente.

Aquella noche por fin pude tomar tu mano otra vez, las luces de la ciudad hacían de tu rostro una verdadera obra de arte y puedo apostar a que te diste cuenta de que estaba literalmente babeando por ti, recuerdo que al momento de en que la lluvia se dejó caer sobre nosotros solo quería besarte y tener mi ansiado beso bajo la lluvia, pero eso no era lo correcto.

in love with someone else ; harry styles ✔✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora