No he dejado de pensar en lo que pasó en la casa de los Bartholy. ¿Me lo habré imaginado? No lo sé, tal vez me esté volviendo loca. Creo que repito eso muy seguido. Hoy ya es miércoles y necesito apurarme si quiero llegar a tiempo a clases. Hice mi rutina habitual mañanera, me subí en mi moto y me fui. Al llegar al instituto me encuentré de cara con Sarah.
-¡Sarah! Justo a quien quería ver.- dije con alegría.
-¿Ah si? Y ¿por qué?- dijo frunciendo el ceño pero aún así sonriendo.
-Necesitaba una segunda opinión con algo. Vayamos a un lugar en el que no nos escuchen, va a ser mejor.- dije mirando a los lados.
-Emm... no sé si sea bueno o malo lo que me quieras contar... pero está bien.- dijo desconfiada. Tomamos rumbo hacia la biblioteca.
-Seré directa.- dije una vez nos sentamos en una mesa alejada a las demás. -Ayer fui a la casa de los Bartholy y...-No pude continuar hablando porque Sarah me interrumpió.
-¡¿Qué hacías ahí?!-gritó haciéndome sobresaltar. Se escuchó el típico "Shh" de biblioteca y Sarah se ruborizó.
-Oye cálmate. Solo estábamos haciendo el trabajo del profesor Jones.- dije mirándola como si se hubiera vuelto loca. Creo que mi locura es contagiosa.
-Y... ¿todo bien?- dijo más calmada e incitándome a seguir.
-De hecho es eso lo que quería decirte.- dije rascándome el brazo un poco nerviosa.
-¿T-te hicieron algo o viste algo raro? Porque si fue así...
-No... no me hicieron nada.-la corté rápidamente.-¿Por qué lo harían? ¿Qué te sucede?
-Olvídalo.- dijo suspirando.- Cuéntame lo que ibas a decirme.
-Bueno.-dije aun confundida por su actitud. -Estaba esperando en la cocina a Drogo, que se fue a buscar materiales para el trabajo a su habitación. Entonces aparecieron su hermano Nicolae y su hermana Lorie. Fueron muy amables pero ese no fue el problema. El problema fue que cuando la niña se estaba yendo, pasó por al lado de un espejo y... no vi su reflejo en él.- no podía mirarla a los ojos. La primera amiga que hacía y ya me consideraría una completa loca. Bueno, algo de locura poseía. Sarah parecía incómoda. Se quedó un rato en silencio, mirando fijamente la mesa. Luego elevó la mirada hacia mí.
-Lo habrás imaginado.-fruncí el ceño. No me esperaba esa respuesta.
-No pero te juro que yo...- Me interrumpió.
-Vámonos a clase que llegamos tarde.-empezó a ponerse de pie mientras se colgaba la mochila en el hombro.
-Pero...-Hizo oídos sordos y se fue. ¿Qué le pasa? De todas las reacciones esa fue la menos esperada. Siempre que se trata sobre el tema Bartholy se pone rara. Me encojo de hombros y la sigo. Llegamos a clase. Esta vez no me senté con Drogo, fui directo con Peter porque siempre lo veo solo.-¿Puedo?- dije apuntando el asiento vacío a su lado.
-¿No te sientas con mi hermano?- dijo frunciendo el ceño.
-Hoy me quiero sentar aquí, claro, si estás de acuerdo.
-Claro, siéntate.- Me senté con Peter. No es muy hablador, intercambiamos una que otra palabra, pero es buena compañía. Sonó la campana finalizando la clase y todos salieron del aula. Tomé mis cosas, me despedí de Peter y me dirigí, una vez más, a la biblioteca para buscar de dónde provengo. Aún no me rendí con ese tema, y tampoco con el tema Bartholy...
-¿A dónde vas tan deprisa?- Me asusté. No sabía que Peter me estaba siguiendo.
-Em... a la biblioteca.
ESTÁS LEYENDO
¡My Secret! [Completo]
FantasíaSoy una chica un tanto peculiar... ¿guardarías mi secreto? Esta hermosa historia continua en "My No So Secret" ¡Disfruten!