¡My Secret! [Completo]

¿Qué hice mal? (8)

Ya han pasado dos semanas desde que me encontré con Drogo en el bosque. Estas semanas me acerqué más a los hermanos Bartholy. Fui varias veces a su casa. Sé que lo que les voy a decir va a sonar raro pero... hasta revisé el espejo, pero no tenía nada malo, solo era un simple espejo. No sé qué es lo que habré tomado ese día para haber visto o mejor dicho no visto el reflejo de Lorie. También me he hecho muy cercana a Sarah, y eso me agrada bastante. En los otros lugares a los que fui me costaba hacer amigos. Las personas pueden llegar a ser muy malas. Hablando de Sarah, hoy me voy a una salida nocturna con ella. Ya me aseé, vestí un poco casual para la noche pero apropiado para un bar, maquillé ligeramente y me perfumé con las más ricas fragancias... bueno, me puse el primer perfume que encontré pero es divertido hablar de esa forma. ¡Ya estoy lista para divertirme! Sarah me dijo que iríamos a un bar a tomar algo y a bailar. ¡Qué emoción! Hace mucho no salía a divertirme. Salida de chicas, allá voy. Justo en ese momento escuché el timbre.

-¡Voy!-Grité y bajé a toda velocidad para abrir la puerta.-¡Sarah!-la saludé con alegría.

-Hola, preciosa. ¿Estás lista para divertirte hoy?-dijo después de darme un corto abrazo.

-Por supuesto, vámonos.- Tomé mis llaves y salimos rumbo al bar.

Fuimos caminando porque Sarah me dijo que el bar estaba cerca, y tenía razón. Cuando llegamos pude apreciar el bar por fuera. Se notaba que era muy popular, ya que había mucha gente. Entramos, nos sentamos en la barra y pedimos unas bebidas. Sarah parece conocer al barman, ya que le hablaba como si fueran amigos de toda la vida. Estuvimos charlando de un millón de cosas, es una chica muy divertida, simpática y con la que te sientes cómodo al instante. El de la barra nos trajo las bebidas, interrumpiendo la conversación. Mierda, no traje dinero. De lo emocionada que estaba olvidé traer la billetera. Discretamente utilicé mis poderes para robar dinero de un chico que se encontraba allí.

-Yo invito.-Le sonreí a mi amiga. En situaciones desesperadas hay que tomar medidas desesperadas, no me juzguen.

-¡Gracias!-me agradeció Sarah. La miré y no sé por qué pero la noté un poco tensa.

-¿Va todo bien?-dije poniendo mi mano en su antebrazo.

De repente, como si mi "¿Va todo bien?" hubiese hecho algo en ella, se relajó por completo y me sonrió.

-Sí, todo bien. ¿Bailamos?- Sarah es un poco rara a veces. Bueno, pensándolo bien, bipolar le queda mejor. ¿O los dos? Asiento y la sigo a la pista de baile. En eso, sentí una mano apoyarse en mi hombro. Cuando me di la vuelta, lo vi.

-¡Drogo!- le sonreí pero Sarah se tensó. Comprendo que es mejor alejarnos de él.

-Hola, Riley.-Me dedica una sonrisa socarrona. Luego miró a Sarah.-Sarah...-murmuró a modo de saludo, como si su presencia no tuviera importancia. De verdad, ¿qué pasó entre ellos? ¿Cuál es el problema entre los Bartholy y Sarah? Está súper incómoda. Me suplica con la mirada que nos alejemos de Drogo.

-Wow, karaoke. ¿Sarah quieres cantar algo conmigo?-inventé esa excusa tonta.

-Lo siento, cantar no es lo mío.-dijo apenada. La miré mal por no haber entendido mi indirecta.

-¿Vamos, Sarah?-le repetí con más ímpetu.

-Ah, claro, sí, sí, está bien.-Esta chica no sabe captar indirectas. Le sonreí a Drogo como despedida y este me guiñó un ojo. Sabe que me alejo por Sarah y se burla de eso.

Y con eso subimos al escenario. Le pedí al chico que me ponga alguna canción que sea en dúo. Empecé a cantar con Sarah, haciendo algún que otro pequeño baile para reírnos. Algunos bailaban, otros aplaudían y algunos silbaban. Amo cantar. Siempre que lo hago, siento una energía inexplicable invadirme todo el cuerpo, como si me sintiera libre. Empecé a cantar desde que aprendí a hablar básicamente. Hay una canción que siempre resuena en mi cabeza. Es como una canción de cuna pero en un idioma que jamás había escuchado, idioma el cual no comprendo. Siempre la canto para tranquilizarme. Me llena de una energía calmante. Veo a Sarah que está bailando y cantando como puede su parte de la canción, realmente se está divirtiendo. Creo que el alcohol la ayudó un poco. También vi a Drogo pero a diferencia de Sarah, él estaba serio, inmóvil como una estatua, mirando fijamente, como si nos estuviera analizando. ¿Qué le pasa? ¿No le gusta bailar? Y yo que le veía tan fiestero... Terminamos de cantar, todo el mundo nos aplaudió y nos bajamos del escenario.