Esquizofrenia ~ulquihime~

ESQUIZOFRENIA 49

... Ulquiorra ...
—No —Volví a negar, ya lo había hecho doce veces anteriormente, y lo haría doce veces más de ser posible.
—Por favor —Me insistió.
—He dicho que no.
—Anteriormente no le has dado un regalo por cumplir meses con ella, este es el momento.
—No es algo que importe tanto.
—Si ella te escuchara decir eso, se enojaría, ¿acaso quieres eso?
—No.
—Entonces, ¿lo harás?
—No.
Ella tensó la mandíbula y formó sus manos en puño a sus costados.
¿Qué era lo que pasaba?
Tatsuki quería que le hiciera una sorpresa a Orihime por nuestros seis meses de noviazgo, ella quería que le preparara una cena en un restaurante de lujo y la llevara a bailar —como sino recordará el ridículo que hicimos en la boda de Sora y Azazel— cuando yo solamente quería darle un peluche o algo bonito, prepararle una cena —en lo que Uryu tendrá que ayudarme— y ver una película juntos, y tal vez, solo si no nos quedamos dormidos, tener sexo toda la maldita noche, si, ¿por qué no? Desde que nos dispusimos a vivir juntos —un mes y medio— no hemos tenido el tiempo ni la energía de pasar una noche, o tarde, o una mañana juntos, y sinceramente tenía ganas de aprovechar esa fecha tan "importante" según Tatsuki, en disfrutarla al cien por ciento.
Ese día en especial a Ritsuko se le ocurrió no abrir el negocio, solo porque se iba a ir de cita con un hombre que conoció en un grupo de citas, algo en lo que no estoy muy de acuerdo, ya sé que es una mujer adulta y ruda, pero no tendría por qué ir por la vida saliendo con personas que no conoce.
Bueno, eso ya es lo de menos, el caso es que nos dejó el día libre a Orihime y a mí, así que ahora Tatsuki quiere "ayudarme" para darle una sorpresa a Orihime.
—Ya sé que no es tu estilo, pero...
—No —La interrumpí. ¿Cuántas veces van de que le digo no?
—¡Argh! Te odio.
—Gracias.
Ya no me respondió nada más, y por fin pude respirar tranquilamente.
Caminamos al parque donde nos quedamos a ver todos por un trabajo escolar, como siempre, quise hacerlo individualmente, pero no, ellos me metieron a su maldito equipo.
—¿Y Orihime? —Pregunté cuando no la vi en ninguna parte.
—Ha ido con Lili por una paleta —Respondió Uryu con la vista en sus apuntes, acomodándose a la vez los anteojos.
—¿Hace cuánto que se fueron?
—No mucho, como un poco menos de diez minutos.
—Hmp, entiendo.
—¡Ulquiorra! —Me gritó Orihime saltándome por la espalda.
—Espera —Le dije sujetándome fuertemente de un árbol antes de caer al suelo con ella.
—Perdóname —Me soltó sonriendo tímidamente —Es solo que te extrañé.
—Apenas y nos separamos media hora.
—¡Es mucho para mí!
—Si, aja, lo que tu digas.
—Ulquiorra, últimamente está muy grosero, ¿acaso ya no me quieres? —Me dijo de manera muy dramática.
—¿Qué? —Le mire confundido.
—Dejen sus peleas maritales para después —No llamo Uryu antes de que ella me contestará —Ahora lo importante es esto —Dijo señalando los temas de exposición.
Los demás asentimos y nos pusimos a estudiar a todo dar.
Pasamos dos horas y un poco más estudiando, investigando y haciendo las láminas de exposición, eran más o menos las cuatro y media de la tarde y yo ya quería irme a preparar todo para mi día a solas con Orihime.
—¡Dereck! —Grito Lilith haciéndonos dar un brinco del susto.
Miramos a la persona a la que le grito, y en efecto era él, caminaba con una mochila al hombro y a lado de él venia su amigo, Draco.
Orihime y yo nos miramos con el ceño fruncido y regresamos la mirada a las dos personas que venían hacia nosotros —específicamente hacia Lilith— sonrientes, bueno, solo Dereck.
Escuchamos un pequeño gemido de frustración y volteamos a mirar a la persona que lo soltó:
Era Tatsuki...
¡Mierda! Reaccione inmediatamente.
¡Mierda! ¡Mierda! ¡Mierda! ¡Mierda!
¡Tenía que sacarla de aquí ahora!
Orihime me miro preocupada, ella también se había dado cuenta, y tarde también se dio cuenta Lilith y nos susurró un pequeño "Lo siento"
Corrió a ellos para que no avanzaran a nosotros.
—Tatsuki, vayamos por un jugo —Le dijo Orihime ocultando su nerviosismo —¿Tatsuki?
Mire a Tatsuki, la cual tenía la mirada prendida en las dos personas que estaban con Lilith, su piel había palidecido por completo y sudaba frío.
—Parece que Lili ha encontrado a sus amigos —Dijo Rukia sonriendo, mire a Kurosaki y me di cuenta que él también había notado el problema.
—¡Vayamos a dar una vuelta! —Dijo tomando a Tatsuki del brazo —Vamos Tatsuki.
—S... Si —Susurro empezando a temblar.
—Pasa algo, ¿Tatsuki? —Preguntó Uryu notando el comportamiento de su novia.
—¡No! —Respondió inmediatamente —No —Dijo un poco más bajo.
—¡Ah! ¡Hola, chicos! —Nos llamó una voz, supe reconocerla como la voz de Draco.
¡No! Esto no podía estar pasando, ¡no ahora!
—¡Hola! —Saludo Rukia animada.
—Vaya, parece que eres la única amable aquí —Comenzó acercándose a nosotros —Ustedes ya me conocen, no sean groseros —Dijo señalando a Kurosaki y a Tatsuki.
¡Mierda!
—Creo que mis amigos están cansados hasta para saludar —Le respondió Rukia sin saber nada aun —Ha sido mucha tarea para todos.
—Ya lo creo —Dijo acercándose más a nosotros.
—Draco, ven a acá —Le llamo Lilith con molestia.
—Sera mejor que nos vayamos, Draco, ellos deben se estar ocupados aun —Le dijo Dereck.
—Quedémonos un rato, quisiera hablar de los buenos tiempos, ¿o tú qué opinas, pequeña? —Dijo acercando su mano a Tatsuki, la cual retrocedió agresivamente chocando con el pecho de Sado.
—A Tatsuki no le gusta el contacto con personas desconocidas —Dijo Uryu tratando de dar excusa al comportamiento de Tatsuki, aunque él ni siquiera sabía porque actuaba así.
—Lo entiendo —Dijo llevando las manos a sus bolsillos —Pero ella y yo... No somos ningunos desconocidos —Aclaro mirando al cielo, para luego volver la cara a ella con una mirada siniestra —Verdad, ¿Ta-tsu-ki?
—¿Se conocen? —Pregunto Rukia extrañada.
—Mas de lo que se imaginan.
—Draco —Le llamo Dereck —Vámonos.
—Si, si, espero volver a verte, como aquella vez, si, tal vez muy pronto.
Camino hasta Dereck y dio un último vistazo a Tatsuki.
Ella se dejó caer de rodillas, soltando un suspiro doloroso.
—Que extraña persona, no sabía que conocías personas así, Tatsuki —Dijo Rukia sin darse cuenta del desanimo de Tatsuki —¿Tatsuki? ¿Qué haces ahí?
—Yo... Yo no... No sé... —Susurro abrazándose a sí misma.
—Tatsuki, ¿pasa algo malo? —Le preguntó Uryu.
—No... Nada.
—¿Entonces que haces ahí tirada?
—Yo...
—¡Lo siento! ¡Lo siento! ¡Lo siento en serio! —Llegó Lilith interrumpiendo a Tatsuki —Yo lo había olvidado, jamás lo hubiera hecho conscientemente, es mi culpa, perdóname Tatsuki.
—¿Qué pasa? ¿Por qué te disculpas?
—Es qué... A Tatsuki no le agradan esos tipos —Mintió —Y lo había olvidado.
—¿Y de donde se conocen?
—De... Desde el cumpleaños de Ulquiorra, jeje ese día los conoció.
—Yo no recuerdo que hayan tenido contacto alguno.
—Los conozco desde antes, Uryu.
—¿Y por qué no nos lo habías dicho?
—Por qué no quería recordarlo.
—¿Qué paso?
—No hablemos ahora de eso.
—Tatsuki.
—Uryu... Por favor no.
—Tranquilo Uryu —Le dijo Kurosaki tomando su hombro —Ella tiene sus razones.
—Tú también sabes lo que está pasando, ¿no? Tú y Ulquiorra, Lilith y Orihime por sus caras también lo saben.
—Uryu, no es nada, mejor vayamos a casa —Le dijo Orihime —Pronto se hará tarde y...
—No quiero irme hasta saber qué es lo que pasa.
—Yo también quiero saber que pasa —Habló Rukia dando razón a Uryu —Están muy misteriosos ustedes, parece que nos esconden algo, casi todos saben sobre "eso" menos Uryu, Sado y yo, y no me parece justo, somos amigos, ¿no? Los amigos confían los unos a los otros.
—Ru... Rukia, no creas eso —Le dijo Kurosaki con su estúpida sonrisa, ganándose una mirada severa de Rukia.
—No, Ichigo, Rukia tiene razón, ellos tienen derecho a saberlo, y yo... Yo ya no quiero esconderlo más.
—Tatsuki...
—Lo he superado, además, quiero hacerlo, quiero que alguien me escuche, cometí un error al callarme, y creo que este es el momento de decirlo, chicos, antes que nada, no quiero que piensen mal de mí, no lo dije porque desconfiara de ustedes, sino porque me dolía hacerlo, no sé cómo es que ellos se enteraron, es decir, Orihime, Ulquiorra y Lilith, pero tampoco creo que sepan detalles, ni siquiera tú Ichigo, a pesar de que estuviste ahí —Pausó y respiró hondamente y continuó mientras se sentaba en la banca —Hace tiempo, cuando recién habíamos conocido a Rukia, recuerdan que asistimos a una fiesta, cortesía de Urahara, a la cual no asistió Orihime porque Sora estaba enfermo, y aun no conocíamos a Uryu, me fui a casa pasada la media noche, Ichigo insistió acompañarme, pero me negué, así que me fui, cuando me encontré con ellos en un callejón, aún recuerdo sus nombres: Draco, Dereck, Damon, me acorralaron y peleamos por un buen tiempo, creí que los vencería, pero me fue imposible, yo temí lo peor, pero pude ver una oportunidad y la aproveche, pero aun así fue poco, Damon me sujeto fuertemente y... Lo hizo, se aprovechó de mí, de mi debilidad, recuerdo su asquerosa boca recorriendo mi cuello, y sus ásperas manos rozando mis piernas, fue asqueroso, terrible, creí que por fin me dejaría en paz, pero me entrego a los otros dos, afortunadamente llego Ichigo.