Together (Camren G!P) COMPLETA

Capítulo 29 "Con amor todo es mejor"

*POV LAUREN*

Conduje el auto hasta mi departamento, la verdad ya quería liberarme de la presión que hacía mi pantalón en mi pene.

Mientras conducía en cada semáforo en rojo que nos hacía parar tocaba y acariciaba a Camila mientras nos besábamos con tantas ganas de comernos una a la otra.

-¡Lauren me voy a correr!- gimió fuerte cuando metía mis dedos en su húmedo coño y con el pulgar sobaba su clítoris hinchado. -¡Más! ¡Más!- rogaba entre gemidos y los claxon de los coches de atrás me hicieron percatarme de que el semáforo ya estaba en verde. -Oh Demonios ¿qué haces?- protestó Camila mientras sacaba mis dedos y los chupaba para volver al volante.

-Deberíamos esperar a llegar, o te dejaré apunto del orgasmo en cada semáforo- le dije y ella comenzó a bajar su mano a su centro.

-Si tu no me vas a dar placer lo haré yo- habló y se abrió de piernas en el asiento voltéandose para que la viera.

-Sabes que me vas a distraer y podríamos chocar ¿verdad?- hablé y cerré sus piernas concentrada en el camino.

-Deminos conduce más rápido entonces- habló y se pasó al asiento trasero. -Si no te quieres distraer, no escuches y no veas por el retrovisor- dijo levantándose el vestido y bajando su mano a su centro. Evité mirarla por un rato y cuando comencé a escuchar sonidos húmedos y gemidos no aguanté lo suficiente y me estacioné en una callejón que estaba a media cuadra del semáforo donde paré de nuevo.

-Ah, ah, ah- gemía despacio y aproveche para apagar el auto y meterme en el asiento de atrás tan rápido que no pudiera preguntar que pasaba. -¿qué haces?- habló en un gemido cuando me coloqué encima de ella y desabroché mi pantalón.

-Te voy a follar ¿o no querías eso?- hablé y tomé sus labios en un beso caliente y lento. -Abre las piernas- dije jadeante separandome un poco del beso pero ella volvió a juntar nuestras bocas jalando mi camiseta abriéndola y rompiendo todos los botones. Besó mis pechos y chupó mis pezones, abriendo las piernas me rodeó con ellas y me puso su centro aún tapado con sus bragas frotándose con mi miembro. Me pude acomodar mejor a gracias a su abertura de piernas y me saqué el pene por arriba del bóxer ya duro como piedra y me dispuse a ser yo quién frotara el pene en las bragas empapadas de mi mujer.

-Oh, Lauren fóllame ya- gimió haciendo la cabeza hacia atrás dándome permiso y agaché la mía para ver, tomé mi pene desde la base y en un movimiento brusco puse las caderas de Camila arriba de mí. Movía su tanga hacia un lado y la rompí arrancándola de su cuerpo, metí la punta para adentrarme lenta y completamente en ella. -AHHHH- soltó un gemido fuerte de dolor cuando enterré de golpe la mitad y me miró pidiendo más.

-¿Quieres toda adentro?- dije jadeando y dejándole un corto beso en los labios.

-Toda, toda, métemela toda- gimió y entré completamente. -Oh si mi amor- gritó y pude notar que los vidrios ya estaban totalmente empañados por el calor que hacía adentro sabiendo que era diciembre y hacía frío afuera.

-Te voy a dejar sin caminar una semana si sigues gimiendo con esa sensualidad- hablé y sonreímos las dos con la frente de una pegada a la  la otra.

-Lléname con tu leche, quiero sentir que disparas dentro de mi interior tu semen caliente mi amor- habló y sentí que me moriría, sus gemidos, el sonido de nuestras pieles húmedas chocando, mis bolas pegando en su culo, el calor que se sentía y ella háblandome sucio, era el paraíso.

Seguí mis embestidas lentas pero duras por unos 20 minutos y sentí que las paredes de Camila apretaban mi miembro.

-Córrete al rededor de mi, bebé- susurré en su oído y acaricie sus mechones de cabello que caían por el ya despeinado moño que traía.

-Aaaaahhh, ¡Oh mi Dios! ¡Más! ¡Más!- gimió en un grito y se retorcía debajo de mí lo que me dió oportunidad de correrme dentro de ella siguiendo su orgasmo con el mío.

Caí a su lado jadeando y con mi respiración tan agitada como la de ella, tenía sus bragas desgarradas en mi mano y su vestido estaba subido hasta sus pechos mientras que mi camiseta estaba sin botones abierta y mis pechos fuera de esta ya que no llevaba sostén.

-Eso... eso fué espectacular, nunca lo habíamos hecho en el coche- habló con un hilo de voz tan débil como mi zona íntima.

-Y no sabes lo que viene en el departamento cariño- hablé y con los brazos la acerqué a mí lo más que pude besándola en la frente.

-Te amo mucho Lern, mucho- dijo besando mis labios.

-Yo te amo aún más- dije y la abracé fuerte.

-Deberíamos ir al departamento ya, quiero ducharme- habló y se levantó para sentarse y acomodarse el vestido.

-Si, y creo que tendré que cambiarme de ropa, me rompiste todos los botones de mi camiseta- dije riéndome y ella golpeó mi hombro con una sonrisa en la comisura. -Me me pondré un outfit más cómodo llegando allá- dije abrochándome el pantalón y cerrándome el saco

-Y rompiste mis bragas, babosa- dijo moviéndose para irse al asiento del copiloto.

-Perdón, pero no me dejaban entrar en ti- le dije y salí por la puerta trasera y me metí por la puerta al volante.

Saqué el auto del callejón y me dispuse a conducir hasta el centro de la cuidad.

-Lauren ¿sabes donde quedó la salsa?- habló Camila cuando nos paramos en el último semáforo a una cuadra del departamento, removiendo las bolsas de la comida y con su quesadilla en el plato en las manos.

-Estaba en una bolsa con las verduras- hablé y tomé una bolsa de las de la comida.

-Oh, si, esa es, ¿me la das porfavor?- pidió Camila y le dí la bolsa en las manos.

Llegamos al edificio donde estaba mi departamento y bajamos las cosas del auto directo a la habitación.