-Boo-Boo, ¡¿como llegaste aquí?!- gritó ella emocionada.
Hacía algunos minutos ella había llegado a la casa, más bien, mansión en la que estaba por quedarme. Decidí quedarme en la casa pues aunque no conocía nada a Chris, él tenía algo de razón. Dixon era bastante inteligente y en el momento que no me encuentre en mi apartamento, en casa de mis padres o en el apartamento de Karen, él iría a buscar hasta en los lugares más recónditos. Y por donde primero empezaría era por los hoteles y moteles de Malibú y todos sus alrededores.
-¿Recuerdas al hombre que me dijiste que lo invitara a bailar?- pregunté viendo a mi mejor amiga con la boca abierta de lo asombrada que estaba por la casa.
Esa casa era un lujo, literalmente, era una casa de ensueño. Tenía seis habitaciones cada una con sus respectivos baños. Era moderna y la madera fina combinada con todo dándole un toque perfecto. Ni hablar de la vista, era simplemente impresionante, todas las paredes de las habitaciones que daban al mar eran completamente en cristal, un cristal especial que permitía ver hacia afuera pero no hacia adentro. ¡Era de ensueño!
-¿El lindo gorila?- preguntó y yo estuve a punto de soltar una carcajada pero no pude. Chris en ese momento entraba a la sala con una sonrisa.
-¿Quién es el lindo gorila?- preguntó y Karen por poco muere de vergüenza pero aún así ella habló
-Tú, por supuesto- dijo con una sonrisa cómplice y vi como Chris soltaba una pequeña carcajada.
-Ya Boo-Boo, ¿donde está mi teléfono?- pregunté y ella evitó mirarme al girarse y ver unas figuras en unos estantes empotrados a la pared -Karen...- advertí.
Ella tomó un Quijote en cristal y fingió estar concentrada en la figura -Hubo un problemita con el- dijo y fruncí el ceño
-¿Como que un problemita? ¿Qué hiciste con mi teléfono?-
Miré a mi mejor amiga y aún jugaba con la figura. Se veía nerviosa y culpable a la vez, de seguro había tirado mi teléfono. No la culpo porque era algo que tenía pensado hacer pero después de que lo sincronizara con mi laptop. Pero de seguro perdió la paciencia al recibir tantas llamadas y terminó lanzándolo por la ventana de su auto.
-Lo tiré por la ventana...- susurró con una sonrisa de culpabilidad.
Imaginarlo a que sea cierto fue chocante. Tomé asiento y rasqué mi frente sin saber que hacer. Por un momento alcé mi vista y vi a Chris sonreírle y hacerle unas señas de que lo había hecho bien.
-¡Chris!- reproché y la sonrisa en su rostro desapareció
-¡Muy mal hecho, Karen!- gritó y yo rodé los ojos
No pude evitar reírme. El rostro asustado de Chris al cacharlo me hizo soltar una carcajada. Karen caminó hasta mi y se sentó en el pone brazo del asiento en el que estaba sentada.
-Sorry Boo-Boo pero él idiota de tu mar...de Dixon no dejaba de llamar. La primera se la contesté pidiéndole tranquilamente...- yo fruncí el ceño, ¿tranquila? Ayyy Karen ni que no te conociera -que no volviera a llamarte-
-No sé que pasó...- habló Chris viéndonos -ohh y perdón por entrometerme en lo que no me concierne pero al parecer el protagonista de esta historia ha sido un verdadero idiota. Así que creo que tu mejor amiga hizo lo correcto. Y como te dije de seguro no tardaría en buscarte y encontrarte.- dijo y yo solo lo observé en silencio.
-Hasta que alguien piensa como yo. Además él tiene razón ya sabes como son tus padres y de seguro lo ayudarían a buscarte.- dijo y mi ánimo terminó por fastidiarse.
Mis padres, de seguro, lo ayudarían aunque no supieran el motivo de mi desaparición y aunque lo supieran también lo ayudarían. ¿Porqué? Porque simplemente así son ellos y Dixon de seguro se había hecho la víctima. Lo amaba pero debía reconocer que desde que conocí a Dixon, supe que él era una mosquita muerta. Ambicioso y oportunista. De seguro no le había dicho la verdadera razón de mi desaparición justo el mismo día de mi boda. Haciéndose el triste marido abandonado -Gracias por deshacerte del teléfono- dije y recibí un fuerte abrazo de mi mejor amiga.
-Ya es tarde, Karen, si quieres puedes quedarte- dijo Chris y yo fruncí el ceño.
¿No que solo yo podía quedarme? Miré a Chris confundida y él negó con una sonrisa encantadora.
-¿Y quién se negaría a esto?- preguntó mi mejor amiga mientras veía todo el piso principal.
-Cierto, ahora mismo le digo al dueño- dijo tomando su teléfono y saliendo por la sala directo al patio trasero.
-Es un amor...- susurró con una sonrisa mi mejor amiga -Material para ser un novio. Guapo...guapísimo, atento y quién sabe que más-
-¿Quién sabe que más? ¿Material para ser novio? A ti como que se te está olvidando una cosita...uhm déjame ver...- puse mi cara pensativa -ah sí ya sé, aunque no lleve el anillo sigo casada, con un idiota pero estoy casada.-
-¡Ese idiota no merece respeto de tú parte!- gritó y vi hacia el patio. Chris todavía hablaba por el teléfono.
No se merece ningún respeto pero yo no soy como él, yo no soy una loca que piensa devolverle el cuerno. Aunque se merece eso y más pero no estoy dispuesta a hacer algo como eso. Y no es por respeto a él, porque Dixon no lo merece, sino por respeto a mi. No pienso estar en boca de nadie porque sé que lo estaré. Esta sociedad está muy jodida al pensar que cuando un hombre le es infiel a su mujer es un macho y se lo aplauden pero cuando una mujer decide serle infiel a su hombre, de prostituta para bajo no la bajan. Doble moral.
-Karen no pienso pagarle con la misma moneda. Sólo quiero anular mi matrimonio cuánto antes. Que él se quede con la estúpida de mi hermana y yo me concentraré en mi trabajo- dije y mi mejor amiga rodó los ojos. Definitivamente estaba saliendo la mujer vengativa.
-Tienes que enseñarle que contigo no se juega. Yo sigo creyendo que debes vengarte y hasta hacerle una que le duela, que se arrepienta por hacerte lo que te hizo- dijo y yo negué -Boo-Boo piénsalo y mientras lo haces ya te conseguí el protagonista de tú venganza...- dijo y yo fruncí el ceño. Se giró y miró al patio y en el fondo estaba Chris con su teléfono en las manos.
-¡No, Boo-Boo! Chris se ha comportado como todo un caballero conmigo y no puedo utilizarlo de esa manera. Además, ¿quién te dijo que yo quería vengarme? Creo fervientemente en la ley del karma. Así que si me fue infiel muy pronto terminará igual de coronado que yo.- dije y Karen volvió a rodar los ojos.
-A veces odio tú pensamiento tan pacifista. Dixon es un cabrón que merece lo peor del mundo y tú tan pacifista y espiritual sin hacer nada para que sufra como tú lo estás haciendo.-
-Sí, lo que me hizo fue algo que jamás olvidaré pero no tengo fuerzas para pelear por algo que ya está hecho. Mi esposo me engañó con mi hermana el mismo día de nuestra boda, no puedo cambiar nada de eso- dije y alzo mi mirada y veo a Chris con su ceño fruncido -¿Tú amigo dijo que no?- pregunté y él negó.
Karen habló y dijo que quería comer sushi y le preguntó a Chris si habían restaurante cercas. A mi en lo personal no me gustaba nada el sushi, la mayoría de las personas que conozco dicen que es riquísimo pero no me llama la atención comerlo. Así que yo pedí comida mediterránea. Invité a que se quedara a comer en muestra de agradecimiento y tuve que casi rogarle para que lo hiciera pero terminó aceptando. Nadie se resiste a los ojitos de borreguito herido. Nadie.
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Hola hola mis amores
Conocimos más de nuestra Ashley y sus pensamientos y sentimientos.
Ya les tengo el primer Extra de Heart of Wolves, pero será publicado el lunes como motivo de Navidad. Un regalito 🎁🎄
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Tell me you love me
Romance¿Como es el destino, no? El día más esperado e importante para Ashley se había convertido el peor de todos y solamente en segundos. #837 in Romance 1/28/18 #833 in Romance 1/29/18 #653 in Romance 2/1/18