A Prueba (13)

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¡Ahh! ¡Estoy súper emocionada por ir al trabajo con Hugo el día de hoy! Será genial, eso seguro. Estaba muy ansiosa porque hoy conocería el lugar en el que Hugo se la pasa todo el tiempo y porque además pienso que será divertido.

-¡Riley! ¡Ya hay que irnos!- gritó Hugo desde la planta baja.

-¡Voy!-Bajé las escaleras a toda velocidad. Tropecé con el último escalón pero no caí al piso, por suerte. Suelo ser un poco torpe.

-Wow, no bromeabas con lo de mini policía. ¿De dónde sacaste esa ropa?- dijo inspeccionándome de arriba a abajo con el ceño fruncido. Desvié la mirada.-¿Esa no es la ropa que ya no me quedaba y que tiré al basurero?- dijo mirando mejor.

-...Em... tal vez...- Murmuré. Hugo rió.

-Ya vámonos.- Caminamos hasta su coche, nos subimos y nos fuimos hacia su lugar de trabajo escuchando buena música. Por suerte coincidimos mucho en ese aspecto. Luego de un rato cantando canciones junto a Hugo, él estacionó su auto en la estación de policía.-Aquí es.

-¡Qué genial!-observé todo por la ventana con una gran sonrisa. Bajamos del auto y entramos. Hugo se fue a rellenar unos papeles mientras yo, por mi parte, empecé a explorar un poco.

-Oiga, señorita.- me tensé al escuchar una voz imponente y autoritaria. Genial, Riley. Recién llegas y ya te metes en problemas. Detuve mi paso.

-¿Sí?- dije dándome la vuelta lentamente para ver a un sujeto de cómo dos metros de alto, calvo y de tez oscura. Realmente intimidaba. Tragué grueso.

-¿Qué hace usted aquí?- Me dijo serio.

-Yo...

-Tranquilo jefe. Ella es Riley.- intervino Hugo. Por fin pude soltar el aire que retenía.

-Oh, está bien. Hola Riley, un gusto. Yo me llamo James.- Sonrió quitándole todo lo intimidante a su rostro. Le devuelvo la sonrisa, relajándome.-Bienvenida. Hugo nos dijo que nos acompañarías el día de hoy y que querías aprender a disparar, ¿es eso cierto?

-Sí, así es.- Asentí firme. Quería mostrarle seguridad, después de todo era el jefe.

-Bien, acompáñenme por aquí.- hubiera soltado un pequeño grito de emoción de no ser porque no era el lugar ni el momento adecuado para comportarme como una torpe adolescente. Entramos en una sala especial en el que ya habían varios policías practicando.-¿Alguna vez has utilizado un arma?

-Em... no, nunca.-respondí mientras me colocaba la protección. ¿Por qué una adolescente utilizaría un arma?

-Bien, tienes que hacer así...- James comenzó a explicarme como usar el arma, recargarla y apuntar.-¿Entendiste?

-Lo tengo.- dije apuntando con el arma a los blancos que habían allí.

-Recuerda, no es un juguete.- Asentí.- Estaré ayudando a los nuevos.-me dio una palmadita en el hombro  y se fue. Hugo aprovechó para acercarse.

-Riley, pórtate bien y si tienes alguna duda pregúntale a James. Yo estaré ocupado siendo evaluado.-asentí.

-De acuerdo, lo tengo todo bajo control.- Hugo, un poco dudoso, me dejó y se fue a hacer su evaluación. Bien Riley, concéntrate. Recargué el arma, apunté al blanco y... ¡BANG!

-Wow... ¡Buena puntería!- Me felicitó James.

-Gracias.-Sonreí satisfecha. Vaya, no lo hacía nada mal. Estuve un buen rato haciendo lo mismo.

-Bien. Veo que el nivel principiante lo tienes dominado. Pasemos a algo más difícil.-James de frotó las manos con diversión. Salimos de esa sala y nos fuimos a otra que estaba al lado.-Es casi lo mismo. Tienes que darle en el blanco pero con el pequeño detalle de que ahora se mueven.

¡My Secret! [Completo] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora