presentes.

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Me sigue costando trabajo mantener mis pensamientos lejos de Harry y más si él persiste con sus mensajes declarando su amor hacia mí.

Luego de aquellos mensajes que intercambiamos simplemente volví a concentrarme en mi computadora.

Planificación de la gira a Suecia.

Definitivamente no me emociona viajar por tercera vez a Estocolmo a diferencia de Noah quién estaría encantado de volver a experimentar aquellas noches de excesos y descontrol.

—¡Clark! –escucho la voz de mi jefe desde la puerta de su oficina y rápidamente me levanto de mi escritorio, le doy un vistazo a Noah confundida antes de irme.

¿Por qué Raynolds querría hablar conmigo?

Al entrar, rápidamente cierro la puerta detrás de mí y me siento frente a su escritorio esperando que levante la vista de los documentos que tiene en sus manos.

—¿Cómo está, señorita Clark? –finalmente baja los papeles y entrelaza sus manos sobre el escritorio para mirarme con detención.

—Algo...confundida –admito apretando mis puños sobre mis muslos—. ¿Por qué me llamó, señor?

—Le tengo una propuesta –me sorprendo y él lo sabe—. Sé que no se lo digo muy a menudo, pero usted es de las trabajadoras más eficientes que hay. Debido a eso, es una de los guías turísticos más pedido.

—Siempre creí que era solo porque a los demás no les quedaba tiempo –trato de no volverme loca.

—No, todo es solo mérito suyo –dice está vez apoyándose contra el respaldo de su gran silla giratoria y me mira con atención—. Voy a darle la dirección de una de mis nuevas oficinas.

—¿A mí? –mi voz sale como un chillido y él asiente—. ¿Po-por qué?

—Porque es organizada, eficiente y tiene lo que se necesita para ser exitoso en esto, usted ama lo que hacer y eso se ve en cada uno de los tours que realiza –Raynolds nunca había elogiado tanto mi trabajo—. ¿Le gustaría tomar el empleo?

—Seguro que sí –respondo sin pensar en nada.

—Hay algo más –ordena los documentos frente a él antes de dármelos—. No es en el Reino Unido.

—¿No? –esta vez mi corazón comienza a precipitarse.

—No, es en París.

—¡Oh, por Dios! –me cubro la boca con las manos.

—Veo que le emociona –por primera vez lo veo esbozar una sonrisa.

—Sí, mucho –admito y mis piernas tiemblan, quiero bailar y saltar de un lado a otro.

—Pues me alegro –me tiende un bolígrafo—. Entonces creo que está en condiciones de firmar.

—¿Este es el contrato? –miro con atención los documentos frente a mí y él hace un sonido en asentimiento.

—Puede leerlo con total libertad, nadie le apura –dice con voz tranquila—. Puedo dejarla sola si gusta. ¿Quiere un café?

—Claro –digo sin prestarle mucha atención.

—¿Capuccino?

Expresso macchiatto estará bien –digo sin pensarlo y siento una punzada en el corazón al recordar la sonrisa de satisfacción de Harry cuando supo que me gustaría aquel café.

Raynolds abandona la oficina y comienzo a pensar en Harry una vez más, también pienso en las oportunidades que esto traerá para mí. Puedo comenzar de nuevo, lejos de Miranda, lejos de Zayn y lejos de Harry.

in love with someone else ; harry styles ✔✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora