21. ¿Soy su primero?

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Chris POV

-¡Pero quiero estar allí!- grité y Ashley volvió a negarse.

-No puedes. Se complicaría todo.-  dijo preocupada

-Más de lo que ya está no creo. Además no te dejaría entrar a la boca del lobo sin mi- dije acercándome a ella. 

Habíamos llevado veinte minutos discutiendo esto. No era algo que yo pensaba que necesitaba discutirse. Era muy sencillo la decisión; iba o iba a la vista de su divorcio. No discutiría el bienestar de mi novia y yo tendría que estar allí apoyándola.

-Entiendo que te sientas preocupado, yo también lo estoy pero ya estás metido hasta el cuello y no quiero que toda esta...cosa termine por hundirte- agregó con súplica.

-Ahora quiero que entiendas que después de lo que ha hecho Dixon no te dejaría sola. Eres mi novia Ash y me preocupo por eso mismo. Quiero que estés bien y cerca de ese idiota sé que no lo estarás- hablé decidido y Ashley rodó sus ojos antes de soltar una sonrisa.

Era cierto. Me preocupaba que Dixon hiciera algo en contra de ella. Y de seguro lo haría. Ya había cruzado un límite bastante fino al chantajearla nuevamente con fotos de ella desnuda. Eso definitivamente no era de un verdadero hombre. Yo no traicionaría la confianza de una mujer que fue mi novia por tanto tiempo solo por un capricho. Era caer más bajo de bajo.

-Está bien.- dijo derrotada y yo me acerqué a ella.

-Agradezco que hayas aceptado.- dije y ella negó -Aunque como quiera iría-

-Ahora podemos dejar de tener esta pelea absurda y comer. Muero de hambre- dijo y yo asentí antes de dejar un beso en sus labios.

-Vamos ponte esto- pedí y se puso un jacket en cuero negro.

Ese jacket era una réplica del que yo tenía y se lo había regalado unos de esos días que uno no necesita motivo para celebrar. Solo el motivo de estar enamorado de una mujer como ella. Lo había mandado hacer a la medida de ella y le había quedado fantástico. Así que ahora ambos salimos con el jacket a comer algo. Caminamos unas cuadras y vimos un lugar tranquilo y acogedor justo en la esquina de la cuadra. Un pequeño restaurante de pizzas artesanales. Decidimos parar allí y Ashley estaba muy feliz con el lugar, definitivamente fue una buena elección.

-Viajaré a Los Ángeles este fin de semana- comencé a hablar -¿quieres ir conmigo?- pregunté mientras ella veía el menú.

Era un viaje de placer, si se podía decir así. Mi hermana Angie estaba embarazada y haría una fiesta para revelar el sexo del bebé, algo que estaba muy de moda. Ella me exigió, suplicó y obligó estar allí para ese momento y de seguro para el momento de su nacimiento. Angie y Cully eran mis hermanos y éramos muy unidos así que de seguro también le había exigido a Cully estar en ese día.

Toda mi familia estaría encantada de conocer a Ashley y sobretodo mamá. Ella estuvo mucho tiempo pidiendo conocer a una de mis novias pero jamás quise llevar a ninguna mujer antes. Sé que mi madre tiende a encariñarse con  nuestras parejas, ya ella se había encariñado con una novia de Cully y cuando ellos terminaron, mamá la sufrió como si fuese una hija. También pasó lo mismo con un novio que Angie tuvo por tres años. Así que debía pensarlo dos veces antes de llevar a alguien a conocer a mamá pero no tenía que pensarlo dos veces con Ashley a mi lado.

Mamá adoraría conocer a Ashley y estaba cien por ciento seguro que ella era la indicada. Ashley era la mujer que quiero tener junto a mi en los momentos familiares más importantes, en los buenos y en los malos. Tenía la plena seguridad que ella sería quien estaría junto a mi cuando ya esté viejo.

Tell me you love meDonde viven las historias. Descúbrelo ahora