Cita no tan perfecta
-Estás preciosa.- dijo Sarah, orgullosa de su creación, es decir, mi maquillaje, peinado y atuendo.
-Te lo agradezco, Sarah.- dije mirándome en el espejo mientras ella guardaba sus cosas. La verdad es que había hecho un gran trabajo.
-Qué te diviertas en tu cita con Drogo. Cualquier cosa que necesites llámame e iré a buscarte.
-No creo que sea necesario pero gracias.- le sonreí. Me dio un abrazo y luego de despedirse y tomar sus cosas se fue que su casa. Me puse de pie y me miré en el espejo de cuerpo completo. Llevaba un vestido blanco ajustado hasta la cintura y luego suelto hasta unos centímetros antes de la rodilla combinado con un cinto negro en la misma, con unas mangas transparentes del mismo color que dejaban mis hombros al descubierto; luego las piernas al descubierto hasta llegar a mis zapatos blancos, ya que Drogo me dijo que al lugar al que íbamos no era recomendable llevar tacones o algo por el estilo; unos anillos en los dedos; unos pendientes; el cabello suelto que caía en ondas que se veían muy naturales; y por último el maquillaje profesional que me había hecho Sarah, que combinaba perfecto con el atuendo. Era muy natural pero me daba un aspecto más bonito. Espero que a Drogo le guste. Aún recuerdo cómo me propuso una cita.
Estábamos tirados en su habitación hablando sobre cosas triviales mientras veíamos una película en su televisor. Era una romántica en la cual los protagonistas estaban teniendo su primera cita oficial.
-Qué romántico.- suspiré enternecidamente. Drogo me miró de reojo mientras aún me acariciaba el cabello. Amaba que hiciera eso, era muy relajante.
-¿Por qué una pareja que ya está saliendo tiene citas?- preguntó mirando la película. Moví la cabeza para mirarlo y sonreír.
-Porque uno nunca termina de conocer al otro, siempre hay cosas que uno quiere saber.
-¿Y por qué no se las preguntan y ya?- rodé los ojos y reí.
-Es más romántico y divertido de esa manera. Que poco romántico eres.- dije volviéndome a acomodar en su pecho, para que siguiera jugando con mi cabello. Pero no lo hizo. Fruncí el ceño y volví a mirarlo. Estaba pensativo.- ¿En qué piensas?
-¿Crees que soy poco romántico?- sonreí enternecida y puse una mano en su mejilla.
-No necesitas ser como los clichés de las películas, me encantas así como eres.- le acaricié la mejilla con el dedo pulgar.
-No me respondiste a la pregunta.- elevó una ceja. Reí y deposité un beso en sus labios.
-Eres romántico a tu manera.
-¿Eso es bueno?
-Es perfecto. Te quiero por los pequeños detalles qué haces por mí, porque me ayudas en todas estas cosas extrañas por las que debemos pasar, porque me cuidas, me das tu cariño... y esos detalles me parecen lo más románticos que podrían existir. No necesito que me recites un poema o me prepares una cita a la luz de las velas, tú eres romántico con tus acciones y palabras hacia mí.- Me miró atentamente mientras decía todo eso.
-Cada día me enamoro más de ti, cosita. Mira lo que me haces, Riley Montés. Yo no era así, tú me cambias para bien y haces que me vuelva loco con solo una mirada.
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¡My Secret! [Completo]
FantasiSoy una chica un tanto peculiar... ¿guardarías mi secreto? Esta hermosa historia continua en "My No So Secret" ¡Disfruten!