La alarma sonó a las seis y media de la mañana, gruñí y faltó poco para tirarlo contra la pared. El día de por sí iba a ser largo y tedioso y traté de levantarme con mejor ánimo. Era el día en que por fin sería libre del martirio de estar casada con Dixon, o por lo menos eso era lo que imaginaba, y solo pedía que no hubiese sorpresas como la última vez.
-Buenos días, mi amor- dijo Chris con voz ronca. Ay papá, cuanto amaba su voz adormilada.
Sus brazos me acercaron a él y dejó un beso en mi hombro. ¡Señoras y señores ahí desapareció mi mal humor mañanero! ¿Como lo hace? No lo sé ¿Como hace que mi ánimo cambie con un simple roce de sus labios en mi piel? Entrelazó sus manos en mi vientre y sonreí, su piel cerca de la mía hacía que la mía se erizara.
-Buenos días, bebé- susurré acariciando sus brazos.
-Te pediría quedarnos más tiempo pero debemos alistarnos. Tenemos que estar en una hora allí.- habló y era cierto. Debíamos estar antes de lo previsto para hablar con mis abogados.
Me quedé en silencio por algunos segundos y luego asentí. ¿Que pasaba si al fin de cuentas no me otorgaban el divorcio? No quiero estar atada a él. Chris está en mi vida y quisiera tenerlo por todo el tiempo posible pero tampoco lo quiero en la posición que está, marcado como el amante. Y con Dixon siendo de piedra, mejor dicho de cantera, en nuestro camino era imposible. En algún momento él terminaría cansándose por vivir como "el amante" por personas y medios de comunicación que no saben la historia real.
-Sabes...- susurré y él asintió -tengo miedo...- dije y sentí sus brazos aferrarse más a mi -siento que no podré divorciarme de él. El victimizarse le está haciendo ganar terreno y eso me aterra.-
-Todo estará bien, podrás divorciarte y por fin estarás tranquila.- dijo antes de dejar un beso en el cuello. Suspiré y una sonrisa escapó de mis labios.
-Eso espero...- dije y me giré quedando frente a él -Gracias- agradecí para dejar un beso en sus labios.
-Si sigues así llegaremos tarde...- susurró antes de besarme rápidamente y yo asentí. No era momento de hacer el amor.
Cuarenta y cinco minutos después estábamos subiendo a la camioneta de Chris. El viaje comenzó en silencio y es que no tenía nada que decir. Los nervios y la tensión me mantenían en silencio. Chris tomó mi mano y la entrelazó con la suya, estaba ahí para mi y eso lo apreciaba mucho. Al principio no quería que él fuera porque no quería que Dixon formara un problema pero luego de recapitular todos los pros y contras era casi necesario que Chris me acompañara. Además que nadie iría más que Dixon, su abogado, mis abogados y yo.
-Todo saldrá bien- beso el dorso de mi mano y le dediqué una sonrisa sin mucha fe -Lo prometo.- añadió y asentí.
Resoplé con nerviosismo cuando Chris se estacionó en la corte judicial. Ya mis abogados estaban allí esperándonos, así que cuando me bajé los saludé.
-Que bueno verle señor Pratt, desearía hablar con usted.- habló el mayor de los otros abogados.
-Venga conmigo señora Ashley- pidió mi otro abogado.
-Claro- dije caminando a donde el abogado me indicaba.
Me explicó el proceso y que podría pasar. Si desperté con la tensión y la duda de salir bien, esto lo estaba empeorando todo. Me explicó que era muy probable que mis fotos estén como evidencia y él y su abogado, que para mala suerte Murray me advirtió que era uno de los mejores abogados de la ciudad, hayan tergiversado todo. Así que debía prepararme para lo peor y mantener la calma en todo momento. Algo que de Chris no pienso que pase, él se había convertido en un novio sobre protector, era algo que no me molestaba, y si usarían esas fotos u otras Chris no estaría muy contento por eso.
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Tell me you love me
Romance¿Como es el destino, no? El día más esperado e importante para Ashley se había convertido el peor de todos y solamente en segundos. #837 in Romance 1/28/18 #833 in Romance 1/29/18 #653 in Romance 2/1/18